________•°Wesker°•________
El regreso a la oficina después de la aparición de Darlene fue caótico. La sede parecía un hormiguero en medio de un huracán. El camino a la comisaría se tornó ameno, mas no por ello exento de molestias. Armiche y Márquez no dejaban de lanzarme bromas sobre Dominique y yo. Sus comentarios eran una mezcla de burla y admiración, como si presenciaran el desarrollo de una comedia romántica de espías. Tal vez me acosté con Dominique y eso no significaba que estábamos saliendo. Sin darme cuenta, suspiré ligeramente.
-¿Qué pasa, Paul? ¿Estás bien?- preguntó Márquez con curiosidad mirándome desde el asiento contiguo.
-Cansado, Vera- respondí girando a la derecha -entre el caso Miranda, la reaparición de Darlene y... bueno, lo de Dominique...- mi voz se fue desvaneciendo, ¿Porque había dicho tal cosa frente a Armiche?
-¿Lo de Dominique?- Vera frunció el ceño sin entender, pero noté por el retrovisor la sonrisa malévola de Echedey.
-¡Ah, el amor! Ya veo que Dominique te tiene hechizado, Wesker- se rió entre dientes.
-No es así, Armiche- respondí con un bufido.
-¡Apuesto a que Dominique ya está planeando la boda!- siguió Echedey con tono burlón -"Paul y Dominique, señores y señoras, ¡la pareja del SNI!"- el semáforo frente a mi se puso en rojo y tomé la oportunidad de frenar se golpe. Armiche- se estampó de cara contra el asiento de Vera.
-¡Cállate, Armiche!- gruñí cuando vi que él se frotaba la frente.
-La verdad es que me gusta la idea- se unió Márquez ante las palabras de Armiche -Serían una pareja poderosa.
-Vera, no es así- dije con nerviosismo.
-¿Y si lo fuera?- preguntó con picardía en sus ojos.
-No lo será, Márquez- le aseguré poniendo en marcha nuevamente el vehículo.
-¡Esto es demasiado bueno! ¡Paul, el conquistador, finalmente ha sido conquistado!- se rió a carcajadas Armiche. Mi paciencia se agotaba.
-¡Cállate ya!- amenacé mirando fijamente por unos segundos al moreno por el retrovisor.
-Hombre, Wesker- al escuchar a Armiche nuevamente sentí que podría detenerme solo para darle un puñetazo -todos hemos visto la forma en que se miran. Hay una química innegable entre ustedes.
-Y no olvides que te salvó la vida el otro día- agregó Vera asintiendo de acuerdo con Armiche -ustedes dos están enamorados y los únicos que no se dan cuenta de ello son ambos.
Parecían dos niños. No quería que pensaran que Dominique y yo teníamos algo más que una relación profesional. Y es que realmente no eramos más que compañeros, ni siquiera habíamos hablado de lo que ocurrió en su habitación hace dos noches.
-Hay cosas más importantes que hacer- respondí ya frustrado porque no cerraban la boca -la jefa y yo solo somos compañeros.
-Está bien, está bien- se rindió él tirándose contra el asiento, me sentí aliviado de que dejarán de lado el tema -si lo dices tú. Pero no te sorprendas si un día te la encuentras besándote en el pasillo- ¿Pero que mierda?
-O en tu oficina- sugirió Márquez con una risilla.
-Cállate ya, Armiche- dije apretando la mandíbula, luego me dirigí a Vera -tendré una conversación contigo más tarde, andar por allí con Echedey te está matando las neurona- ella se rió a carcajadas mientras que Armiche se quejaba ofendido.
Sus risas resonaron en el auto mientras yo me hundía en un mar de pensamientos. Dominique me atraía de una manera inexplicable. Su inteligencia, su valentía, su aura de misterio... todo en ella me fascinaba.
Pero también era consciente de que una relación entre dos jefes del SNI era poco probable, por no decir imposible. Las reglas eran claras, y las consecuencias de romperlas podían ser nefastas.Sin embargo, en ese momento, mi mente estaba en otra parte. Me había enterado que Jax estaba en la ciudad y tendría que tener cuidado.
________•°Darlene°•________
El pitido constante de las máquinas me taladraba los oídos. Un frío metálico me recorría la piel, proveniente de los tubos que se unían a mi cuerpo como serpientes de acero. No sabía dónde estaba, solo que no era un lugar agradable.
Mis pensamientos se nublaban con el recuerdo de Toni Miranda, su rostro retorcido por la ira y la locura. Había logrado escapar de sus garras, pero a un precio terrible. La imagen de su sonrisa malvada me perseguía, alimentando mi miedo y desesperación. Anhelaba con todas mis fuerzas estar lejos de él, en cualquier lugar, incluso en este fría y estéril habitación de hospital.
Dos voces familiares resonaron en mi mente, como un eco lejano. Hablaban en francés, mi madre y Adelyn. Decidí abrir los ojos lentamente, luchando contra la pesadez que los mantenía cerrados. Las vi al fondo de la habitación, envueltas en una tenue luz que se filtraba por la ventana. Mi madre, con su rostro surcado por las líneas de la preocupación, hablaba con Adelyn en voz baja. Sus palabras eran un torrente de emociones, una mezcla de miedo y tristeza que me conmovía hasta el fondo del alma. Adelyn, por su parte, la escuchaba con atención, acariciando su mano con gesto tranquilizador.
Me esforcé por moverme, por emitir un sonido que les hiciera saber que estaba despierta. Pero mi cuerpo no respondía, como si estuviera atrapado en una densa niebla. Un suspiro escapó de mis labios, casi imperceptible. De pronto, las dos mujeres se giraron hacia mí. Sus ojos se abrieron de par en par, reflejando una mezcla de sorpresa y alivio. Mi madre se acercó a mi cama en un santiamén, su rostro iluminado por una débil sonrisa.
-Rayon de soleil- susurró con ternura, tomando un mechón de mi cabello con mucha delicadeza. (Rayo de sol).
Su voz, llena de ternura, me envolvió como una cálida manta. Quise responderle, que estaba a salvo, que lo sentía profundamente. Pero las palabras se ahogaron en mi garganta.
Adelyn se acercó también, su mirada llena de compasión.-No te preocupes- me dijo con una leve sonrisa -todo va a estar bien.
________•°Dominique°•________
Mis ojos, nublados por la fatiga y la preocupación, se posaban sobre mi pequeña Darlene, dormida plácidamente tras la agotadora conversación sobre el tormento que había vivido en manos de Toni. La puerta se abrió y Adelyn entró con bolsas de comida de la cafetería del hospital. El caso del SNI nos aguardaba, y ahora que Darlene estaba bajo mi protección, la investigación avanzaría con mayor fluidez.
Tomé la comida que me ofrecía Adelyn, sin percatarme del sabor extraño que inundaba mi paladar. Poco después, una oleada de mareo me invadió, nublando mi visión y debilitando mi cuerpo. La verdad se me reveló como un rayo en medio de la tormenta.
-Es lo que debe pasar, Domi, espero puedas perdonarme- confesó poniéndose en pie -tengo que llevármela.
Las palabras de Adelyn, su mirada llena de falso arrepentimiento, lo confirmaron todo: me estaba traicionando. Una oleada de ira me invadió, una ira tan poderosa que me nubló la vista y me encendió la sangre. No podía permitir que le hiciera daño a mi hija, que la arrebatara de mi lado.
Sin pensarlo dos veces, me abalancé sobre ella. Mis puños, convertidos en armas, golpearon su rostro una y otra vez. La habitación se convirtió en un campo de batalla, un escenario caótico donde solo reinaba la furia. Muebles volcados, vidrios rotos y gritos desgarradores marcaban nuestro enfrentamiento. Pero la lucha no duró mucho. Un mareo repentino me invadió, debilitando mi cuerpo. Las piernas me flaquearon, la vista se me nubló y caí al suelo como un muñeco de trapo. La oscuridad me envolvió, arrebatándome la conciencia.
________•°Adelyn°•________
El mensaje había sido claro y muy a mi pesar, debía seguir sus órdenes.
#Infernus: Un barco espera por ti con la mercancía en el puerto, de allí partirán a las siguientes coordenadas. No me falles, Adelyn.
#Infernus: 12.0096543, -61.7374536.
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DiPierro (Domisker) Final Alterno
FanfictionEl tiempo es lo más curioso que existe. Puede jugar a favor o en contra y en esta historia será a favor. ¿Dominique y Wesker? ¿Cano y Miranda? ¿Sally con vida? Veremos qué ocurre. Lo que si es seguro aquí, será un final diferente y esperemos... Feli...