Capitulo 5

14 7 7
                                    


Fallo.

Stephannia Slounguer.

Llevamos al rey de Artenalds a mi alcoba ya que nadie tiene permiso de entrar a la suya, lo recuestan en mi cama y esta ardiendo en fiebre.

Lo primero que hago es buscar  la herida, veo que es en el abdomen y le digo a un guardia que le apreté fuertemente donde le señale y fui a mojar una de las toallas que habían en una gaveta con agua fría y la pongo en su frente, llamó a otro guardia que vaya ala cocina por agua caliente y así lo hace, me pone algo nerviosa la situación y más teniendo en cuanta, que los guardias me obedecen sin rechistar.

Limpio la herida con los trapos mojados de agua caliente y le digo a un ayudante de la cocina que trajo el agua que necesito alcohol y que venga cuanto antes el galeno.

Después de limpiar la herida con agua caliente y haberle echado alcohol, seguí presionando para que no saliera más sangre y cuando el galeno por fin llego ya no sangraba mucho, dijo lo que ya sabía, que la herida no era muy profundo pero si la infección que hubiera agarrado si no hubiera desinfectado la herida, coció la herida y solo quedaba esperar que se despertara.

Me sente en un sillón al lado de la cama cuando lo escuche murmurar incoherencias y me acerco a despertarlo.

- Majestad - lo moví un poco - ¿se encuentra mejor?.

- Alexandre, dime Alexandre.

- Alexandre - su nombre sonó raro en mis labios, me provoca escalofríos - ¿se encuentra bien?.

- Creo que tu deberías responder esa pregunta ¿lo estoy?.

- La fiebre ya bajo, la herida esta curada y cocida no tiene que abrirse si no hace movimientos bruscos, y solo le faltaría reposo - hable tan rápido que apenas me entendí, cuando tengo claro lo que voy a decir tiendo a decirlo todo de un solo.

- Escuchaste muy bien lo que dijo el galeno.

- Si - murmuró y creo que es mejor que piense que lo atendió el galeno y no yo, y es mejor que no sepa lo que delirio mientras tenía fiebre, ese será mi secreto ya que no había nadie más en la habitación.
Saque a los guardias con algo de resistencia pero lo hicieron.

- Esta no es mi habitación- dice luego de unos minutos de silencio.

- Es la mía, bueno en teoría si es suya..pero, bueno usted entiende.

- aja.

- los guardias mencionaron que nadie podía entrar en su alcoba asi que pensé que podría ser atendido aquí.

- ¿Por que aquí y no en las muchas alcobas desocupadas?

- En ese momento no lo pensamos Majes....Alexandre.

- Ya veo - parece divertido con la situación.

- yo...

Escucho el ruido de la puerta y quedo paralizada al ver la persona que entra, no me mira cuando se acerca a la cama a revisar a Alexandre.

- ¿Estas bien?.

- Si

- ¿Donde esta el galeno?.

- ¿Para que lo ocupas?

- ¿como que para que?, para preguntarle como estas - parece bastante preocupado y aun sigue sin notar que estoy aquí- ¿como paso esto?, ¿quien nos atacó?.

- Si quieres saber de mi salud pregúntale a la dama aquí presente, te aseguro sabe más que el galeno.

Al fin me mira y me quedo de nuevo sin aliento, no me creo lo que estoy viendo, trato de procesar pero es difícil ver dos caras casi idénticas, es el hermano de Alexandre, no hay otra explicación.

Algo indebido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora