CAPÍTULO 13

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Super Maraton 2/10


Freen

Sabía que debía ir tras Becky y lo haría, pero no sin antes finiquitar mi asunto con

Kanya.

-Estás despedida -le dije furiosa, harta de la situación. El rostro de Kanya se puso más pálido que el de su supuesto moribundo padre.

A ella sí le podría llegar a creer ahora mismo que tuviese una enfermedad terminal. Una parte de mí, aquella que tomaba todo a juego, se rio.

- ¿Cómo qué despedida? Solo te traje un saco...

- No, cariño, tú actuaste con alevosía y ventaja, no me quieras embaucar de nuevo porque no te voy a creer nada. —La tomé por el brazo y la llevé hacia la salida. Kanya se retorció, se apartó y me miró furiosa.

- Bueno, Freen, ¿qué te ocurre? -gritó al borde del llanto—. No puede ser que de un día para otro me hables de amor, me pidas matrimonio y después me salgas con que quieres a otra y me tires como una basura.

- De acuerdo, ese sí fue mi error —reconocí y asenti-. Sin embargo, eso no borra el que hayas querido seducirme para obtener mi dinero o vaya a saber qué buscabas. Seré una imbécil, pero no tanto. Sé lo que implica una enfermedad renal grave y tu padre tiene de todo menos eso.

- Claro que la tiene, Freen -masculló furiosa- ¿Por qué jugaría con algo así?

- No lo sé, Kanya, tú dímelo. —Entorné los ojos y ella relajó el cuerpo y suspiró. Su rostro reflejaba resignación.

- Bien, está bien, lo acepto, te mentí, mi padre no se está muriendo.

- Eres una...

- Escúchame, por favor -suplicó—. Mi padre sí está enfermo, pero de codicia. Él... me obligó a conquistarte. Terminé enamorada de ti, Freen. Esa es la verdad. Tampoco te menti con mi virginidad, aún no he estado con nadie.

- ¿Y piensas que te voy a creer después del teatro que me armaste? Además, ya me da igual. -Bufé—. Vete a la maldita mierda, Kanya. No te quiero ver más aquí. Solo porque soy buena persona, no te arrojaré a la calle sin liquidación, pero...

- Freen, yo de verdad te amo, podemos intentar estar juntas, sin mis padres de por medio. Solo que tendremos que encontrar la manera de que él....

- No, Kanya -dije firme. Sentía un poco de lástima por ella, más no iba a caer, al menos no por su causa.

Becky era la que me haría caer. Estaba desesperada por encontrar el momento adecuado para hablar.

- La quieres a ella, ¿cierto? -cuestionó con los labios temblorosos—. No me pasó desapercibido que ibas a decir su nombre cuando me tuviste en tu escritorio.

- Sí -confesé y sentí un peso menos en mi conciencia—. La amo a ella, siempre ha sido ella.

- ¿Por qué? Ella se entregó tan fácil y tan...

- ¿Qué dices? —Fruncí el ceño y ella hizo el mismo gesto—. ¿Cómo sabes lo mío con Becky?

- Todo el mundo lo sabe en esta empresa. Sé que seguías acostándote con ella mientras tratabas de conquistarme, pero yo pensé que cambiarías, que....

- Yo te respeté cuando me propuse que fuésemos en serio -dije con sinceridad-. En fin, no sé si seas honesta o no con lo que dices sobre amarme, igual no quiero que sigas aquí.

- Podría denunciarte -amenazó—. Es despido injustificado.

- Tengo dinero suficiente como para defenderme de tu demanda -repliqué y me crucé de brazos-. Además, ¿qué dirán las autoridades cuando sepan que me intentaste estafar?

Castigando a mamá | FreenBecky G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora