"La Guerra también ocurre en la cama."
"—La lista de fallecidos han aumentado desde el último ataque recibido en el lado sur. Los distritos ocho y siete forman parte de los más afectados. Lamentamos las pérdidas de todos sus seres queridos y recordemos que la mayoría de ellos murieron luchando por nuestra salvación y un futuro lleno de paz."
Las noticias me parecían la cosa más hipócrita del mundo, especialmente sabiendo muy bien que muchas de esas "muertes" han sido de traidores o soldados que han decepcionando a un superior. En el momento en el que alguien te mira como un enemigo para sus objetivos, solo es cuestión de tiempo para que tu nombre aparezca en una de esas listas.
El reloj hacía "Tic toc" sobre sus cabezas, y quienes lo sabían, incluso preferían acudir al suicidio.
Farah se mueve por el salón con tranquilidad, acomodando algunos libros que dejé tirados por varias de las mesas en toda la casa. Me he dado cuenta de que pasa mucho tiempo aburrida, por lo que empieza a buscar cosas "desordenadas" para acomodarlas y distraerse. No puedo dejarla salir libre por donde quiera, al menos no con otra alerta de bombardeo, por lo que he comenzado a dejar un poco de lado mi manía por la limpieza para "desordenar" un poco y mantenerla ocupada.
Pero necesito buscarle alguna otra actividad antes de que se de cuenta de que lo hago a propósito y piense que lo hago solo porque ella es la mujer de la casa.
—¿Que distrito está a tu cargo? —pregunta de pronto, interrumpiendo la voz de la mujer que sale por la radio.
Miro su trasero cuando se agacha a acomodar los libros en el estante de abajo. El pantalón se amolda a su cuerpo, lo que hace que su trasero se vea más grande, algo que mis ojos agradecen y que en la noche podré disfrutar.
—¿No es obvio? —sonrío de forma arrogante cuando voltea a verme sobre su hombro, atrapándome con la mirada en su trasero—. El distrito catorce, Zolotse.
Se endereza tras soltar una pequeña risa de burla.
—El diablo cuidando de los burdeles, no debería sorprenderme.
Tal vez se sorprendería más si supiera de la historia de cómo mi madre murió en un ataque en el distrito catorce... pero es una historia que está enterrada entre mis muros y cadenas.
—Y por eso es uno de los más seguros de esa zona —levanto mi tasa de té, dándole un trago a mi infusión de manzanilla. Necesito permanecer tranquilo y esto es lo único legal a lo que puedo tener acceso—. Lleva muchos años sin tener un ataque mayor.
—Eso no quita el hecho de que aún hayan hombres queriendo hacer el mal en las zonas más oscuras...Conforme pasan los días, más cuenta me doy de que Farah sabe demasiadas cosas que suceden en las calles de los distritos que más me importan, pero tampoco quiero hostigarla para que me dé toda la información que quiero, es por eso que va saliendo de a poco, entre nuestras pequeñas charlas.
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Distrito 14 (+21)
Storie d'amoreViktorov, general del ejército, el hombre más temido, el villano de la historia de muchos y el hombre que necesita una novia falsa. De inmediato. Farah, trabajadora de un burdel con muchos secretos. Su sed de venganza es tan grande que no le import...