Capítulo 34: Festejos y viejos conocidos.

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La lengua de Raphael recorría la línea media del vientre de Ruth mientras clavaba sus dedos en la cadera de ella con firmeza. Ella gemía mientras clavaba sus garras en los hombros de él, era doloroso pero soportable para él, En respuesta le dio una mordida a un costado, debajo de las costillas, robándole un gemido aún más sonoro.

Sonrió sobre su piel antes de elevar la vista a ella, La mujer lo miró, llena de deseo le sonrió, llevo su mano a la bandana de él y lentamente la elevo, revelando su rostro desnudo. Raphael dudo por un segundo, usaba esa cosa todo el tiempo, tanto que casi no recordaba su propio rostro, sin embargo cualquier inseguridad fue borrada rápidamente cuando ella paso su mano por su rugosa mejilla, con cariño, y le sonreía completamente embobada de él, así como él de ella.

Raphael observo su brasier, las copas que tapaban sus pechos estaban sujetas por botones al resto de la lencería que bordeaba sus senos, por lo que las tomo y las arranco, exponiendo los pechos de ella. Uso sus enormes manos para tomar ambos, acariciándolos y pronto apretándolos. Escucho el gemido que la de mechas ahogó, la miró, se mordía el labio.

Su torso solo llevaba las correar de la lencería que ya no la cubría, solo adornaban su figura. Deseoso de ese cuerpo llevo su boca a sus senos, primero uno, luego el otro, el que no atendía con chupetones lo atendía con la mano. La carne era tanta y tan deliciosa que un deseo de morderla la invadió, y eso hizo, la mordió a un costado del pezón.

— Aaah~ —Llevo sus dos manos a la cabeza de él, apretándolo con fuerza tratando de no usar sus garras, sin embargo el sentía como una de estas se clavaba en su nuca, no le molestaba.

También sentía como la cola de Ruth se envolvía con fuerza al muslo izquierdo de él, apretándolo, atrayéndolo. Eso solo lo provocaba más, a ella parecían gustarle las mordidas, así que él la mordía más, sus senos, sus costados, su brazo.

Eso la hizo reír y por instinto la mujer llevo su palma izquierda a la frente de él y lo empujo. Raphael abrió los ojos enormes y ella se miró el brazo que pronto se ponía rojo y se notaban los dientes claramente. Lo miro con ojos bien abiertos, luego los entrecerró y ladeo su rostro.

— Huu... niño malo... ¿Quieres jugar a las mordidas? —Llevo sus manos a los hombros de él, para empujarlo, ambos sonreían, Raphael se dejó guiar, sentándose el borde del yacusi, sentado allí ella quedaba de pie delante suyo mientras lo sujetaba. El bajó la vista para ver como una pierna de ella y su cola separaba sus propias piernas, luego sus manos bajaban acariciando su plastrón mientras ella se ponía de rodillas.

Su cola caía acariciando el muslo del quelonio y se enrollaba en su miembro mientras que Ruth clavaba sus garras en los muslos de él, robándole un jadeo y separando sus piernas para permitirle mejor acceso a su virilidad.

El aire se escapó de sus pulmones mientras la cola de ella apretaba su miembro y la mujer sonreía con sus labios sobre la punta de su glande, sin tocarlo, el sentía la respiración de ella chocar contra su punta, y esos ojos azules se elevaron para mirarlo a la cara, ella disfrutaba de ver como el también se ponía por ella. Raphael levanto una ceja.

— Si me muerdes ahí te mato. —Le dijo en modo de advertencia, Ruth se relamió los labios.

— Puedes intentar. —Su voz era tan gutural y rasposa que confundía a Raphael.

Pronto la femenina presiono sus labios sobre la punta de él y se abrió paso, metiéndoselo en la boca, la cual en esta forma era más grande y lo tomaba con facilidad. Raphael tenía los ojos bien abiertos mientras sus labios se habrían ahogado un gemido, sin embargo su respiración delataba el placer que sentía.

Había algo más, la lengua de ella se sentía perfectamente como paseaba por la parte baja de su tronco, hizo sus hombros y cabeza un poco a la izquierda, para ver su acción un poco de lado, allí él pudo ver la larga lengua de ella, escapándose de entre sus labios y saboreándolo.

Adaptation time | TMNT 2014/2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora