LUNA- Junior H

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Catalina:

Después de dejar a los chicos a su hotel decidí quedarme en la casa familiar con Emi. Hoy fue un día divertido, además, Antonio no era cómo creía. En realidad ni siquiera se que creía, pero me agrado, me agrado bastante.

-oye Cata- dijo Emi entrando a mi cuarto ya en pijama, se acosto a lado de mi y agarro mi cobija para taparse con ella. Parecía un bebé, y eso era para mi, mi hermano bebé.

-que quieres renacuajo- conteste quitándole la cobija y tirándolo de la cama, si, es mi bebé, pero sigue siendo mi hermano, así que le toca sufrir.

-eres una grosera, ya no te voy a decir de lo que me entere- dijo sobándose la rodilla, rodeé los ojos y me tire al piso a lado de él.

-ya perdón, ¿de que te enteraste?- conteste abrazándolo, el hizo una mueca de asco y me empujó.

-ugh, no me abraces, ya estoy grande para que mi hermana me trate como bebé- dijo mirándome, yo solo levante la ceja y el me abrazó.

-¡es broma Cata! Me encanta que me chiplees, pero no le digas a mis amigos- contesto mientras me daba un beso en la mejilla, yo rei y me senté en mi cama, el se quedó en el piso.

-bueno bueno ahora si, prepárate para el chisme, ¡Gabito me dijo que Junior le dijo que Nata le dijo que su cita con Camila va de maravilla y que si quiere algo serio con ella!- dijo rápido mi hermano, no entendí ni la mitad y creo que se dio cuenta por que volteo los ojos.

-¿no entendiste verdad?- me pregunto, yo negué con la cabeza y el suspiro.

-Nata quiere algo serio con Camila, con MI Camila, es que no lo entiendes Cata, ese debería ser yo- respondió triste mi hermano, no pude evitarlo y me reí en su cara, pensé que ya había superado a Cami, pero al ver que no se rio conmigo me volví a sentar en el suelo alado de él y lo abracé.

-¿si entiendes que cami tiene 19 y tú 16 verdad?- el asintió triste.

-pero bien dicen que para el amor no hay edad, mírate a ti con Junior, el tiene 22 casi 23 y tú 18 y nadie les dice nada- replico mirándome con una sonrisa burlona; pobre iluso, está muy equivocado.

- Aquí la diferencia es que Antonio y yo no nos gustamos, y aunque así fuera yo soy mayor de edad así que no me vas a convencer Emiliano Francesco Garza Orsini- conteste esperando que su sonrisita desapareciera, pero solo se hizo más grande.

-mimimimi, ese hombre te ama Catalina, el te veía como si sí fueras bonita e interesante, pásame el amarre a ver si así Camila me hace caso- respondió codeándome.

-si sigues diciendo tonterías te voy a correr de mi cuarto- dije acostándome en mi cama mirándolo mal, el se levanto y me saco la lengua, cerro la puerta y luego se regreso a abrirla. Lo voy a matar.

-¡Emiliano regresa a cerrar la puerta!- le grite, pero sabía que era inútil, mocoso.

Me levante y cerré la puerta para después apagar la luz... lo que dijo Emi no era verdad, no podía serlo, ¿yo? ¿Siquiera atraerle a Antonio? Pfff obvio no.

Me levanté con el sonido de mi celular; eran las 6am, ¿quien carajos está despierto a esta hora? Conteste sin ver quien era.

-que- dije enojada, odio que me levanten temprano, yo suelo levantarme a las 8 cuando son vacaciones, me quitaron 2 preciadas horas de sueño y quien lo haya hecho merece sufrir.

-¿así le hablas a tu padre?- escuche a mi papá decir, sonreí y mi enojo desapareció.

-¡papi! ¿Como están tú y mamá? Los extraño mucho- conteste feliz, no era común que mis padres estuvieran presentes, pero como amaba cuando lo estaban.