Las flores que nunca me diste | Cartas regadas

Amoríos - Carta

La vida a veces me lastima haciéndome creer que reconectar 

sirve de algo, esto no sirve de nada, mirarte con amor jamás lo hará y 

a mediados de agosto te dejé ir con mi cariño en las manos. A veces

 me gustaría escribirte y hablar, para los amantes no existe eso de la

 amistad y retrocedo por eso. No sé si en algún momento hemos topado

 con la idea de nosotros al a par, o si realmente lo pensaste como 

posibilidad, pero nunca lo sabremos y es mejor como estamos ahora. 

Muero pensando si realmente pasaba algo o si nuestros eran simplemente 

la acción, no quería que acabara pero eso acabaría conmigo y ambos

 lo sabíamos, no quiero que lo niegues. Pensé tanto en como sería el "nosotros"

 y no logré enfocar la realidad, caí de golpe y eso me dolió, dolió menos 

dejarte de idealizar.  Tengo muchas preguntas sin respuestas, tengo muchas 

cosas por decir porque pasar tiempo a solas hace sus hebras y ate cada

 hilo para intentar entender lo que pasó y el "porqué no".

Me queda desearte lo mejor, y como no hacerlo si siempre fuiste el mejor, 

lástima que a veces los sabios no saben manejar la idea del amor.  Trata con

 delicadeza las nuevas risas y los nuevos romances porque me mataría mas 

saber que dejaste ir a otro amor por tus indecisiones. Diría que mi estación 

favorita eres tú aunque terminamos nuestro acuerdos cuando ella 

comenzaba a dar sus primeros pasos, porque te amaba como el otoño ama.

¿Aceptar todo o quedar en la nada? Eres un misterio sin resolver, si usas 

datos viejos sobre mi poder quiere decir que nunca me conocerás, era otra 

persona y creo que no quisiste más pensando en cosas que hice antes de 

estar en tus piernas. Acepto que esto fue mas que un cuento corto, esto fue

 más que las lluvias temporales o los pastos verdes en verano, de alguna 

manera tuvieron no tuvo de malo en lo que se llegó a imaginar.

Solo cuídate y solo cuídate, te querré siempre.