Latidos

2 0 0
                                    

Te habías ido y lo había respetado

Señales confusas se adjuntan a nuestra neblina

Preferiste espacio y ya me había hartado

No quise continuar con esa extraña rutina.


Hay arterias floreciendo dentro de cadáveres sepultados

Ya estaban atestados y la conexión comenzó a titilar

Comienzas a dar señales aunque no hemos hablado 

Sigo si entender que te hizo regresar.


Busque la salida en un cajón sin entradas

No había opciones solo quedarse con las ganas

Pero aunque fuera la homicida te quería a mi lado

No querías hacerlo y zarpé del barco.


Tus señales se vuelcan en mis lagunas mentales

No quiero saber de ti y ahora vuelvo a pensarte

Desapareciste sin razón, ahora vuelves a mis calles

No hagas que mi corazón retome tus pulsaciones.


Hablando sobre como esto no debe acabar

Para luego de hacerlo me comenzabas a besar

Mi sangre ardía porque al final no fuiste mío

Acabó en agosto y no terminaste conmigo.


Algunas excusas resultan nuestro masoquismo

No comprendo este sentir que sale ahora mismo

Que salgan de ti las voces que quieres que escuche

No te gusta tu sonrisa pero hace que me alumbre.


Píntame siempre que quieres ser como un roble

Vacila eso que quieres cuando el día sea noche

Quería que sintieras conmigo las mismas ganas

Quería que te acurrucaras en mí en las mañanas.


No lo harás porque te lo pedí una vez

Existen consecuencias en la perpetuidad

No pude seguir desde aquella vez

Si no querías, ¿Por qué me besabas?'


Si me dijeron que tuvimos mas historia

Pero sentí el amor dentro de ese camino

Lo aceptaré sin forzar al destino

Pero vuelves y no entiendo tus olas.


Resultan inquietantes y me gritan que te hable

Resultó valiente irme antes de que fuera tarde

Aunque me arrebatara los latidos por tu voz

No podía seguirlo si no éramos dos.


A veces quisiera volver a repasar tu cercanía

No puedo culparte si yo me tiré al pozo

¿Sería justo perdí una razón de su salida?

Es injusto que aún me conmuevas un poco.

Las flores que nunca me diste | Cartas regadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora