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Freen
"No te aseguro que me vayas a recuperar", esas palabras no abandonaban mi mente mientras conducía hacia la casa de Becky. Esta por lo menos había accedido a que la llevara a casa, lo que veía como un avance. No obstante, estaba preocupada, ya que ella
parecía hablar en serio.
- ¿Vas a seguir con esa tontería de trabajar para Vorrakittikun? -refunfuñe sin despegar la vista de la carretera.
- ¿Tontería? Tengo que trabajar, mis cuentas no se pagan solas. -Resopló-. Yo no tengo una empresa y una familia millonaria como la señora aquí presente.
La miré por un segundo y entorné los ojos.
- Sabes que yo te lo podría dar todo, que no necesitas...
- Ah, no, esto no solo lo hago por comer, porque por ese lado estamos cubiertos con el salario de mis hermanos —me aclaró—. Yo quiero desarrollarme en las finanzas.
- Sí, claro, siendo asistente de ese cabrón. — Bufé.
- Por algo se empieza, pronto ascenderé. Ese buen hombre no es como tú, no me va a retener como su secretaria para siempre.
- Eso es lo que crees —mascullé—. ¿Y qué pasa si no? Tal vez ese hombre te quiera como amante.
- No todos son como tú -replicó, lo cual fue un golpe bajo que dolió.
- Yo te quiero como todo, Becky. Hablemos, por favor...
- No, no ahora, solo cállate y conduce —me pidió consternada y sujetándose a la agarradera.
-Como órdenes. -Suspiré—. Pero no me voy a rendir, yo voy a recuperarte al costo que sea.
- Pues será a uno muy alto porque contigo yo no caigo tan fácil otra vez. Primero me arranco un implante.
- Sería muy excitante ver cómo lo intentas, así vería tus hermosos pezones de nuevo - dije excitada—. Mierda, no paro de pensar en ellos.
- Ah, sí, son lindos —dijo alzándose la blusa para mostrarlos.
- Becky, por Dios, ¿qué estás haciendo? -jadeé y vi cómo se los retorcía. De un momento a otro, mi pene ya no cabía dentro de mí pantalón.
- Sí, son bellos, ¿no? Lástima que los has perdido.
- Ah, no, esos botones de gomita son míos, míos y de nadie más. Ni siquiera son tuyos, Becky Armstrong.
- Ja, en tus sueños...
- En mis sueños esos botones y todo lo demás es mío. En la vida real también, solo que soy una dama y no voy a arrancarte la ropa tal y como quiero, no te voy a empotrar contra cualquier pared y cogerte como ambas queremos que te coja.
- Tú serás la única que querrá, yo no lo necesito —dijo con petulancia mientras se guardaba a mis preciosos pechos-. Mujeres sobran, cariño, también juguetes sexuales.
- Nadie es como yo, nadie te conoce como yo -dije muy segura-. Tú nunca vas a volver a estar con otra, ¿me entiendes?
- Sí, sí, sí eso te hace sentir mejor, imagínalo, bebé, no tengo problemas. Soy tan buena persona que te dejo fantasear con esa estupidez. -Sonrió, lo que me llenó de más rabia.
- Voy a vigilarte y no dejaré que...
- Ay, no, otro señor Dagger —murmuró por lo bajo, cosa que me tensionó todo el cuerpo y evaporó mi excitación—. Eso de la vigilancia no me va y lo sabes...
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Castigando a mamá | FreenBecky G!P
ФанфикFreen Chankimha es todo lo que una empresaria del siglo XXI quiere ser: dueña de una prestigiosa empresa de tecnología, arrogante, atractiva y llena de mujeres a su alrededor para satisfacer sus placeres carnales, entre estas yo. Soy la amante perfe...