»Capítulo 10«

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La primera de las reacciones de Beverly y Logan al conocerse fue un poco de rudeza. Ambos tenían un carácter filoso, sarcástico y algo inflexible cuando se trataba de conocer a nuevas personas. Eso era evidente, el profesor lo pudo sentir e incluso los comparó como la vez que Willemsen llegó a ese lugar, algo insegura, alerta e incapaz de querer ser algo amigable.

Al momento en que entraron a la oficina del profesor Charles Xavier, observó que los estudiantes que estuvieron esperándolo ya estaban guardando sus útiles y cosas en sus respectivas mochilas. Al parecer el hombre en la silla de ruedas se encargó de avisarles que la clase había terminado.

—Adiós, profesor —dijo una joven mientras volvía para tomar su mochila y después vio a Beverly—. Adiós, profe W. 

—Adiós, Kitty —le sonríe la pelirroja y Logan voltea para notar el modo en que la muchacha traspasaba la pared de inmediato, como si se tratara de un fantasma.

Logan se sorprendió, así que miró el modo en que el profesor se dirigía a su escritorio y tomaba un gran libro en sus dedos, alzándolo a la vista del hombre.

—Física. Por cierto, espero ya se haya presentado la señorita Willemsen. Yo soy Charles Xavier. ¿Quieres desayunar?

—Beverly Willemsen, no a tus órdenes, en realidad —bromea ella con un tono afilado y entonces Logan sólo la ignora mientras une sus cejas y entrecierra sus ojos.

—¿Dónde estoy? —pregunta él y la mujer ladea la cabeza, rodando un poco los ojos.

—En Westchester, Nueva York. Te atacaron. Mi personal te trajo para ayuda médica —explicó el profesor X, moviéndose con su silla hasta estar a menos de dos metros de distancia del recién llegado.

—No necesito ayuda médica —verbaliza con tosquedad.

—Si, claro —comunica Charles, asintiendo un par de veces con su cabeza—. Conozco a alguien como tú, en realidad.

—¿En dónde está? —evade el comentario.

—¿Rogue? Está aquí y está bien.

—¿En serio?

Y repentinamente la puerta se abre, provocando que Ororo Munroe entre al lugar, sonriéndole un momento a Beverly antes de que encaje su mirada en el profesor.

—Ah, Logan, te presento a Ororo Munroe, también conocida como Storm. Él es Scott Summers, también conocido como Cíclope. Salvaron tu vida —en el instante en que Logan ve por encima de su hombro a Charles, ignorando la mano de Scott que le extendía en modo de saludo, de pronto se escuchan los tacones de alguien más entrando y el hombre de las garras no tarda en devolver la mirada, vislumbrando a esa cabellera color rojo cereza—. Creo que ya conoces a la doctora Jean Grey. Esta es mi escuela para dotados: mutantes. Aquí estarás a salvo de Magneto.

—¿Quién es Magneto? —pregunta Logan.

—Un poderoso mutante que cree que la guerra entre mutantes y el resto de la humanidad se acerca —al escuchar las palabras del profesor X, la reacción del recién llegado es curvear los labios en una socarrona sonrisa, incapaz de poder creer todo lo que pasaba.

Beverly, por un momento, se vio a sí misma en él, pero lo ignoró debido al modo grotesco y grosero que la había tratado con pocas palabras que habían intercambiado en tan poco tiempo.

—Ha estado siguiendo tus actividades de hace tiempo. El hombre que te atacó es un socio suyo conocido como Dientes de Sable.

—¿Dientes de Sable? —cuestiona Logan, incrédulo, así que Charles asiente un momento mientras el hombre de las garras coloca sus ojos en Ororo—. Storm —la señala con el dedo y después ve a Xavier—. ¿Cómo te llaman a ti? ¿Ruedas? —suelta una risa burlona y comienza a moverse—. Es lo más estúpido que he escuchado. Se topa con Scott enfrente suyo—. Cíclope, ¿verdad?

𝐀𝐭𝐚𝐯𝐢𝐬𝐭𝐢𝐜 𝐃𝐚𝐫𝐤𝐧𝐞𝐬𝐬 𝐢𝐧 𝐔𝐬 [𝐖𝐨𝐥𝐯𝐞𝐫𝐢𝐧𝐞]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora