𝐀𝐭𝐚𝐯𝐢𝐬𝐭𝐢𝐜 𝐃𝐚𝐫𝐤𝐧𝐞𝐬𝐬 𝐢𝐧 𝐔𝐬 [𝐖𝐨𝐥𝐯𝐞𝐫𝐢𝐧𝐞]

»Capítulo 22«

Ya era medianoche. Ororo y Alastair cantaban en la cocina con Rogue y Bobby, incluso parecía que estaban tomados, aunque era imposible. En cambio, Coraline sí que tenía pasadas las copas y se tambaleaba un poco al mismo tiempo en que reía con su hijo Hugo y después su marido, el profesor, le preguntaba si le gustaría sentarse un momento.

-Pero si me la estoy pasando tan bien, Charlie -pocas veces la escuchaba llamarlo así a Charles, así que era seguro su estado de ebriedad.

El intercambio navideño comenzó, así que mientras Charles intentaba explicar que sería algo dinámico, diciendo algunas palabras amables de la persona que les tocó y después le darían el regalo que compraron para dárselo en ese preciso instante.

Y en cuanto Ororo inició, comenzó con una descripción pequeña, pero asertiva sobre la persona que podría viajar a cualquier lugar, que puede ir y venir, pero que también siempre busca el modo de cuidar de los demás y ser honesta, bondadosa aunque las personas a veces no deberían de merecer su forma tan pura de amarlos hasta el final de los tiempos.

-Espero que te guste, Coraline -dice Storm y le entrega un regalo que la doctora Vannstone le agradece al mismo tiempo que se dedica a sonreírle a la mujer de cabello blanco.

Coraline abre el regalo, riendo unos momentos hasta que alza el precioso libro de pasta dura que tenía un adorno de cristales adornando enfrente como accesorio extra. Ella lo alza, ve a su marido y no tarda en abrirlo mientras lo señala como una pequeña niña emocionada.

-Es de lepidópteros -ve de reojo a Ororo y entonces se eleva para dirigirse hacia la mujer para abrazarla-. Oh, Storm, muchas gracias.

Muchos de los presentes sabían cuánta emoción había por ese libro. Y su hijo, Hugo, no tardó en acariciar su espalda con ternura. Sabía que su madre era una ávida investigadora en esa área, así que le encantaba el hecho de verla sonreír y reír.

Así fue el siguiente Scott, quien le tocó el profesor. Luego, el profesor con Storm. Y cuando le tocó a Beverly, la pelirroja fue muy dedicada a intentar ser clara, bondadosa y empática con él.

-Es una persona muy dedicada, por supuesto, pero también muy intensa, a la que le gusta ser líder, que no teme lanzarse a la batalla con tal de cuidar de los suyos. Y sé que esta persona, aunque intente alejarse, debo recordarle que todos estamos para él -hace una pausa en bajo, después suspira y alza el obsequio que ella misma envolvió-. Espero que te guste, Scott.

Summers se alza de su asiento, algo desequilibrado, pero se recobra y en cuanto se acerca hacia Willemsen, le da un corto abrazo y entonces se vuelve a sentar mientras lo abre cuidadosamente, con todas las miradas de los presentes encima suyo.

En cuanto lo abre, sólo suspira pesadamente, admirando la hermosa pintura de acuarelas que Beverly había hecho en un cuadro mediano. Los dedos de Scott acarician la pintura, embelesado mientras la melancolía golpea su pecho.

-Es preciosa, Ever... -hace una pausa, después traga saliva y agrega con un tono de voz quebradizo-. Es exactamente como ella.

Jean Grey pintada en acuarelas, con una sonrisa resplandeciente, como todos los presentes la recordaban. Era un regalo que Summers siempre agradecería por el hecho de ser Beverly quien se diera el tiempo de hacerle el recordatorio de que pensaban en Jean, no sólo él.

Cuando por fin Coraline miró a Logan, no tardó en describirlo, expresando su fortaleza, su sarcástico humor y eso hizo sonreír a Beverly al creer que se refería a ella; pero cuando dijo la doctora Vannstone que llevaban poco tiempo de conocerse, la reacción de la neerlandesa es dejar de sonreír.

"Mierda", pensó.

No era ella. Definitivamente no era Beverly Willemsen y eso causó un estrago, más bien, un escalofrío en su espina dorsal al mismo tiempo en que miraba el modo en que Coraline nombraba a Logan, él se acercaba un poco incómodo de ser el centro de atención, es amable con la doctora Vannstone y después sólo se dedica a abrir su obsequio, dándose cuenta de que era una linda camiseta de cuadros con un pequeño botón que tenía la "X" del equipo.