Jimena una mujer de carácter fuerte e indomable dedicada a tomar sus propias decisiones con el sueño de tomar las riendas de empresa familiar y con el sueño de ser la mejor maestra mezcalerá de Phoenix Jimena tenía un gran secreto estaba enamoradae...
Salvador me recostó cuidadosamente sobre las almohadas en las que anteriormente estábamos sentados comiendo. Habíamos decidido salir del agua. Salvador se colocó al lateral de mi, me continuaba besando mientras las gotas de agua de su cabello caían sobre mi rostro, pero no era nada incómodo, con su mano recorrió desde mi cuello, pasando por mis pechos, dando un ligero masaje a cada uno, continúo bajando mientras unía cada gota de agua que había sobre mi abdomen, llegó a mi entrepierna, la acarició suave sobre la prenda, y de apoco fue deshaciéndose de ella, yo le ayude con mis piernas, lentamente volvió a colocar su mano sobre mi entre pierna, y con su dedo medio comenzó a abrir paso en mi parte hasta que lo sentí completamente dentro de mi, no pude evitar gemir. -me encantas- me dijo sobre mis labios mientras hacía movimientos con su mano en mi entrepierna -me encanta escucharte gemir de placer- los movimientos se volvieron un poco más rápidos lo que me hizo gemir aún más fuerte y aventar mi cabeza hacia atrás, con lo que tuvo acceso completo a mi cuello en el que repartió un par de ligeras mordidas, me reincorporé y el retiro su mano de mi, lo incliné un poco hacia atrás y bajé su boxer, dejando libre su amigo, quien al parecer estaba contento de mirarme. Atraje su cuerpo hacia mi, se colocó sobre mi sin dejar caer su peso completo, abrí un poco mis piernas para dejar que el tuviera acceso.
-te amo- le dije mirándolo a los ojos -te amo- me contestó y procedió a darme un beso intenso, al mismo tiempo que sentí como entró dentro de mi, una fusión cálida subió y bajo dentro de mi cuerpo, a cada embestida que Salvador me hacía, aumentaba la velocidad y la exitacion. De una se giró, sin salir de mi, estaba ahora yo sobre él, se sentó y yo estaba de rodillas, sentada sobre el, haciendo movimientos de arriba abajo, mientras jugaba con su cabello y el presionaba mi espalda. Estaba apunto de llegar al climax, tiré sutilmente de su cabello, con cuidado de no lastimarlo, hice que su mirada se cruzara con la mía, mirar su gesto de exitacion fue suficiente para mi, lo atraje y lo besé inmensamente mientras aceleraba mis movimientos y el me sujetaba de la cadera con ambas manos. Juntos llegamos al climax, como era normal, escuché un último gemido de su parte y me estremecí, acurruque mi rostro en su cuello, mientras él me sostenía la espalda y posaba tiernas caricias en ella.
Después de un rato acostados, desnudos y solo platicando y acariciandonos, decidimos regresar al hotel antes de oscurecer. Nos vestimos de nuevo y subimos al carro, Salvador comenzó a conducir. A los 20 minutos de emprender camino, el sueño me estaba venciendo, Salvador me dijo que cerrara los ojos, y caí en un sueño profundo. amor, ya llegamos- sentí a Salvador moviendome con delicadeza, abrí los ojos y ya estábamos en el hotel Bajamos del carro y caminamos adentro del hotel, en el living ví 4 siluetas conocidas, si, eran ellos.
-plebes- corrí a ellos, abrace fuerte a Sofía y a Matías, después a Fanny y a Cristhian -hasta que llegan cabrones- dijo Cristhian -nomas los estamos esperando para ir a cenar- -te quieres bañar antes amor?- me preguntó Salvador -no, está bien- dije -tambien tengo mucha hambre- sonreí -pues vamos- dijo Matías Salimos del hotel y caminamos unos metros, Salvador y yo íbamos cada noche a cenar a un restaurante relativamente económico, pues era donde mejor sazon tenían. Nos sentamos y ordenamos nuestros alimentos, los trajeron. Comenzamos a comer mientras platicábamos. entonces tampoco sabían que venían para acá?- le pregunté a Fanny y a Sofía, ellas negaron con la cabeza -solo nos dijeron que saldríamos de viaje juntos- dijo Fanny -hasta llegar al aeropuerto supimos que veníamos para acá- dijo Sofía emocionada -y a ti como te fue con mi familia?- le preguntó Fanny a Salvador -mija, me adoran- dijo de forma graciosa alabandose a si mismo -ah la madre- dijo Matías -apoco si?- me miró y yo asentí -ya tengo la bendición para casarme con ella- dijo Salvador con una amplia sonrisa y todos abrieron sus ojos como platos -asi que a eso se debe el anillo- dijo Lillian mirando mi mano -a cabron- dijo Matías tomando mi muñeca para ver mi anillo -y no nos contaste perro- le dijo a Salvador entrecerrando los ojos -pa cuando se casan?- preguntó Fanny -no sé adelanten- dije -aun no es el de compromiso- sonreí -pero pronto lo será- dijo Salvador sonriendo -la neta nos da un chingo de gusto verlos felices- dijo Cristhian -nosotros hemos sido testigos de su romance desde morrillos y hoy verlos así nos da un chingo de alegría- -la neta si- dijo Matías -Salvador es otro desde que le dijiste que si- -y ni se diga de ti- me dijo Fanny -pues salud por ustedes!- dijo Sofía levantando su vaso y todos brindamos El resto del viaje fue muy divertido, pasamos tres días maravillosos juntos, reímos, bailamos, gritamos, todo lo que se pueden imaginar.
Estábamos de regreso en casa, era tarde y los plebes se habian ido a su casa pues al día siguiente tendrían presentación de mezcal, cerca de la zona y todas íbamos a ir, incluyendo a Andrea y la gorda. Salvador había realizado una publicación en Instagram, me etiquetó.
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Salvador_los Figueroa Con este anillo sello el amor a una vida larga junto a ti, fidelidad y respeto, con la promesa que el siguiente será el de compromiso te amo mi virita
@cristhian_los Figueroa quien diría que la gemelita se enamoraría así jaja los quiero chinga @Matías_los Figueroa bien poeta mi carnal, si si eres romántico nomás te haces pendejo. Ya que se arme la boda!! @xx felicidades, que duren muchísimos años juntos @Ximena_madrigal arriola mi guapo, soy la más afortunada por tenerte a mi lado, que sea así una eternidad
Me bañe y me coloque mi pijama, decidí deshacer la maleta ya que sino lo hacía después me daría flojera. Saque mi ropa sucia y la coloqué en el cesto, así como mis cremas y demás en su lugar, al fondo encontré un pequeño paquetito de preservativos sellado, entonces lo recordé.... Desde ese día que me dió el anillo no nos habíamos cuidado, un nervio y un escalofrío recorrió mi cuerpo, me senté en la cama y tape mi rostro con mis manos, el miedo que sentí en ese momento fue indescriptible.
