Amethyst

33. Te encontré y no volveré a perderte

Hemos conseguido salir del castillo gracias a las indicaciones de Raven y Hunter. Por fin estamos afuera pero no hemos conseguido lo que estábamos buscando desde un principio, pero si la he visto a ella. Era Venus, era ella pero tenía las orejas como si fuera una bruja.

La incredulidad me golpeó con fuerza con mucha fuerza. ¿Cómo podía estar Venus allí? ¿Acaso era una prisionera? O, peor aún, ¿Podria estar del lado de los dragones? Los pensamientos se acumulaban en mi cabeza creando un caos interno. La persona que conocía, con la que compartí mi sueños y mis miedos, ahora parecía una extraña.

—Jaxon, Venus estaba ahí.

—¿Tú amiga humana?

—Si.

—¿Pero estaba con los dragones?

Me quedé en blanco si saber que responder una parte de mi quería gritar, exigirle una explicación, entender por qué estaba ahí. Pero otra parte, más profunda, aún se aferraba a la esperanza de que todo fuera un malentendido, una cruel ilusión del miedo a la guerra que pueda provocar que no hayamos conseguido la amatista.

—Estas muy callada eso es que sí —Interviene Lyra

—No, tiene que ser prisionera.

El miedo apareció pensamientos cuando saque esa conclusión. ¿Estaba Venus en peligro? ¿Estaba siendo manipulada? La preocupación por su bienestar me hacía temer lo peor. Ver a Venus allí, en medio de aquellos que consideraba enemigos, era como perderla de nuevo, una pérdida que nunca había aceptado del todo. La nostalgia de los tiempos compartidos y la amargura del presente se entrelazaban, creando en mí una tormenta de tristeza y truenos que arrasaban en mi interior.

—Jaxon, hay que rescatarla y tu plan no ha funcionado.

—Si que a funcionado—Interviene defendiendo su plan. —Pero

—Pero nada, no ha funcionado. ¿Tú ves la amatista aquí? Por qué yo no y sin amatista estamos perdidos. —Le interrumpo cosa que lo molesta bastante.

—¡No me interrumpas nunca más! —Grita furioso— Hemos fallado por el tiempo. Pero mi plan ha funcionado, a si que lo repetiremos.

—¡No!— Lo vuelvo a interrumpir —Hay cambios de planes y ahora no sólo hay que recuperar la amatista.

—¿No estarás pensando...—Interviene Lyra que parece  leerme la mente.

—Tambien vamos a recuperar a Venus —Y vuelvo a interrumpir cabreando aun más a Jaxon.

—¡Tú aquí no das las putas órdenes!

—Las órdenes aquí las das tú a tus esclavos, pero yo no soy una de esas.

Y con esto tiro para adelante siguiendo el camino por el que vinimos sin esperar a nadie sola esperando volver a casa árbol sin ni siquiera saber el camino de vuelta. Obviamente sabía que esto no sería tan fácil sabiendo que he roto el ego de Jaxon y este está demasiado enfadado como para aguantarme pero igual estoy yo asi que veremos quien de los dos sale quemado ahora.

—Te vas a quedar quieta y me vas a escuchar. Joder.

—No

—¡Max!

—No

—¡Puedes dejar de decir "no" a todo y escucharme!

—No

Parece ser que ya le toque demasiado la moral ya que se abalanza a mi y me acorrala en un árbol esperando que me quedé calladita y sumisa ante él y que le tema como todo el mundo.
Que pena para él que no soy como todo el mundo.