¿Fingiendo ser pareja por sexo? [ Kagehina ]

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*Nota autora:

Sorpresa mis amores. Son exactamente las 23:32 de la noche y estoy aquí haciendo un nuevo capítulo porque literalmente a los dos minutos de publicar el anterior capítulo ya tenía comentarios y votos. Me he animado y os merecéis que me duelan los ojos y las manos por un nuevo capítulo. Da igual insomnio, quiero haceros felices por vosotros hacérmelo a mí con votos y comentarios <3

Bueno dejo la charla y vamos al lío, que seguramente muchos quieren eso en vez de leer esto. Gracias de nuevo a todos y espero de verdad que os siga gustando y no este perdiendo la narrativa (hay veces que pienso que está mal y por eso tardo en publicar, pero al leer vuestro comentarios diciendo que amáis como escribo, me animo más).

Estoy escuchando Moonlight de Kali Uchis y vampire de Olivia rodrigo, por si os interesa y os gustaría poner una canción de fondo perfecta para leer esto.

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Al fin suena el maldito altavoz indicando el inicio del partido. Al menos eso piensa Ukai quien veía como Hinata y Kageyama eran súper, ultra, mega, hiper pegajosos entre sí. Vale que se quiera, pero hay gente delante soltera que le dan envidia ver como otros tienen lo que otros nunca.

Todos posicionados y listos para comenzar. Hinata ha ido casi quejándose de haberse golpeado justo en un chupetón que tiene por la pierna. Sí, las esquinas de las cosas duelen un huevo cuando golpean en tu cuerpo accidentalmente.

La tensión se nota en el ambiente. Tanto como las presiones miradas puestos en ellos, son el centro de mira de las miles de personas que hay ahí. La presión aumenta cuando el equipo contrario marca sacando.

Hinata mira detrás, está Nishinoya analizando todo e intentando medir precisión, velocidad y cosas así del que saca en el equipo contrario para poder levantarla como líbero que es.

Saca de nuevo el equipo contario. Nishinoya apenas la levanta medio metro. Vuelven a marcar. Es aplastante con que miradas los fulminan en el otro lado de la cancha. Esos ojos tan fríos y queriendo derribar son bastante penetrantes para Hinata. Vaya, mira que es casualidad ver a tu antiguo y mejor acosado siendo tu enemigo.

Lo bueno es que parece que él a Hinata no lo reconoce. Lo alivia un poco, por lo menos hasta que el equipo ajeno vuelve a sacar.

Esta vez Nishinoya si consigue elevarla más y permitir que Kageyama coloque la pelota. Tanto señuelo como as y rematadores saltan, todos dispuestos a ser una distracción para que el 'pequeño gigante' remate con esa fuerza tan inmensa.

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Suspira agitado, la pelota vuelve a caer a su lateral. Mierda, vuelven a marcar punto. Al equipo contra el que luchan están a uno de ganar, sólo a uno. Hinata está tragando saliva constantemente pensando solo en rematar. Si quieren ganar tienen que anotar cinco puntos más.

El sudor resbala por su frente y mejilla. Se oye al árbitro tocar el silbato indicando tiempo muerto del Karasuno. Hinata con pisadas pesadas se aproxima junto todos, manteniendo un aura depresiva y asumiendo su derrota.

—¡Animaros por dios! —replica—¿Así cómo queréis ganar? Si asumís la derrota no tendréis opción de ganar y os rendís. Asique a mover esas cabecitas y cuerpecitos porque nosotros ganamos esto siendo los mejores de todo el puto mundo —Nishinoya que no estaba tan mal, sonríe y anima también.

—¡Sí! —Hinata ve como poco a poco todos animan también. Pero ahí está él, quiero, pensando varias veces si podrá rematar otra vez más. Esto es algo similar a hace unos años, en aquel partido que se desmayó.

Está mareado, el dolor vuelve. Kageyama mira de reojo a este, más por el hecho de no escuchar su voz entre los ánimos y chillidos de alegría de todos. Todo el Karasuno son unos bipolares de mucho cuidado.

—¿Hinata, pasa algo? —lo ve con su brazo aplastando un poco su barriga. Le duele, y ahora lo nota Kageyama. Se pone de rodillas frente a él para apartarle el pelo de la frente y dejar ver unos ojos cerrados con fuerza, intentando dispersar el dolor con ello—¿Necesitas descansar un rato?

Hinata también se pone de rodillas apoyando su frente en el hombro de su novio, suspira pesado y angustiado—Tranquilo, puedo aguantar.

—Iremos al médico después de esto.

—No, no hace falta, no es nada —vaya mentira, parece como si fuera a parir o algo similar. Su barriga duele mucho. Intenta mantener la compostura pero no puede, duele, y su cara lo dice bien claro. Kageyama rodea sus brazos por Hinata.

—Iremos, no pienso dejar que la persona que más me importa sufra —lo separa para con la mano en su barbilla hacer que lo mire, abriendo sus ojos—. Y me da igual que no quieras, ¿bien?

—Pero... —es interrumpido por una presión de bocas que dura aproximadamente cinco segundos.

—Ni peros ni manzanos —no sabe como Kageyama siempre consigue, incluso en los peores momentos, hacerle reír con sus chistes o frases absurdas como esta. Aunque el dolor siga ahí, sonríe, ama como su novio es tan protector.

—Vale, ahora abrázame que me calma.

—Te aprovechas siempre de estas situaciones, ¿verdad? —siempre, Kageyama, consigue que a Hinata se le pase muy muy muy poco el dolor y por micro segundos olvide que su vida está llena de problemas.

—Por favor, lo digo enserio —a ver, aquí ha mentido un poco. En verdad si lo hace porque se le pasa algo de dolor y porque estar envuelto de esos brazos fuertes y protectores que ha besado algunas veces es bastante reconfortante. Algo que ama Hinata de Kageyama, una de esas infinitas, es que él aún sabiendo que se provecha de sus mimos cuando está mal, se deja porque es la persona más amable que existe, aunque no lo demuestre muy seguido.

—A cambio, no te sobre esfuerces en el partido. Por favor, no quiero verte desplomado e inconsciente como aquella vez.

—Está bien —intenta sonreír aguantando el dolor. Más o menos consigue decir con ello lo que quería 'realmente lo agradezco, todo lo que haces por mí'.

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Y cae al suelo. La pelota cae al suelo. Mira a todos lados y hay un pequeño largo silencio. No se oye nada, es raro. Aunque es normal, vuelve a estar inconsciente después de marcar el punto que les reclama la victoria.

De nuevo, Kageyama preocupadísimo al igual que el equipo llaman a una ambulancia. El novio es quien sube de acompañante mientras la gente y las noticias se llenan del reciente suceso. Aunque eso ahora le importa más bien poco, ahora su real importancia es Hinata.

Suspira por todo el camino. Mira que le ha dicho que no hiciera fuerzas de más, pero nunca le hace caso cuando se tarta de eso. Tampoco lo hizo la última vez.

Realmente está preocupado.

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*Nota autora:

Este capítulo dedicado a SoyCheeseHistorias y el/la próximo/a es isabella_0810 <3 Gracias por leer y espero que os haya gustado que haya escrito dos caps el mismo día.

Son las 0:12, me duelen los ojos. Ahora si me voy a dormir, buenas noches al menos desde mi país. Que tengáis suerte en todo y nunca os rindáis en nada.

¡Bye mis fans del Kagehina y el sexo <3!

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