Letra y Música - KIVI

Segundas oportunidades

La sensación de libertad que obtiene cuando sale a caminar calma las voces de su mente. Voces que llevan exactamente diez días sin abandonarla. Diez largos días en los que no ha hecho otra cosa que no sea componer, en el silencio y soledad de su casa. Ha hecho algunas buenas canciones, en las que ha podido reflejar el dolor que siente cada vez que recuerda la última vez que vio a Violeta. Le atormenta el recuerdo de sus ojos, inundados en un rojo que mostraba su incomprensión y desasosiego.

Ni ella misma lo comprende. Por más vueltas que le dé a la fatídica noche de Madrid que lo cambió todo, no consigue comprender cómo fue tan tonta de repetir cierto patrón que llevaba tiempo dándose, pero que se prometió no volver a hacer. Ahora, entre tanta incomprensión y dolor, lo único que le queda es la música. Pues siempre le quedará la música, pase lo que pase.

Sus amigos ya han intentado todo para sacarla de ese bucle de autodestrucción en el que se encuentra, pero ella necesita sentir. Necesita exponer todos los sentimientos que lleva dentro, potenciarlos, como buena romántica del romanticismo que es, incluso si eso hace que cada día se sienta un poquito más triste, más vacía y más desesperada, en busca de una solución que no llega.

Una llamada entrante en su móvil hace que olvide por un momento todos estos pensamientos. Sonríe al ver el nombre de Manu en la pantalla y responde rápidamente, esperanzada de escuchar buenas noticias que le alivien un poco el malestar de su pecho.

-Chiara, ¿qué tal?

-Todo en orden por aquí. ¿Y tú?

-No me puedo quejar. Sigo dando rock and roll. - Contesta Manu en tono jocoso. Chiara ríe, contenta del buen humor que transmite su representante.

-¿Escuchaste el sample que te mandé?

-Te llamo por eso mismo. Tengo buenas noticias y malas noticias.

-Primero las buenas, por favor. - Suplica Chiara.

-Quieren sacar ya el primer single, para ir calentando los motores con el álbum. Esto sería como en unas tres o cuatro semanas, así que nos tenemos que poner las pilas para terminar de cerrar todo. Hay que pensar en la imagen artística, buscar la identidad y el look, hacer sesión de fotos para la portada y la publicidad, grabar videoclip... Pero es buena noticia, ¿no? ¿Qué te parece?

-Esto es increíble, Manu, no puedo creerlo. - Chiara se lleva la mano a la cabeza, sorprendida y feliz de ver que al menos esto está saliendo bien. - Espera, ¿cuál es la mala noticia entonces?

-La mala noticia en realidad no es tan mala, solo que iríamos un poco más apretados. He escuchado la última canción que mandaste... Y te recomiendo que sea el single. La última decisión es tuya, ya lo sabes. Tienes otras dos canciones preparadas y listas para ver la luz. Pero esta última tiene algo... Especial.

Manu espera pacientemente al otro lado de la línea. Porque Chiara no es capaz de abrir la boca. La última canción compuesta por la morena, apenas varios días antes, es sin duda la canción que más la representa ahora mismo. Que habla de arrepentimiento, de pedir perdón y rogar por obtener una segunda oportunidad. Pero que también habla sobre la adoración y el éxtasis.

Una canción en la que se abre sobre sus sentimientos, sobre cómo se siente consigo misma y con Violeta. Sin tapujos. Sería un gran salto en su carrera, porque está convencida de que es un tema que, contando con una buena producción, puede dar muy buenos frutos. Pero también descubre una parte de ella que no sabe si está preparada de mostrar al mundo. Y sobre todo, a la pelirroja.

-¿Me lo puedo pensar?

-Claro, pero dime algo cuanto antes. Porque tendrías que venir a Madrid y trabajar de lleno en esto para tenerlo a tiempo.