𝑪𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 3

547 47 1
                                    


┏━━━━━━━ εïз ━━━━━━━┓

— ¿Volleyball? — preguntó Rin juntando su mesa con la mía

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


— ¿Volleyball? — preguntó Rin juntando su mesa con la mía.

Le conté lo que me pasó el día anterior. Ella quedó igual de confundida que yo con ese chico Hinata.

— Solamente iré a ver su entrenamiento en la salida, no creo q sea la gran cosa.

— ¿Y no te pone nerviosa estar rodeada de chicos? — dijo Rin fantaseando estando ella en esa situación.

— No voy a hablar con ellos Rin, bueno, solo con Hinata. Me cae bien.

— Creo que Yamaguchi y Tsukishima están en el club de Volleyball también. — los señaló con la mirada atrás de mí, miré por encima de mi hombro y ahí estaban los antes mencionados comiendo juntos.

A Yamaguchi ya lo conocía, me tocó una actividad de clase con él el tercer día. Es un chico muy simpático y adorable. Por otro lado, no había interactuando con el rubio hasta ahora. Debo admitir que se me hacía lindo. Pero por lo que me cuenta Rin, es muy callado y molesto. Sin contar la cara de antipático que pone a veces. Se me hace raro que sean tan buenos amigos.

Sin darme cuenta me quedé mirando de más hasta que el de lentes cruzó su mirada con la mía. Me volteé rápidamente y divisé a Rin riéndose de lo que acababa de pasar.

— Sabes, dicen que la manager de ese equipo masculino es hermosa. Es alta, pelinegra y con los ojos azules. Sería bueno que vayas y me cuentes luego, a ver si es verdad todo lo que dicen.

Al escuchar eso me puse un poco nerviosa. Jamás había dudado de mi apariencia física, digo, soy bastante normal. Ni gorda, ni flaca, ni alta, ni baja. Un 1.65 aproximadamente, y mi cabello es castaño. Pero si pienso postularme como manager, debo estar a la altura de la chica que Rin describe. Cosa que, no creo llegarle ni a los talones. Aunque pensándolo bien, soy de primero y ella de tercero, es seguro que se va a ver mucho mejor, tuvo más tiempo para desarrollarse. No hay nada que envidiar aún.

— También dicen que hay un chico que parece tener como 30 años. Se rumorea que para intimidando a los demás y vendiendo droga. — eso último lo dijo en susurro para que solo yo pueda escucharlo.

— Jajaja no seas ridícula Rin. Cómo vas a creer todo lo se dice por ahí. — Rin solo se dispuso a reír ante mi respuesta y continuamos almorzando con par de comentarios de por medio.

...

Ya era la hora de salida y me dirigía a la cancha de deportes. La puerta estaba cerrada pero al otro lado se oían las pelotas rebotando por el suelo. Dudé un momento en entrar, pero me armé de valor y agarré la perilla de la puerta. No obstante, sin yo hacer algún movimiento, esta se abrió bruscamente haciendo que me tambaleara un poco con ella. Al coger equilibrio miré hacia el frente y el chico que había abierto la puerta me miró sorprendido.

𝐒𝐓𝐄𝐍𝐃𝐇𝐀𝐋  -𝑻𝒔𝒖𝒌𝒊𝒔𝒉𝒊𝒎𝒂 𝑲𝒆𝒊-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora