Capítulo 19

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Thomas

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Thomas

Al ver a Amber bien dormida bajo por un vaso de agua y también con la esperanza de encontrar a mi nana para me pueda explicar que locura fue esa de que vivamos acá en los Estados Unidos sabiendo que tanto la vida de Amber como la mía están en Inglaterra específicamente en Londres, salgo de la habitación lo más despacio posible para no despertar a mi bella esposa, empiezo a bajar por las escaleras pero me detengo al escuchar ruido cuando me percato que el ruido proviene de la cocina comienzo a bajar rápido para poder solucionar esto de una vez.

— Nana necesitamos hablar —se giró para verme y me doy cuenta que está muy molesta y no tengo idea del por qué.

— Si en verdad que sí tenemos que hablar —al ver que cruza los brazos caigo en cuenta que es algo serio— porque no pienso dejar pasar lo que ha ocurrido en la casa de Londres.

— De qué estás hablando nana —porque yo no estoy enterado de eso— que ha pasado o que le ha pasado a la casa.

— Que la desacralizada de Helen fue hacer escándalo —deje de respirar por un lapso de segundos cuando escuche eso— pero como no te encontró en la empresa fue hasta la casa.

— Nana te juro que yo ya no estoy con ella —puedo ver como desconfía de lo que le acabo de decir— el mismo día que Amber se puso mal termine con ella.

— No se y ni me interesa —su tono de voz severo me da a enterar que ya perdió toda esperanza en mí— solo te digo una cosa, si ella llega a tocar a mi niña te vas a arrepentir por el resto de tu vida Thomas Lennox estas advertido.

— Nana te juro —no me deja terminar de hablar ya que vuelve a hablar.

— No me jures nada Thomas —me mira toda decepcionada y eso me duele— yo ya no te creo nada que tenga que ver respecto a ese tema.

Se va dejándome con la palabra en la boca, dos semanas de felicidad se acaba de arruinar por culpa de Helen esa loca no entendió el mensaje subliminal o por último no entendió cuando dije que se había acabado lo que teníamos entre nosotros, ahora me preocupa que cuando regresemos todo lo que estaba construyendo se vaya a la mierda por culpa de ella junto a la de Oliva como no me pude dar cuenta que esas mujeres iban a ser una piedra en mi camino.

Salgo del chalet para poder pedirle el móvil la chofer pero al salir no encuentro el auto y mucho menos al chofer eso solo hace que termine de perder la poca o nada paciencia que me quedaba, decidí aguardar hasta que se digne a aparecer solo espero que no sea muy tarde porque lo último que quiero es que Amber se preocupe por no haber dormido, me pongo de pie al ver como se viene acercando el auto.

— Se puede saber donde estabas —odio que hagan cosas sin avisarme  con previa antelación.

— Fui a ponerle gasolina al auto señor.

— Si hubiera habido una emergencia como nos habriamos movilizado —a este punto ya estoy histérico— acaso te costaba informarme.

— Lo siento señor —puto incompetente digo mentalmente.

Inmensa CoincidenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora