30. Acepto.

1K 71 28
                                    



¿No? Yo sabía que era muy -me agacho para besarlo-

Si, si o sea noooo, te pasaste pero si me quiero casar contigo -grito feliz- te amoooo, acepto, acepto -digo tratando de hacerlo reaccionar-

Te amo mi niña -saca el anillo de la cajita y lo desliza por mi dedo anular-

Cuando se pone de pie no puedo evitar abrazarlo, llenarlo de besos y reír completamente feliz.

Eres el amor de mi vida -aprieto sus mejillas-

Yo supe desde la primera vez que te vi que quería esto contigo, lo confirmé cuando te comí enterita por primera vez en tu casa -me río- al día siguiente cante más motivado y feliz que nunca, porque tú solo tú tienes el poder, las llaves que controlan mis emociones -lo lleno de besos-

Te elijo hoy y por el resto de mi vida Gabriel -Gabo me aprieta contra su cuerpo-

Hay tantas cosas que quería decirte mientras te lo pedía, pero se te ocurrió gritar no y me asustaste -los dos soltamos una carcajada-

Perdóname amor -acaricio su mejilla-

No se, no tengo las palabras correctas Jimena, pero un día me di cuenta que ya estabas ahí, muy dentro de mi, siento que eres la única mujer que ha estado en mi vida, porque mi corazón, mi mente, cuerpo, todo te pertenece a ti, mis latidos suenan a ti, amo que seas mi musa para componer canciones, necesito estarte llenando de besos y abrazos, quiero que nuestra vida sea larga para disfrutarte -como se responde a tanto amor?-

Eres tanto, tanto para mi corazón, amo quien eres, no quiero que jamás cambie nada en ti, somos humanos buscando la mejor forma de amarnos, me encanta tu amor, tu compañía y esas ganas de siempre tenerme en tu vida -me abraza, escucho su corazón latir rápidamente y como suspira-

Eso es lo que más me gusta de nosotros, tenemos un amor libre pero demasiado fuerte -asiento aún sostenida entre sus brazos-

Jamás pensé que me pedirías matrimonio en este viaje, jamás -sonrió aún sorprendida-

Tampoco pensaba hacerlo aquí, ya traía el anillo, porque primero lo hablé con tus papás -abro la boca sorprendida- pensaba hacerlo en unos meses más en Sonora o Monterrey pero lo traje por si las dudas

¿Y qué cambio? -pregunto interesada-

Cuando hablé con tus papás, el día que llegue a tu casa, ese día antes fui a casa de ellos -este hombre no deja de sorprenderme- básicamente les conté en pocas palabras lo que sucedía con nosotros, el amor que te tengo, lo importante que eres para mi, les pedí su bendición

Eres un bebé -digo completamente enamorada-

Cuando estuve hablando con ellos me dijeron algo muy cierto, que tenemos ese hilo rojo que tanto nos dicen, que se enreda, se estira y se tensa pero jamás S rompe, cuando me hablaban sobre eso, tú papá dijo que no importaba el lugar, el espacio ni el tiempo, tú siempre me amarías -siento como las lágrimas se me escapan-

Dios -sorbo mi nariz-

Y cuando dijo eso, tiempo, me di cuenta que no quiero perderlo más contigo, hemos pasado por demasiado juntos, no me importa que ahora tengamos dos meses de novios, porque nuestra historia viene de mucho tiempo atrás y solo nosotros dos sabemos como la hemos escrito -asiento aún con mi cara empapada en lágrimas-

Solo nosotros lo sabemos -sostengo su mano- es el tiempo perfecto, Dios sabe como acomoda las cosas

Tal vez aquella vez que te propuse conocernos después de mi concierto no era el momento, los dos teníamos otros temas por solucionar, luego cuando te mentí y me aleje de ti, tampoco lo era, nos faltaba mucho por madurar, pero ahora estamos más que listos para amar -me escondo en su cuello porque no puedo evitar seguir llorando de emoción, nostalgia, felicidad-

Home; Gabito BallesterosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora