Capítulo 13 ALIANZAS

5 1 0
                                    

En los días siguientes, Isabel estaba en un estado de trance. Todas las mañana, se levantaba se vestía y desempeñaba sus deberes como la nueva Lady ASHFORD, pero su corazón y su alma no estaba  hay, su mente se encontraban en esos momentos compartidos con su amado Daniel.

Isabel se convirtió en una experta en ocultar su dolor mostrado una fachada de conformidad y sumisión,mientras que su alma se marchitaba por dentro lentamente.

 James satisfecho con el comportamiento de Isabel que apenas le prestaba atención durante el día, solo por la noche reclamaba sus derechos como esposo. Y Cada noche era una repetición de horror,  tomando a Isabel a la fuerza sin importar lo que ella sintiera. James quería que Isabél saliera embarazada rápida.

A pesar de todo, Isabél no había perdido toda la esperanza. En él fondo de su corazón,  mantenía la llama de su amor por Daniél viva a pesar de su muerte.

Sabía que si él estuviera vivo él no sé rendiría, encontraría la manera de volver por ella. Esa pequeña esperanza le daba fuerza para seguir adelanté.

Los días transcurren así para Isabel, pero su libertad está más cerca de lo que ella cree.

Al otro lado del condado, oculto en una pequeña cabaña, Daniel se sigue recuperando de aquella terrible golpiza, su recuperación a sido lenta, está dispuesto hacer lo que sea por recuperar a Isabel el no dispuesto a rendirse, sabiendo que Isabel está sufriendo.

Daniel: ¿Quién eres?, con la voz rasposa por la fatiga.

Soy Lady Amelia Blackwood.

He venido porque conozco tu situación, y creo que podemos ayudarnos mutuamente

Lady Amelia : te ofrezco una alianza Daniel

Daniel: una alianza...........

Soy Lady Amelia: Si una Alianza

Alejandro: Daniel por favor escucha a Amelia.

Daniel: está bien, pero no estoy seguro de esto.

Amelia se sentó en una silla junto a la cama de Daniel y comenzó a explicarle su propuesta.

Resultó que Amelia también tenía sus propios motivos para oponerse a Lord James y a la familia Thornton.

 Aunque sus intenciones no estaban del todo completamente claras, parecía tener un interés personal en romper el matrimonio de Isabel con Lord James.

Lady Amelia: Sé que esto puede parecer extraño, pero tengo mis propias razones para querer separar a James de Isabel.

Lady Amelia: te propongo trabajar juntos para que tú puedas estar con Isabel.

Lady Amelia: Si trabajamos juntos, podemos lograrlo.

Lady Amelia: Tú quieres estar con Isabel, y yo quiero desbaratar los planes de Lord James

Daniel la escuchaba con atención, pero no podía evitar sentir una profunda desconfianza. Sin embargo, las opciones eran escasas, y cualquier ayuda para lograr que Isabél y el estuvieran juntos era bienvenida.

Daniel: ¿Qué sugieres? Preguntó finalmente.

Lady Amelia: primero necesitas recuperarte bien.

Lady Amelia: Cuando estés totalmente recuperado, te ayudaré a entrar en la mansión Ashford, hay tengo contactos dentro que te ayudaran a entrar.

Lady Amelia: Juntos, sacaremos a Isabel de allí.

Clara que había estado escuchando en silencio, finalmente intervino.

Clara: ¿Cómo sabemos que podemos confiar en ti?, con sus ojos llenos de preocupación.

Amelia se levantó y se paró enfrente Clara, su mirada seria.

lady Amelia: Porque tengo tanto que perder como ustedes.

Lady Amelia: Y créanme, cuando te digo que estoy dispuesta a hacer cualquier cosa para separar a James de Isabel.

Lady Amelia: tenemos que ser rápidos antes que Isabel quede embarazada.

Daniel voltea su cara hacia la ventana, solo imaginar que James, toca a su amada Isabel la rabia lo consume.

Daniel: Acepto tu alianza, lady Amelia.

Clara: no está segura de las verdaderas intenciones de lady Amelia.

Pero sabe que la benefactora de Daniel confía en esta mujer.

Mientras Isabel desempeñaba su papel de esposa, Daniel continúa en su recuperación. Su cuerpo, aunque más fuerte, aún mostraba signos de aquella golpiza que había soportado.

Pero su mente y su corazón eran inquebrantables. Sabía que debía recuperar a Isabel, rescatarla de la vida que le habían impuesto.

Cada día era una batalla. El dolor físico era constante, pero la esperanza de reunirse con Isabel lo impulsaba a seguir adelante.

Pocas personas sabían que estaba vivo, Sus amigos de confianza y su hermano y su madre lo apoyaba incondicionalmente, ayudándolo a planificar por su parte un segundo plan por si el plan de lady Amelia fallaba o los traiciona, había algo que lo hacía desconfiar de ella y su verdadero motivo para ayudarlo a que estuviera con Isabel.

solo estaban esperando el momento específico para actuar. Y poner en marcha el plan.

Una noche, mientras descansaba en su cama, Daniel miró el techo de la cabaña, recordando la promesa que había hecho a Isabel. "No importa lo que pase, estaremos juntos," había dicho. Y ahora, más que nunca, sabía que debía cumplir esa promesa."

Daniel: estaremos juntos, Isabel," susurró al vacío.

Daniel: "Te sacaré de allí. Nada nos separará." lo prometo.

EL JARDÍN DE LOS AMORES PROHIBIDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora