"De amor no vive la mujer."
Ser parte de la "gente importante" conlleva mucha responsabilidad, en especial con tu imagen. No puedo usar mi vestuario usual porque es demasiado "provocador" para las esposas de los hombres de poder. Tengo que fingir ser alguien completamente diferente, pero es parte de la misión.
—Voy a vomitar.
Astar se detiene un escalón arriba de la entrada, volteando a verme con la ceja alzada.
—¿Ya quieres hacerme responsable de un bebé, tesoro?
—Saltaría de un puente antes de dar a luz a un indefenso bebé y hacerlo vivir en este mundo de mierda.
La idea de ser madre en medio de una guerra me da más náuseas que tener que estar en una reunión social con mujeres ricachonas, aunque van muy igualado. Me da miedo meter la pata y acabar metiéndonos en un grave problema, pues estaremos en la cueva de los lobos. Si algo sucede aquí, todo quedará entre esas paredes...
—Eres muy adorable cuando estás asustada.
Lo tomaría como un lindo cumplido si no tuviera esa arrogante sonrisa en su rostro.
—¿De nuevo andas con tus instintos suicidas?
Niego con la cabeza cuando me tiende su mano, negándome a tocarlo. Es muy molesto, me hace querer salir corriendo luego de meterle un navajazo en el estómago. Pero luego recuerdo que es la persona que me mantiene en una zona segura, que me da un tranquilo hogar y toda la comida que quiera. Es una gran ventaja en tiempos de guerra.
Es por esa razón que dejo que me tome de la cintura, pegándome a su cuerpo y dejando besos en mi mejilla, bajando lentamente a mi cuello.
—Ando con ganas de hacerte gemir... —susurra contra mi piel, capturando una parte entre sus labios y chupando con suavidad.
—No es el mejor lugar para eso —respondo al levantar la mirada hacia la mansión, estremeciéndome al encontrarme con una figura observándonos desde una ventana de la segunda planta—. Creo que voy a asesinar a muchas mujeres hoy...
—Estoy intentando llevarte detrás de un árbol para follarte y tú hablando de asesinar —gruñe en decepción, separándose lo justo para poder vernos a los ojos sin liberarme de su agarre—. Me la pone dura ese mal carácter que tienes, pero prefiero cuando eres mi sucia putita obediente y necesitada de mi verga.
Habla muy tranquilo sin demostrar incomodidad al estar siendo vigilado, posiblemente pensando que esta era una escena normal de una pareja "enamorada", el problema es que a él no lo van a criticar en esta "reunión de mujeres". Solo yo seré la mala de la historia por atrapar a un hombre codiciado por muchas, en especial porque seguramente algunas ya sepan de donde provengo.
—Sácame de aquí en una hora y prometo darte el mejor sexo de tu vida.
—Que sea en cuarenta minutos.
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Distrito 14 (+21)
RomanceViktorov, general del ejército, el hombre más temido, el villano de la historia de muchos y el hombre que necesita una novia falsa. De inmediato. Farah, trabajadora de un burdel con muchos secretos. Su sed de venganza es tan grande que no le import...