Capítulo 166

23 0 0
                                    

Médico: -“los estudios están bien, tu cerebro está bien, lo único que pareciera que los conectores que manejan los recuerdos estuvieran dormidos lo que no entiendo porque si con esta medicación debería estar bien”-
Marizza: -“deberia pero no estoy, solo me acordé de mi mamá, lo demás por ahí me aparecen recuerdos borrosos que no sé quiénes son ni siquiera me reconozco yo”-
Médico: -“tenes que tomar todo con calma Marizza”-
Marizza: -“con calma, no recuerdo nada y querés que lo tome con calma”-
Médico sonríe ya que era el mismo que había visto a Manuel cuando perdió la memoria
Marizza: -“no se de qué te reís no conte ningún chiste”-
Pablo le sujeta la mano –“bonita tranquila”- le dice con calma
Médico: -“me rio porque por más que no recuerdes seguís teniendo la misma escencia de siempre esa de ser impulsiva, yo ayude a tu amigo Manuel cuando él estuvo en la misma situación que vos, no recordaba nada ni nadie y ya vez que salió adelante así que vos también vas a poder hacerlo”-
Sonia: -“es verdad cielita, mira Manuelito de un momento a otro recordó todo y está con nosotros con Míita mía de mi corazón tu tienes que saber esperar”-
Marizza: -“espere dos años mamá”-
Pablo: -“con más razón loquita que te hace esperar un poquito más”-
Médico: -“lo que si ví en los análisis es que tenés alcohol y otras sustancias en tu organismo eso no es bueno deberías hacer una rehabilitación quizás ir a un centro de ayuda se que tú familia te apoyaría en el proceso”-
Marizza no estaba muy convencida de lo que oía no se creía capaz de dejar todo y no estaba completamente convencida tampoco, el médico se dejó una muestra de aquellas pastillas para analisarlas en el laboratorio ya que si habían Sido capaces de hacer todo eso podía esperar cualquier cosa, a penas tenga los resultados les iba a avisar, así que los dejo irse y les pidió que la ayuden mostrándole fotos, videos recorriendo lugares donde ella solia estar, su aparición con vida se hizo noticia ya que era cantante e hija de una de las veddettes más conocidas por lo que no tardaron en enterarse por todo el país de que aquella chica estaba bien por lo que no sería raro para nadie verla en la calle caminando.
Sonia: -“ciela que quieres que hagamos ahora mami”-
Marizza: -“quiero caminar un poco tomar aire mamá me siento encerrada además me gustaría ir al departamento de Pablo si pase ta yo ahí quizás me sirva de algo”-
Sonia: -“bueno mami yo me vuelvo para la casa entonces si quieres que te venga a buscar o te cansas solo me avisas”- Y se va por su lado
Pablo se para frente a ella –“yo te llevo al departamento pero solo con una condición”- Toca la punta de su nariz
Marizza: -“cual Pablo a ver”-
Pablo: -“que si vas ahí y no recordas no te enojes ya te dijo el médico todo va a tomar su tiempo”-
Marizza: -“está bien, tampoco es que tenga opción”- le contesta resignada
Pablo ofició de guía turístico le iba contando de cada lugar y las Miles de historias que tenían con los chicos.
Marizza: -“y nosotros estábamos mucho tiempo juntos”- le pregunta en una oportunidad
Pablo: -“descontando nuestras idas y venidas”- le dice riendo
Marizza: -“fuimos muy vuelteros”- pregunta
Pablo: -“yo más que nada, no quería aceptar que me volaste la cabeza desde la primera vez que te Vi y la cagué varias veces, básicamente como novio fui bastante desastrozo”-
Marizza: -“sabias que no me acuerdo de nada y que podrías hacer una historia donde seas el bueno que hizo todo perfecto no”- le dice en chiste
Pablo: -“y de que serviría mentirte bonita, ademas así y todo siempre me amaste tanto como yo a vos, mira este es mi departamento que te parece si entramos y adentro seguimos hablando eso sí acordate que prometiste no enojarte”-
Marizza no alcanza a contestar cuando se topan con una chica que la mira de arriba abajo y mira con odio a Pablo
Mar: -“asi que era cierto que estabas viva y de vuelta en Buenos Aires”-
Marizza: -“si así parece, disculpa pero no me acuerdo de vos, de nadie en realidad”-
Mar: -“soy Mar fuimos al colegio juntas un par de meses”-
Marizza: -“ah y éramos amigas”-
Pablo: -“por que no dejamos la charla para después bonita vení entremos mejor”- interrumpe
Mar: -“que pasa Pablo tenés miedo que le diga que te ibas a casar conmigo porque pensaste que estaba muerta, que buscaste en mi un reemplazo y que en cuanto ella volvió a aparecer en tu vida jodió la mía y me dejaste plantada a nada de casarnos”- suelta con bronca. . . .
Pablo queda cortado –“lo que pasó entre nosotros no tenés porque reclamarselo a ella, no tiene nada que ver”-
Mar: -“si tiene que ver, porque sino hubiese aparecido a esta altura estaríamos casados y felices y no habría pasado el peor ridículo de mi vida teniendo que cancelar una boda a días”-
Marizza: -“disculpa si te hice algo te repito no recuerdo nada y aunque no parezca, no saber quién sos ni quienes son los que te rodean es bastante castigo como para que encima me reproches estas cosas”- le dice
Pablo: -“no tenés que disculparte vos no tenes nada que ver en lo que pasó entre nosotros, vení mejor pasa”- señalándole su departamento
Mar: -“no creas en Pablo no te trajo acá para ayudarte a recordar sino para tenerte entre sus sábanas”-
Pablo solo mueve la cabeza y entra junto a Marizza –“viste que te dije que tengo tendencia a cagarla”- se fue para distender el clima
Marizza entra al departamento y comienza a recorrerlo lentamente mirando cada detalle del lugar, cada ambiente, en silencio.
Pablo: -“no es gran cosa pero es mío, y acá vivimos los mejores momentos”-
Marizza: -“mmm acá viviste con ella también”- pregunta
Pablo: -“no, con nadie, solo con vos mi bonita, lo que tuvimos nosotros no lo volví a tener con nadie”-
Marizza: -“ni siquiera con esa chica de recién, con la que te ibas a casar”-
Pablo sonríe –“no ni con ella, cuando te perdí me perdí yo también caí en el alcohol, necesitaba alguien como vos y ella me ayudó a salir de ahí y era parecida a vos, y me aferre a eso”-
Marizza: -“la amabas”- pregunta mientras sigue observando todo
Pablo: -“estamos preguntonas hoy, no no la amaba, nunca la ame, solo estaba aferrado al parecido que tienen y como siempre la cague, le vendí una historia que no podía ofrecerle”-
Marizza no pregunto más subió hacia la habitación que compartían con Pablo, miro la ropa del chico en el Placard y se sentó en la cama, el lugar tenía un ventanal con balcon.
Pablo: -“y no recordas nada”-
Marizza: -“no pero me siento en casa y creo que eso es suficiente por ahora”-
Pablo feliz –“es suficiente, querés quedarte acá, te cocino algo”-
Marizza asintió, si bien ya era bastante grande para andar rindiendo explicaciones Pablo eligió avisar a la casa Colucci que ella se quedaría ahí con él, luego de eso se puso a preparar algo para aquella chica, la felicidad que sentía de tenerla de nuevo con él era inimaginable.
Comieron y conversaron hasta tarde, él tenía fotos de shows y el viaje a Bariloche que hicieron juntos y eso le mostró a Marizza.
Pablo: -“bueno ya está bien por hoy es mejor que descanses”-
Marizza: -“por que yo quiero saber más Pablo no tengo sueño”- protesta
Pablo: -“no resongue señorita, escuchaste al médico dijo que vayas de a poco y descanses así que ya sabes”-
Marizza: -“esta bien, por lo visto no te voy a ganar, tengo ropa acá, para dormir”-
Pablo: -“si dejaste un poco, pero no pijamas”-
Marizza: -“y como dormía entonces”-
Pablo con picardía –“en serio querés saber eso”-
Marizza: -“dale tonto en serio”- sonríe
Pablo: -“esa sonrisa es la más bonita que ví en mi vida, volviendo al tema dormías en lencería loquita y para andar por la casa te ponías alguna remera o camisa mía”-
Marizza: -“entonces me prestas algo tuyo así me pongo”- pregunta, no se sentía lista para dormir así no más
Pablo: -“si bonita obvio elegí lo que quieras, yo voy a preparar mi cama acá”- dice señalando el sillón
Marizza: -“perdon aparezco te cambio los planes te quito la cama”-
Pablo: -“vos no te preocupes si yo soy feliz así”-
Marizza subió y busco en el Placard de la habitación tenía razón ahí había ropa de su talle pero distinto a lo que ahora usaba, busco hasta encontrar una camisa celeste de Pablo se sacó la ropa, se dejó solamente una vedetina de encaje y se puso la camisa, se acomodó en la cama del rubio tomo su medicación y se dispuso a dormir. Pablo durmió un rato en el sillón luego de estar un buen Tiempo pensando en cada momento que compartió con Marizza, cuando logro dormir se despertó de un salto, había tenido una pesadilla, se levantó y fue a ver qué su chica este bien, ahí estaba ella medio boca abajo abrazada a la almohada durmiendo, tan calma y serena, todo lo contrario a lo que era despierta, seguía durmiendo en la misma posición que cuando lo hacían juntos, era obvio que una parte de su memoria seguía ahí en las cosas habituales de ella y no se lo habían podido sacar,se acercó le dio un suave beso en los labios y bajo a intentar volver a dormir ella entre dormida sonrió.
Al día siguiente al despertar, él se levantó en jogging sin remera a hacerse un café, era la mejor opción para despabilarse, mientras bebía un sorbo de su taza ve a la mujer de sus sueños bajar bruñendose los ojos buscando despabilarse con su camisa favorita de camisón, eran escasos los botones que tenía abrochados, y a pesar de lo grande que le quedaba seguía siendo la más sensual. . . .

Mi Mente Te Olvido, Mi Corazon NoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora