Cuando un Ángel llora (Zayn, Harry y _____)

Capitulo 17

Me sentía tan bien, nunca había visto el cielo de esta forma, las nubes pasaban por entre mis dedos mientras el aire se colaba entre los mechones de mi cabello, el sol era hermoso, un hermoso atardecer. Los pájaros a mi lado volaban, como si fuéramos parte de la naturaleza. Me sentía tan libre, tan feliz, tan pacifica.

La ciudad debajo de mi era minúscula, las personas caminaban sin percatarse de lo que sucedía sobre sus cabezas, las manos de zayn se posaban fuertemente en mi cintura, sujetándome firmemente mientras con sus potentes alas surcaba el cielo, dándome una de las mejores experiencias de mi vida. Podría tener alas sí, pero sin embargo no servían de mucho cuando no las podías abrir y no podías volar.

Después de nuestra discusión zayn me dijo que quería mostrarme un lugar, en alguna otra dimensión, al parecer el sabia como cambiar de dimensión fácilmente. Yo solo veía asombrada lo que pasaba a nuestro alrededor, el frio viento que me acariciaba, el calor del sol que me llenaba de energía.

Entre unas nubes blancas bañadas por el sutil resplandor de la luz, se encontraba otra más pequeña de un color rosado con morado, una combinación que en ese punto quedaba fantástica con el resto del ambiente. Zayn nos llevaba directo hacia esa pequeña nube, cada vez estaba más cerca. Zayn me volteo y me aferro a su pecho mientras me cubría con una gruesa capa de plumas negras. Algo sucedió, algo cambio en el ambiente, todo era más caluroso y se escuchaban los graznidos de unas gaviotas, bajábamos a gran velocidad después de todo estábamos en picada.

Zayn abrió sus alas, sujetándome aun contra su pecho, pude observar un gran y profundo mar, un mar tan claro y hermoso como el cielo mismo, estaba lleno de criaturas a las que les diría sirenas por sus grandes colas, todos parecían ver a zayn con admiración. Zayn comenzó a dirigirse hacia una isla donde no había arena. Había una gran cantidad de brillos donde se suponía que debería estar. Zayn me bajo justo en estos destellos y al tocarlos me di cuenta que eran hermosas piedras transparentozas de distintos colores, no dolían al pisarlas, porque eran casi hechas de un vidrio perfectamente formado.

Zayn se puso a mi lado y me abrazo fuertemente antes de darme un beso en la frente y comenzó a caminar conmigo agarrada de su mano hacia el interior de la isla, yo volteaba hacia atrás viendo a las hermosas chicas rubias que salían del agua, para recuperar unas hermosas y torneadas piernas y así poder seguirnos por la frondosa y verde vegetación.

-ammm zayn en donde estamos-

-esto querida es el paraíso- dijo zayn mientras llegábamos a un hermoso estanque con una alta cascada, el agua era completamente cristalina, que dejaba ver las piedras similares a las que estaban en lugar de la arena en la playa. Dentro del agua viajaban pequeñas luces, hermosas a simple vista, que dejaban con ganas de sumergirse y tocarlas.

-según tenía entendido no existían los paraísos- dije viéndolo a su hermoso rostro.

-bueno pues aquí es el lugar más cercano que hay- dijo una hermosa y melodiosa voz femenina a mis espaldas, voltee para encontrarme con una de las chicas que anteriormente habían estado nadando.

- hola ayleen- dijo zayn mientras me sujetaba cerca de el por la cintura.

-hola cariño, que hermosa visita ¿Cómo has estado?- dijo la chica que se notaba ya tenía sus añitos mientras venia y besaba a zayn en las dos mejillas.

-muy bien, te presento a _______ mi novia- dijo, se sintió tan bien escuchar esa declaración de entre sus labios, la chica me volteo a ver, con unos ojos color lila me sonrió y con una alegría acumulada me abrazo fuertemente.

-mucho gusto ________ gracias por aceptar a zayn- dijo en casi un susurro, yo me ruborice, al parecer zayn tenía su carácter, una historia romántica tal vez.- aun que entiendo el hecho de que no puedan besarse, es muy triste- dijo tocando mi mejilla mientras negaba.