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Él se había quedado de nuevo en mi casa pero ahora todo era más cómodo. Al día siguiente tenía una gala que había salido de imprevisto y de la cual me había contado Manu así que invité a Roberto, él accedió sin pensarlo

—Iré a mi departamento para ver a Molly y a buscar ropa para hoy.— avisó mientras desayunábamos 

—¿Quién es Molly?.— cuestioné 

—Mi hija.— respondió y al escucharlo sentí que me ahogué con un pedazo de fruta que estaba comiendo, él me dio un vaso de agua para ayudarme así que lo bebí 

Cuando dejé de toser pude notar que empezó a reír así que lo miré mal

—Es mi perrita.— aclaró ahora y sacó su celular para mostrarme una foto —Luego te llevaré a conocerla.— 

Asentí, antes me hubiera negado a convivir con animales pero ahora tenía a Moon que se la pasaba tomando el sol en mi balcón y estaba ansiosa por conocer a la perrita de Beto. 

—Te estaré esperando aquí para que el chofer nos lleve a la gala.— avisé 

—Aún llevaré el antifaz para los eventos o cosas públicas.— dijo, estaba de acuerdo con eso, debíamos cuidar su privacidad 

—Me parece bien.— sonreí 

Seguimos desayunando hasta que llegó el momento donde él tenía que irse, lo acompañé hasta la puerta y podría clasificar esta como una de las despedidas más tristes porque aunque sabía que lo vería en unas horas me estaba dejando con una sensación de vacío 

No tenía nada que hacer así que subí a la habitación donde se había quedado Beto, me senté en la cama y reí un poco al ver como había dejado bastantes cosas aquí durante las veces que se había quedado; dos chamarras en el perchero, un llavero de Naruto en un mueble, un dibujo de el conejo bodoque de "31 minutos" y junto a la cama el característico antifaz, parecía que poco a poco se mudaba para acá

Me levanté para agarrar el antifaz y fue inevitable no sonreír, era bastante significativo así que me lo puse, caminé hasta el espejo, me quedaba bien así que fui a mi habitación para buscar una cámara instantánea que tenía y regresé para tomarme una foto, sin duda guardaría esto como un buen recuerdo

Seguí con una pequeña sesión de fotos hasta que vi a Manu entrando corriendo a la habitación donde estaba, al verme con el antifaz pareció extrañado 

—¿Interrumpo algo?.— preguntó y negué mientras me lo quitaba 

—Estaba aburrida y decidí probarme el antifaz de Beto.— conté sonriendo y le pasé las fotos instantáneas —Mira, me veo muy bien.— 

Escuché como suspiró aliviado mientras me regresaba las fotos, lo miré sin entender 

—Te estuve llamando desde ayer para ver como estabas pero me mandaba directo a buzón, quise creer que estabas mal por el asunto de tu novio falso así que quise darte tiempo.— dijo y recordé que me habían robado el celular —Intenté llamarte de nuevo para ver si te traía el desayuno pero aún no había respuesta, pensé que te había pasado algo así que vine corriendo.—

—Ayer salí con Roberto y nos asaltaron, ahora no tengo celular.— avisé —Debí comprar uno nuevo de inmediato pero tenía tantas cosas en la cabeza que me olvidé de eso.—

—Pudiste buscar la manera de avisarme.— se quejó y le hice la expresión más tierna que me salió para que me disculpara —Cómo sea, le pediré a alguien que te compre un celular y lo traiga hasta acá, no puedes estar tanto tiempo fuera de las redes y menos horas antes de una gala.— 

𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐈𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐂𝐎𝐑𝐀𝐙𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐑𝐎𝐓𝐎𝐒 [Roberto Cein X Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora