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Dario

─¿Dónde estuviste toda la noche? ─ me pregunta mi padre, no más verme llegar, él y Mario están desayunando.

─Pase la noche con una mujer ─ contestó sincero y sin dar muchos detalles tampoco, por supuesto que no les diré que la mujer con la que pase la noche es Alexia, claro que no.

Quién sabe que se les ocurra hacer o decir para fastidiar mi relación con ella, No, nosotros no tenemos una relación, nos conocemos, si, nos llevamos bien, nos acostamos, pero no tenemos una relación, por lo que no debería de estar pensando de esa manera.

─Mucho cuidado con lo que estés haciendo Dario, no quiero que estes arruinando los negocios ─ me advierte mi padre, sigo mi camino hasta mi habitación para necesito una buena ducha, no tuve tiempo de tomar una por lo rápido que salí del departamento de Alexia.

─Mierda ─ me quejo cuando me quito la camisa, me hice el fuerte cuando estaba con Alexia, pero la verdad es que si me dolió mucho el golpe que me dio el novio o no sé qué de su hermana.

Mierda, ese tipo tiene mucha fuerza

Alexia

─Tengo tantas preguntas ─ dice Cassia cuando estamos en él auto.

─Por favor no ─ le pido.

─Oh vamos ─ dice ─ bueno, Alex y Caref...¿ya lo harán oficial por fin? ─ pregunta con interés.

─Si ─ contesta ella tratando de contener una sonrisa, pero no puede.

─¡Al fin! ─ dice ella.

─Si ─ le apoyó también, yo que he estado más de cerca en todo, esté vaivén de ellos, eso de estados juntos, pero no estamos juntos, es un caos, me alegra de que por fin empezarán una relación.

─¿Y ahora tú? ─ Cassia me mira llena de interés.

─No tengo nada que decir ─ cuento.

─No me digas que harás lo mismo que Alex, pon los puntos claros desde ahora ─ me dice ella.

─Apenas nos conocemos ─ digo.

─Mentirosa, lo metiste en él departamento ─

─Era él lugar más cercano ─ me encojo de hombros, ambas me miran con miradas de no te creo nada.

*****

─Te estas durmiendo ─ me dice Dario, estamos en una video llamada.

Desde esa noche no nos hemos vuelto a ver, aunque si hablamos todos los días, por mensaje o cómo ahora por video llamada. Mañana es él evento de mi familia y sé que él estará, estoy muy emocionado de verla, Dario me gusta mucho, pero no sé si él piensa igual.

Hablar con él es tan fácil, tan cómodo, él es tan bueno escuchando, siento que le puedo contar lo que sea, siento que él me lo cuenta todo, él día de ayer se reunió con Cedrick para hacer negocios y lo harán.

Me siento muy feliz por él, además de que de fui sincera cuando le dije que haría una inversión en su empresa, veo mucho potencial en su empresa.

─Lo siento, no se porque me siento cansada de repente ─ me disculpo.

─Has estado trabajado mucho ─

─Y lo que falta ─ comentó.

─Si, lo que falta porque apenas estás empezando, pero estás ansiosa de empezar ─ dice él.

─Muchísimo, ¿y tú?, debes estar ansioso por volver ─ comentó.

─Si, lo estoy no lo niego ─ contesta ─ aunque también voy a extrañarte ─ dice él.

─Yo también lo haré, ¿tendrás tiempo para mi mañana? ─ le pregunto con interés.

─Todo él que quieras princesa...

*****

Se supone que esté iba a ser un buen día, que sería agradable, que podríamos disfrutar un día al aire libre en familia, pero la madre de Hanna y antigua mejor amiga de mi madre y nuestra tía, irrumpió en él evento armada queriéndose llevar a su hija y nieta.

Mi cuñada termino con una herida de bala, Hanna con amenaza de aborto por suerte ambas están bien, no fue nada más que un susto, pero es que nuestra familia no puede pasar mucho tiempo tranquila porque siempre está pasando algo.

─Diga ─ contestó mi celular ya que no ha parado de sonar, todos en realidad están sonando, todo él mundo quiere saber qué pasa, pero ninguno está para esto menos yo, estas situaciones no me gustan, ¿a quien le gusta?.

Él caso es que no más estar a una distancia que él cuerpo de seguridad, se detuvieron y saque mi cabeza del auto y vomité creo que hasta lo que cené la noche anterior, al regresar y aun después de saber que mi hermano y su pareja están bien no me he sentido mejor.

─¡Al fin me contestas!, ¿estas bien?, ¿qué fue lo que pasó? ─ me pregunta Dario del otro lado.

─Si estoy bien, lo que pasó es algo complicado de explicar ─ contestó boca abajo ─ ¿ya estás allí cuando pasó? ─ le preguntó.

─Apenas entrando cuando escuchamos un disparo, Mario salió corriendo y a mi padre se le disparó la presión, tuve que traerlo de emergencia al hospital ─ me cuenta él.

─¿Pero ya está bien? ─ le pregunto preocupada, más por Dario en realidad, ya que aunque él hable de lo mucho que le molesta y odie cómo su padre prefiere a su hermano por encima de él siempre, pero sé que él quiere mucho a su padre, su hermano no lo creo, pero a su padre si.

─Si, ya está bien ─ contesta ─ ¿y tu? ─

─Si estamos bien, bueno en la mayoría, una de mis cuñadas terminó herida ─ le cuento.

─¿Fue grave? ─

─No, por suerte no, solo una rozadura ─ contestó y escuchó un ruido de fondo.

─Tengo que irme ─ me avisa ─ se tenía planeado regresar está noche y seguramente no lo haremos por cómo está mi padre, ¿puedo verte mañana? me pregunta él.

─Me encantaría verte ─ contestó ─ ¿a las 9? ─

─Perfecto, ¿en él restaurante donde almorzamos? ─ propone él.

─Me parece perfecto ─ digo ─ hasta mañana ─

─Hasta mañana ─ dice en despedida él.

─¿Ya te sientes mejor hija? ─ me pregunta mi madre, por un momento me tenso ante la posibilidad de que me haya escuchado al teléfono y después me recuerdo que no tengo porqué preocuparme porque en realidad no estoy haciendo nada malo por lo que debería de preocuparme.

─Aun estoy un poco mareada ─ contestó.

─Cariño tu salud nos está preocupando mucho ─ me dice ella y siento que se sienta en él borde de la cama ─ por favor ve con él doctor para que te examine o tu padre te llevara ─ me dice ella.

─No soy una bebe para que mi papi me lleve al doctor ─ me quejo aun desde mi posición.

─Entonces comportate cómo una niña grande y ve al médico ─ me dice ella.

─Lo haré lo prometo ─ le digo y creo que escucho unos gritos ─¿que es ese ruido? ─ preguntó confundido.

─Tu abuelo está discutiendo con tu hermana y con Caref, vino a verla y saber si estaba bien, también anunciaron su relación definitivamente ─ me cuenta ella.

─¿Ya lo sabían? ─ le preguntó con un poco de sorpresa.

─Si almorzamos los cuatro ayer y no contaron su relación ─ me dice mamá.

─No sabía ─

Mi hermana y yo vivimos y trabajamos juntas, pero justo por él trabajo no hemos tenido mucho tiempo para hablar de cosas personales, además de que cuando terminamos del trabajo ella se va con Caref, la verdad es que me hace sentir un poco de celos, Alex y yo siempre hemos sido muy unidas, pero ahora llega él y nos aleja.

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Alexia LitmanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora