Mis suegros ya habían llegado a Hermosillo, solo estaban esperando que las niñas salieran de vacaciones, a nosotros en especial nos encantaba tener visitas en casa.Para la posada del equipo de Gabriel habíamos dejado a nuestro bebé al cuidado de sus abuelitos y tías.
Todo había quedado perfectamente organizado pese al poco tiempo que había tenido, pero cada cosa estaba en su lugar.
Cenamos junto a todos, el equipo de Gabriel iba desde los que ayudan en casa hasta Laura que controla su agenda como artista, así que eran aproximadamente noventa personas.
Todo está saliendo perfecto gracias a ti -dice tomándome de la cintura-
De nada -digo con soberbia y se ríe-
Había sido muy divertida la fiesta junto a todo su equipo, la música había estado perfecta pues de eso si se había preocupado Gabriel, de traer lo que le gusta a su gente.
Lo más divertido había sido la rifa de regalos, todos ganaron algo, pero Víctor se llevó un viaje y todos me culparon en broma de haber arreglado la rifa para que el ganará.
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Nuestra primera posada familiar -dice Pau emocionada-
Que bonito se ve todo -digo de la misma forma que ella-
¿Sabes que me emociona? -me pregunta divertida-
¿Qué? -pregunto sentándome a su lado-
Que por fin Nata se ve enamorado, siento que a esta relación si le va a echar ganas -asiento-
Eso creo también, el único que podría arruinar esa relación seria el mismo -Pau se ríe-
Igual que todos, la única manera en que nos perderían es porque ellos mismos lo arruinen -asiento- aunque tú no tienes nada de que preocuparte
No, la verdad es que confío en Gabriel, tenemos un amor bonito -digo emocionada viendo a mi esposo cargando a nuestro bebé-
Gabriel jamás traicionaría tu amor -niego con la cabeza-
Jamás, pero... hablemos de cosas importantes, ¿que pasa con Junior? -ella se ríe-
Estamos bien, es lo único que diré -entrecierro los ojos-
¿Ya te lo volviste a echar verdad? -ella se ríe y sola se traiciona-
Soy débil hermana -admite Paula- pero para ser sincera, ya no espero nada de él más que sea un buen papá para Narel -asiento-
Desde que nació Narel no he visto ningún chisme de él -ella asiente-
Porque no está de gira -se ríe-
Ptaaaa -me quejo- tengo que darle terapia
¿A quien? -me pregunta el motivo de nuestra plática-
A una amiga Ashe -le respondo como campeona-
Oye -volteo a verlo- ¿mañana le darías permiso a Gabito de salir?
Si no soy su mamá -los tres nos reímos-
Es que dice que no quiere salir con nosotros porque tiene que estar con ustedes -niego con la cabeza-