𝑪𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 25

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Todos los jugadores se encontraban divagando por el campo trasero mientras las managers de los demás equipos repartían las sandías de poco en poco

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Todos los jugadores se encontraban divagando por el campo trasero mientras las managers de los demás equipos repartían las sandías de poco en poco.

— ¡Menos mal! De verdad necesitaba un descanso. — Tanaka se acercó a sus dos amigos de tercer año mientras se dirigían hacia una zona elevada del césped.

— Jajaja no quería admitirlo, pero sí — el capitán del Karasuno fue el primero en dejarse caer para ser seguido de sus compañeros.

— Sería bueno ganar aunque sea un partido para variar un poco. — mencionó Asahi mientras apoyaba su dos brazos atrás de su cuerpo. Los otros dos chicos rieron ante su comentario con una mueca de cansancio.

— ¡Chicos! ¿Desean un trozo? — Shizuka se acercó a ellos sacándolos del trance extendiéndoles la bandeja.

Los tres amigos se emocionar y agarraron una rebana cada uno. Apenas el pelado le dió una mordida a la suya, no pudo evitar estirarla mano para llevarse otro pedazo consigo. Los demás presentes se rieron mientras Tanaka se empezaba a disculpar por su impulsividad.

— Muchas gracias Shizuka — le dijo Daichi embozando una sonrisa. Los demás no tardaron en imitar el gesto y continuaron comiendo.

— No hay de que.

— ¿Y tú no comerás? — le preguntó Asahi. — puedo sujetar la bandeja por ti. — El chico se acercó a ella estirando el brazo pero la castaña lo interrumpió.

— Oh, No te preocupes Asahi, yo piqué mientras las cortábamos en la cocina. — negó rápidamente para luego voltear hacia su lado izquierdo.

Sugawara la había llamado, a lo que ella se despidió con una inclinación y se fue alejando poco a poco. Los demás chicos la siguieron con la mirada hasta que la presencia de otra persona los hizo voltear nuevamente.

— Ah, disculpen — el capitán del Nekoma de acomodó frente a ellos.

— ¿Pasó algo?

— Creo que ayer molesté al de lentes mientras nos ayudaba a practicar. — El azabache se sentó al lado de los 3 chicos para seguir hablando. — Aunque al parecer no fue gran cosa, al salir del gimnasio pude ver que su novia ya lo había calmando.

Al escuchar ese comentario los demás se sobresaltaron.

— De igual forma, me disculpo por eso.

El trio se miró se manera mutua, habían quedado sorprendidos antes las palabras de Kuroo. Por una parte querían preguntar a quién se refería, pero, los 3 sabían que no era necesario.

𝐒𝐓𝐄𝐍𝐃𝐇𝐀𝐋  -𝑻𝒔𝒖𝒌𝒊𝒔𝒉𝒊𝒎𝒂 𝑲𝒆𝒊-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora