Mi Primer Y Único Amor

capitulo 37

-como se te ocurre manejar en ese estado?- dije ante su silencio
-tenia que hablar contigo- dijo sin levantar la mirada
-no crees que ya es un poco tarde?- tenía que tranquilizarme, así que camine a la cocina, tome un recipiente y le coloque agua, lo puse en la estufa y la prendí, tenía que prepararle un café
para que se le bajara semejante borrachera -mirame- di un sobresalto al sentir a Salvador en mi espalda, me acorraló entre la barra y su cuerpo, así que no podía alejarme, solo opte por no girar mi cuerpo para evitar verlo
-quitate Salvador - le pedí tranquila y él se hizo a un lado dejándome pasar, dí unos pasos para quedar a quizá un metro de distancia de él -mirame por favor- me repitió y yo me gire para mirarlo -enserio me crees capaz de traicionarte?- solo desvíe la mirada, él dió dos pasos hacia mi, me tomó con delicadeza de mis mejillas -dime, acaso no confías en mí?- lo miré, sus ojos se estaban humedeciendo -Cesar, ni siquiera tu confías en lo que hiciste o
no hiciste ese dia- las comisuras de mis labios

comenzaban a bajar inevitablemente -amor por favor- cayó una lágrima por su mejilla -no me dejes- cerré los ojos, no quería dejar escapar las lágrimas, sentí la respiración de Salvador cerca de mis labios, abrí los ojos y sus labios estaban a punto de tocar los míos, me solté de su agarre y camine a la estufa, el se dió la vuelta con resignación y se fue al sillon, el agua ya estaba hirviendo así que le preparé el café algo cargado, una vez listo caminé hacia el y se lo dí.

-tomatelo todo- le indique y el asintió -ire a ver a los plebes- me puse de pie y salí del departamento, baje las escaleras y llegue a dónde estaban los autos estacionados, todos estaban recargados en los carros y cuando me vieron caminaron hacia mi las chicas, Matías y Cristhian se quedaron recargados en el carro de Salvador .
-todo bien?- me preguntó Sofía
-si- dije mirando a los plebes que solo tenían la mirada abajo -y ustedes no van a decir nada?- me miraron los dos -Ximena nosotros te queríamos decir pero realmente no sabíamos que decirte- dijo Cristhian -sabes que te queremos, no mames eres nuestra hermana, crecimos juntos, pero Salvador ...- -ya sé, Salvador es Salvador ...- dije y reí un poco -creeme que nosotros también nos sentimos de la chingada ocultandote algo que no sabemos ni siquiera que es- dijo Matías con su semblante triste -hasta pensamos que la morra
lo drogo- dijo en forma de chiste
-pues no suena tan loco eh- dijo Fanny
-mira yo no sé que pedo con la morra, pero de
algo estoy bien seguro, mi carnal te ama un chingo, ha estado enamorado de ti desde bien morrillos- me dijo Cristhian -y creo que eso lo sabes muy bien-
-no sabemos que pasó ese dia- dijo Matías -pero
la neta yo sé que Salvador en sus cinco sentidos
jamás te haría algo así-
-Matías tiene razón- dijo Andrea -yo una vez te
lo dije, Salvador podrá ser lo que quieras, pero
jamás jugaría con tus sentimientos-
-lo que más me duele es la mentira- dije -porque esperarse para decírmelo? Quizá si Natasha no me lo dice el jamás me lo iba a decir-
-Ximena entiendelo, tiene miedo de perderte- dijo la gorda
-y quien me entiende a mi?- no quería llorar, sentía una presión en el pecho -todos están muy seguros que Salvador no me engañaría y que me ama, pero ni él mismo sabe lo que pasó- todos enmudecieron -yo también tengo miedo de perderlo- no pude más y lloré, Matías me abrazo fuerte y yo lo abrace por la cintura -y si solo es un invento de la Natasha?- dijo Fanny
-a que te refieres?- preguntó Cristhian -veanlo de esta forma, Salvador estaba pedisimo, no se acuerda de nada, ésta tipa aprovechó eso

para meterle la duda al Salvador , y obvio Salvador
dudó más cuando ustedes le dijeron que lo encontraron dormido en la camioneta con ésta tipa bajando- dijo haciendo ademanes y mirando a Matías que me seguía abrazando -Ximena piensalo- me miró -ella misma te lo dijo, solo quería chingarte a ti-
-eres muy buena sacando conclusiones- dijo Sofía
-a veces me das miedo amor- dijo Cristhian y todos reímos
-supongo que es una posibilidad- dije soltando
a Matías -pero por ahora, necesito pensar las cosas-
-esta bien- dijo Matías -hablaran mejor cuando tú tengas la cabeza fría y ese cabron esté sobrio- asentí
-voy por él- dije, me despedí de todos con un beso en la mejilla, al llegar a Cristhian me abrazo fuerte
-jamas quisimos lastimarte enana, lo sabes, te queremos un chingo- dijo en medio del abrazo -yo también los quiero- me separé de él, tome su mano y con la otra tome la mano de Matías -los quiero un chingo a los dos- ambos sonrieron y me di la vuelta.

Entré al departamento, Salvador  estaba sentado en la sala, con la taza de café en sus manos, ya iba a más de la mitad.

-me vas a terminar cierto?- me preguntó
mirando el poco café que quedaba en la taza, sinceramente me dió mucha ternura la manera en como lo preguntó
-aun no- me miró con tristeza en sus ojos
-necesito pensar las cosas- me senté a su lado y me miró
-estuve pensando las cosas en cuanto te saliste- ya se escuchaba más sobrio -y te quiero proponer algo- levanté una ceja -ya se, no estoy en posición de pedir nada- negué con la cabeza -solo escúchame si?-
-de acuerdo-
-no sé cómo, pero de alguna manera voy a averiguar que pasó esa noche- dijo y me tomó de las manos -pero lo haré y si es que hice algo, yo mismo te dejare en paz-
-Salvador , eso no va a quitar que me mentiste, me ocultaste las cosas- tomé su mejilla -siempre hemos tenido la confianza para contarnos todo- -me hubieras creído si yo mismo te lo contaba?- levantó una ceja y yo no dije nada -no lo hubieras hecho, pero te voy a demostrar que no hice nada, no sé cómo pero lo haré- dijo seguro
-por lo mientras quiero estar sola- dije y el sonrió de lado
-esta bien, me voy a ir a mi casa, solo por favor, piensa lo que te dije- yo asentí
-no manejes tú- le pedí
-no, le dare las llaves al Cristhian- bebió el último sorbo de café y me miró -mañana te veo- me dió un beso en la mejilla y salió del departamento

No sabía que pensar, quizá Matías tenía razón y Natasha lo drogo, o quizá Fanny tenía razón y todo era un invento de la tipa o quizá si paso algo entre ellos, pero en dado caso, Salvador  no estaba conciente de lo que hacía y ella se aprovechó. Pero aún así Salvador  me había ocultado las cosas... La cabeza me comenzaba a doler de tanto pensar, así que preferí bañarme, me coloque mi pijama y me dormí.