Dos mejores amigos que desde pequeños se prometieron crear el circo más inigualable y famoso que haya podido haber en el planeta tierra, pero para eso, tendrían que encontrar personas únicas en su travesía.
➺ Zodiaco BL/OMEGAVERSE.
➺ Inicio: 11/01/2...
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Avery jugaba con sus manos nervioso, esperando en la caravana de Lysander a este.
Sus mejillas estaban sonrosadas y su corazón latía desbocado.
Creía, ahora, entender lo que le pasaba, lo había leído en uno de los tantos cuentos que Phyllis le prestó cuando estaba aprendiendo a leer.
El famoso "amor"
Eso es lo que exactamente siente cada vez que ve o interactúa con Lysander.
Se sentía como ahora, nervioso, agitado y ansioso.
No era simplemente instinto, no era simplemente su zorro el que quería a Lysander como alfa.
Le gustaba mucho cuando el alfa tenía su atención en él y le acariciaba con suavidad su rostro o sus orejas.
Le gustaba su sonrisa, como se reía, le gustaba escucharlo hablar cuando le explicaba cosas.
Sus mejillas se sonrojaron con más fuerza.
Einar tenía razón, tenía que abrir sus ojos y darse cuenta de muchas cosas con respecto a...sus sentimientos por Lysander.
La puerta se abrió y él sintió como su cola se crispó.
Lysander le sonrió en cuanto lo vio ahí.
—Veo que estabas ansioso por hablar—se rió con suavidad.
Avery asintió mirando sus manos.
—¿Qué es el amor romántico exactamente, Lys?—le preguntó sin dar muchas vueltas.
El signo mayor abrió sus ojos con sorpresa sin esperar realmente esa pregunta.
—Ei me dijo que debería de hablar contigo y que...debía abrir mis ojos, antes no lo entendía...
—¿Y ahora?
Avery lo miró avergonzado y se acercó a él con lentitud.
—Lo entiendo perfectamente—fue ahí cuando el corazón del alfa alto comenzó a latir de forma apresurada.
Lysander estaba muy expectante de lo que diría el menor.
Avery tomó la mano del contrario y la posó en su propia mejilla mientras sonreía.
Lysander se sonrojó.
—Me gustas mucho, Lysander.
Oh por...el mayor no sabía siquiera cómo reaccionar, estaba estupefacto, si era totalmente sincero nunca esperó que el contrario correspondiera alguna vez sus sentimientos.
—Lys—el híbrido lo miró alarmado.
¿Había sido muy apresurado? Sus orejas se bajaron.
—¿Te descompu...?—aunque el híbrido no pudo terminar su pregunta porque su rostro fue acercado al contrario con algo de fuerza.
