𝐀𝐭𝐚𝐯𝐢𝐬𝐭𝐢𝐜 𝐃𝐚𝐫𝐤𝐧𝐞𝐬𝐬 𝐢𝐧 𝐔𝐬 [𝐖𝐨𝐥𝐯𝐞𝐫𝐢𝐧𝐞]

»Capítulo 18«

Antes de pestañear al menos unos segundos, Logan ya había golpeado a Stryker frente a Beverly, causando que el sujeto cayera y fuera alzado a la fuerza por el hombre de las garras. Lo tomó como un costal de papas, lo estampó en el avión a las espaldas del general y entonces le encajó las garras contra la costilla, a la altura de debajo de su brazo y el quejido de dolor se escuchó fuerte y claro que Beverly, quien estaba recobrándose aún mientras estaba arrodillada en la nieve, observó la escena desde cerca.

—¿Cómo se siente, amigo mío? —preguntó Howlett, con un tono sarcástico, pero malicioso.

Stryker alzó la cabeza, lo miró unos segundos y de pronto sonrió curiosamente con una forma burlona.

—¿Por qué volviste? —le preguntó a Logan.

—Me mutilaste, ¡destruiste mi vida!

—Lo haces parecer como si te hubiera robado algo. Según recuerdo, tú fuiste quien se ofreció para la operación —al explicar eso, Logan no lo pensó y miró por encima de su hombro al único testigo en esa situación y vislumbró la forma en que Beverly unía sus cejas, incapaz de procesar aquella información. Justo como él se sentía.

—Dime quién soy —le obligó Logan, tomándolo de la ropa con agresividad.

—Eres un fracaso... —respira con dificultad, a escasos centímetros del rostro de Wolverine— experimental —entonces Logan el encaja con más salvajismo las garras y Stryker suelta un alarido de dolor—. Si supieras todo sobre tu pasado..., la clase de persona que eras; el trabajo que hicimos juntos. Las personas no cambian, Wolverine. Eras un animal, y no ha cambiado nada... Sólo te di garras y ya.

Y mientras decía eso, se escuchó un sonido de alarma, causando que Beverly, quien parecía en el trance, sólo se sobresaltó, volteó hacia atrás y entonces soltó un respingo.

—¡Logan! —le gritó con pánico, recordando que aún estaban los niños y amigos suyos dentro de ese lugar.

—¿Qué sucede? —Logan pregunta, después zangolotea a Stryker—. ¡¿Qué es eso?!

—La presa reventó... —expresó con dificultad—. Inundará el vertedero para liberar la presión. Ya es tarde. En unos minutos, estaremos bajo el agua. Ven conmigo y te diré todo lo que debes saber. No puedes ayudarlos, no tienen salvación, Wolverine. Eres un sobreviviente, lo has sido siempre.

—Creí que sólo era un animal... —alega Howlett, siseando aquellas palabras con tanta molestia e ira acumulada— con garras —empieza a amenazarlo con sus garras, pero Stryker intenta alejarse—. Si mueres, irás con ellos.

—Logan... —murmura Beverly, intentando moverse y se alza con cautela, con las piernas débiles, pero manteniéndose en pie.

Y antes de que quisiera dar un paso, de golpe Logan empieza a envolver a Stryker contra las ruedas del avión con una cadena, queriendo mantenerlo en su lugar, sin alguna escapatoria. No obstante, aunque quisiera, estaba herido, así que se cercioró de que no tuviera ninguna opción antes de que volviera.

Entonces el hombre de las garras se encamina hacia la pelirroja, se aproxima tomándola con cautela el antebrazo y le pregunta en bajo, con un tono despacio.

—¿Puedes andar?

—Tú tranquilo, ya no tienes que cargarme.

Wolverine asiente, un tanto serio y después no duda en alejarse junto con Willemsen, quien simplemente empieza a recobrar la compostura hasta que se precipitan a escuchar las palabras que Stryker le gritó al hombre al lado de Beverly.

—¡No hay salida de ese lado, Wolverine!

Beverly empezó a trotar, pero Logan ya estaba corriendo, buscando alguna salida, después se aproximaba hacia su compañera y la ayudaba a andar con mayor velocidad. Aún no había señales de los demás, ni siquiera de algún rostro conocido.