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— ¿Cómo les fue en el trabajo? — le pregunté a Rin mientras esta entraba al salón.
— Maso menos, no llegamos al mínimo de palabras y eso nos costó un par de puntos.
Al parecer a varios grupos les pasó lo mismo, aunque el maestro había sido bastante claro con los requisitos, eso último simplemente lo había escrito en el pizarrón sin mencionarlo. Debo decir que fue pura suerte el que nosotros hayamos pasado el mínimo, porque tampoco teníamos idea sobre ese punto.
— Bueno, los exámenes finales están a un par de semana, así que esa nota se puede recuperar. — le dije para luego continuar hablando sobre otros temas extraescolares.
...
El entrenamiento estaba por acabar. Los chicos se dividieron en 2 grupos y jugaron 4 sets sin parar. Hasta que el entrenador los mandó a descansar por 10 minutos. Sin embargo, la mayoría de ellos estaban dispuestos a seguir jugando.
— Hinata se ve muy activo hoy. — dijo Yamaguchi mientras se acerca con Tsukishima hasta donde me encontraba.
— Es una molestia. — dijo el rubio. Ni bien llegaron les extendí sus 2 botellas de agua.
— Gracias. — exclamaron en conjunto.
Estaban a punto de volver a formarse para empezar una quinta ronda hasta que las puertas del gimnasio se abren de golpe. Lo siguiente que vemos es al profesor Takeda caerse justo al poner un pie en el lugar.
— ¡¿Iremos, verdad?! — gritó alzando la cabeza y dejando ver que le empezaba a sangrar la nariz.
— Takeda, ¿estás bien? — le preguntó el entrenador Ukai mientras lo ayudaba a pararse.
— Iré por papel. — dije para luego alejarme unos metros del lugar.
Abrí el botiquín de emergencia que se encontraba en el almacén del gimnasio y saqué un poco de papel y agua oxigenada. Dejé todo como estaba y me dirigí hacia los chicos. Mientras me iba acercando logré a escuchar lo que el profesor estaba explicando.
— Sí, pero no solo será contra ellos. El grupo académico de Fukurodani es un grupo de escuelas en la región de Kanto. Parece que tienen partidos de práctica todo el tiempo. Gracias al entrenador Nekomata el Karasuno podrá participar en sus partidos.
¿Entrenador Nekomata?
Me acerqué al profesor y le extendí la cosas que traje. Gracias al papel en su nariz la hemorragia pararía en unos minutos. Me agradeció y me incorporé con los chicos para seguir escuchando.
—¿Qué sucede? — le pregunté en susurro al rubio que estaba a mi lado.
-—No sé, deberías prestar más atención. — me dijo en tono de burla para ignorar completamente mi pregunta.
