· Capítulo 43 ·

439 23 8
                                    

Cuando llegan Tom y Junior a la casa, me sorprendo cuando veo que Junior se acerca a donde estoy con una sonrisa en su rostro y me abraza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando llegan Tom y Junior a la casa, me sorprendo cuando veo que Junior se acerca a donde estoy con una sonrisa en su rostro y me abraza. No cabía duda que la noticia le había gustado porque no se le veía para nada molesto, como pensaba su padre que iba a estar.

- Mimi eres una guerrera, ¿lo sabías? - me dice dándome un beso.

- Gracias Junior.

- ¿Cómo estás?

- Bien, mejorando poco a poco. ¿Y tú que tal? ¿Qué te pareció... todo? - le pregunto dubitativa.

- No te puedo negar que me sorprendieron varias cosas de las que me contó Papá, pero Mimi, ¿en serio pensabas que no los había descubierto ya?

- ¿Cómo?

- Mimi, tus mejillas coloradas cada vez que llegaba y los veía juntos y la ropa interior femenina en el closet de mi padre me dieron las primeras pistas, ya luego todo fue observar un poco más y allí no había dudas. Y así como se lo dije a mi padre te lo digo a ti ahora, te mereces lo mejor del mundo y si ese es mi padre yo estaré feliz de verlos juntos formando una familia.

- Oh Junior, gracias por tus palabras de verdad. - le digo con una lágrima bajando por mi mejilla, me había tocado la fibra eso que había dicho y nos fundimos en un abrazo cargado de cariño.

- No, gracias a ti por convertirme en ¡hermano mayor! ¿Dónde esta la princesa que quiero conocerla?

Lo llevo a la habitación de Andrea y él queda mudo viéndola desde el borde de la cuna. No puede evitar que le caigan un par de lagrimas de los ojos y yo estoy igual de emocionada. Verlo tan contento me alivia el corazón y sé que Tom está haciendo un esfuerzo para no llorar. Veo en su rostro una felicidad enorme y eso me tiene muy conmovida.

Dejamos dormir a la bebé un ratito más, porque sabemos que despertar un bebé no es nada recomendable, y nos vamos al salón hablando animadamente. Junior me contaba de su vida de soltero en Londres, de su trabajo y de sus decepciones amorosas. No había pegado una con ninguna chica. Una lástima porque era tremendo partido.

Al cabo de una hora llegan Fer y Celeste a la casa, habían salido a buscar unas cosas para la cena que íbamos a preparar. Hoy nos reuniríamos todos en la casa para celebrar la llegada de Celeste y de Junior.

- Hola chicas - les dice Junior al verlas.

Ellas lo saludan y comenzamos a hablar todos animadamente. Me aparto un poco del grupo y me acerco a Tom.

- Oye... ¿te apetece un plan los dos solos?

- ¿Dónde firmo? - me dice y le sonrío.

- Hablé con las chicas y se pueden quedar mañana con Andrea mientras tu y yo nos vamos a unas terapias que necesito para mi pierna. - y subo mis cejas en señal de picardía.

- Excelente idea. Ya sabía que algo se te ocurriría. ¿A que hora nos vamos? ¿No puede ser hoy? - me dice al oído.

- No seas impaciente.

Ardiente Secreto [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora