La casa Verstappen era un campo minado con el alemán y la belga presentes en el mismo espacio. En uno de los días con todos en la casa, Jos y Corinna habían hecho el desayuno, lo que terminó con todos sentados en la misma mesa.
—¿Me puedes llevar a ver a Martin? —le pregunta Max a Michael a lo que el alemán asiente con una sonrisa por la mala mirada que le dio Sophie
—Todavía tenemos que arreglar ciertas habitaciones por culpa de alguien —todos en la mesa miraron a Max
—Esta también es mi casa —se defiende el rubio indignado
—Pero no para que invites a todos los pilotos otra vez. La ultima vez sabemos como terminó —Jos mira a Michael con los ojos entrecerrados
—Me aseguraré de esconder los cojines —murmura el heptacampeón en el oído de Victoria causándole una risa a la rubia
—Dudo que esta vez haya espacio para los 12 —exclama Mika
—Te falta visión —habla Corinna—. Podemos pasar a Gina, Mick, Victoria a la habitación de Max, es la mas grande e incluso puede entrar Carlos. Si agregamos una cama en la habitación de Gina, pueden estar hasta 5, lo mismo en la de Victoria y Mick. También están las habitaciones de invitados.
—Ustedes duermen en una de esas habitaciones —exclama Sophie esperando que Corinna diga algo sobre donde dormirían ellos
—Bueno Sophie, tu te vas mañana y la habitación de Jos es lo suficiente grande para los cuatro —responde Corinna con una sonrisa refiriéndose a Mika, Michael, Jos y ella
Jos, Mika y Michael la miran incrédulos por como lo dijo sin un poco de tacto mientras los niños miran sus platos como si fuera lo mas interesante del mundo.
—¿No vas a decir nada? —Sophie mira a Jos
—¿Debo decir algo? —pregunta el Verstappen confundido
—Solo recordándote que los papeles de divorcio están arreglados, es solo tu esposo porque te niegas a firmarlos, pero todos en la mesa sabemos que ya no hay nada entre ustedes y no tienes derecho a reclamar —habla Mika
—Terminamos de comer —los cuatro menores toman sus platos y los dejan en el fregador para correr arriba e huir de la incomodidad de la mesa
La mesa se queda callada unos momentos.
—Los confunden, su relación no es natural —los acusa Sophie
—¡Mira...! —Mika se exalta, pero Michael toma su brazo para que se detenga
—Como si no fueran ellos los que quieran que esto pase, ¿o ya olvidaste lo que Max hizo en 2007?
—¡Es mi hijo! ¡No vas a quitarme a Max! —la belga se levanta enojada por la mirada burlona de Michael
—Rompe tu burbuja, sigo siendo al que acude siempre, no tú. Siempre tratando de cumplir tu sueño de karting a través de Max, no dejaré que lo hagas pensar que te debe algo solo porque renunciaste a lo que tu querías por él. Tengo tanta intervención en su vida como tú y no puedes detenerme, al igual que con Victoria, pero parece que olvidas que también tienes una hija. —Michael se cruza de brazos y se recuesta en la silla
—No te atrevas a acusarme de cosas que no entiendes, son mis hijos y los amo.
—Tú amas que Max sea bueno en karting y dejas de lado a Victoria porque no funciona en tus planes. Renunciaste a tus sueños por Max y fue tu decisión, no te atrevas a vivir tu sueño a través de él, porque tengo muchos abogados que pueden terminar tus planes —amenaza el alemán