CAPÍTULO 15

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- ¡Paola! - dice la odiosa enfermera abriendo la puerta - Me alegra verte aquí con Cesar.

Frunzo el ceño hacia ella. ¿Quién jodidos le dio permiso de llamarme con tanta familiaridad?

- Supe que te vas mañana, guapo - sonríe - Yo podría hacerte revisiones a domicilio si quieres.

Mi madre sonríe como si todo fuera una maldita broma, pero T/n y Andrea nos observan desde la puerta.

- ¿Quieres ayuda para darte un baño? - dice coqueta - Ya sabes, por lo de tus costillas - yo paso saliva incómodo.

- Creo que mi novia puede hacer eso - extiendo la mano hacia ella.

No toma mi mano, pero camina y se para junto a la cama, la enfermera le echa un vistazo de arriba a abajo antes de volver a mirarme.

- No creo que tenga experiencia, Cesar - dice haciendo una mueca.

- Señor Parra, querida. Solo su familia y yo lo llamamos por su nombre - dice T/n.

La enfermera se ríe con burla y luego gira para ver a Paola. Mi madre luce incómoda, luego camina hacia la puerta y desaparece con Andrea. A la chica no le queda más remedio que salir de la habitación a toda velocidad.

- Hola - se sienta T/n en mi cama - ¿Recuerdas todo lo que te pasó?

- La mayoría, sí - confieso - Recuerdo el golpe, estar de cabeza en el auto, despertar y que todo estuviera oscuro...el doctor asegura que las bolsas de aire me protegieron de hacerme más daño, y que la inconsciencia se debía al gran dolor que sentí.

- Lo siento tanto - susurra - Tardamos tanto en encontrarte, nos estábamos volviendo locos pensando que te habían secuestrado.

- No quise preocuparte, me alegra estar de vuelta contigo - le sonrío.

- Es tarde, deberías dormir. Mañana iremos a la casa de tus padres - dice limpiándose una lágrima.

- Cásate conmigo - le digo de pronto.

- No - su respuesta me sorprende.

¿Qué mierda? ¿Dijo que no? ¿Por qué mierdas No?

- ¿Por qué no?

- Porque tuviste un accidente, te golpeaste muy fuerte la cabeza y creíste que ibas a morir. Es miedo, no amor - dice como si fuera obvio.

- Lo dices porque no tengo un anillo, ¿Por eso dices que no? - ¿Otra vez la mierda de las flores y los corazones?

A pesar de que me niego a admitirlo, me sorprendo de haber hecho cosas dignas de ser llamadas cursis.

- Digo que no porque es hora que descanses, Cesar. Seguramente estás delirando.

- No tengo fiebre - me río fingiendo sentirme ofendido.

- Entonces solo te golpeaste fuerte la cabeza - me regaña.

Necia, necia, necia, señorita Montemayor. ¿Cuándo será el maldito día que haga exactamente lo que le pido?

- Me siento rechazado - digo haciendo puchero y ella ríe.

Me administran otro medicamento que me ayuda a relajarme y me quedo dormido. Mis malditas pesadillas han vuelto en forma de accidente automovilístico.

Abro los ojos y respiro hondo tratando de calmar mi agitación. T/n duerme en la silla junto a mi cama, pero sé que fallé cuando la veo levantar la cabeza.

- Nunca te hablé de mis pesadillas - espero que diga algo, pero no lo hace - Mi madre y padre siempre estuvieron para nosotros en cada momento, pero fui creciendo y mi forma de ser fue diferente que el de mi gemelo. A mi gustaba salir con muchas chicas, andar en fiesta en fiesta, pelearme con los demás. Aparte anduve en malos paso, no es cómo te imaginas, pero si de algo que no estoy muy contento o que algo que me alegre recordar.

Historia de Amor/Cesar Parra♥️🎸✨️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora