Minor problems───Bospa

5

Pepa abrió el refrigerador.

Bosco estaba ahí, en la cocina. Tenia el ceño fruncido. Pepa saco el helado del refrigerador y miro a Bosco.

—¿Vamos a llevarle su helado a Eder?—dijo mientras se acercaba a Bosco.

—Uh, no. Es muy tarde para helado—respondio, sin prestar mucha atención.

Pepa tomo una cuchara y comenzó a comer helado, ignorando lo que dijo Bosco. Disfruto tanto el helado, comía cerrando los ojos sintiendo como se derretía en su boca. Hace tanto que no podia comer o oler algo sin que sintiera ganas de vomitar.

—Sobrino, ¿Qué haces comiendo helado a esta hora?—Paz apareció mirando a Pepa con el ceño fruncido.

Bosco reacciono. Miro a Pepa con la cuchara y el bote de helado. Sin decir nada, le quito el bote de helado con cuidado y dejo la cuchara para que pudieran lavarla.

—Perdon, Paz. Es que teniamos hambre—Bosco tomo de la muñeca a Pepa.—ya nos vamos.

Paz vio la escena, confundida. Sabia que su sobrino y Bosco eran amigos pero nunca los habia visto actuar de forma tan rara. El de lentes salio de la cocina con Pepa detras de el, subieron las escaleras y entraron al cuarto de Bosco. Pepa solto un quejido.

—El helado estaba muy rico—dijo mientras veia a Bosco con tristeza.

—No creo que las personas embarazadas puedan comer eso—se quedo pensando—Deberiamos ir con un nutricionista, o con un doctor. Es mejor porque asi podemos llevar...

—No quiero—Pepa interrumpió a Bosco. Se acosto boca abajo en la cama del de lentes.—Esto es demasiado. No puedo comer algo sin que sienta que voy a vomitar, me duele la cabeza y me mareo muy seguido.

Bosco se acerco para sobarle la espalda.

—Si no quieres tenerlo, estoy de acuerdo.

Pepa lo miro, algo asustado.

—No puedo hacer eso, es una vida—dijo.

—Pero tu también tienes una vida. Estoy seguro de que tiene como un mes, aun puedes abortar.

Pepa suspiro. Mentiría si dijera que no penso en eso, aborto. Eso era un tema muy fuerte, entendía que podia seguir con su vida como si nada de eso hubiera pasado. Pero no lo sentia correcto. Fingir que nada de eso paso no era algo que le gustaria hacer.

—No, lo voy a tener.

Bosco sintió un poco de alivio. Tendria un hijo. Decir eso era extraño. Aun estaba pensando en como se lo diría a su papá, a su ahora madre, a Gala y a su abuela. Su abuela ya se habia calmado un poco más, pero sabia que tenia un trauma con algo parecido. Sintió su corazón apretujarse un poco, ¿Y si le pasaba lo mismo?, todo sucedió porqué la hija perdida de su abuela regreso.

Se imaginaba a su hijo enojado por qué no pudo saber donde estaba.

—Deberiamos irnos—la voz de Pepa lo hizo regresar en si.

—Si.

La noche no fue larga, algunos juegos con los niños hizo que se olvidaran de los problemas. Estaban haciendo una competencia de dibujo, les daban un papel con el nombre de un objeto y tenian que dibujarlo. Pepa hizo equipo con Bosco.

—Pepa hizo trampa—Maria se quejó, señalando al nombrado.

—Yo no hice trampa.

—Si, porqué como te llevas mejor con Bosco lo convenciste de que te eligiera.

—Eso es mentira—Bosco trato de defender a Pepa.

——Si, el Bosco hizo trampa. Eligio al mejor dibujando para que asi gane—Monito los señalo con su lapiz.

—Dejen a mi Karnal, el puede estar con quien quiera—Salomon trato de calmar la situación.

—Si, además en este juego gana quien dibuje más rápido no quien dibuje mejor—Gala le guiño un ojo a Bosco. Pepa vio el gesto, confundido.

—Entonces, comencémos.