No había entendido el sufrimiento de su hermano con tanta fuerza hasta ese momento, recibiendo una inyección que le dolió hasta el alma pero que según las palabras del médico que habían traído a el área de preparación le daría los nutrientes que le habían faltado toda su vida por su mala manera de vivir, no queriendo contestar que era la única manera en la que sabía cómo vivir. La puerta se abrió viendo como un hombre joven de piel oscura como la de ella entraba a la habitación donde según había sido dicha, esperaba a su estilista, viendo como este la miraba sorprendido, al parecer no esperándose encontrar alguien dentro del lugar, intentando salir pero deteniéndose cerrando la puerta detrás de él.
—Eres la chica del distrito 11, Aemma Morris— dijo al parecer reconociéndola ahora que después de tres baños por parte de los empleados del Capitolio finalmente estaba presentable —La gente no hace más que hablar de lo bonita que eres, pero todos parecen haber olvidado lo que pasó con tu hermano— apretó sus puños en la camilla en la que estaba sentada, sintiéndose culpable de que gracias a ese maldito evento, ahora el mundo conocía a Enzo, una cosa que trato de ocultar toda su vida. —Me llamo Cinna— vio como el chico acercaba su mano a ella esperando que la tomara, pero no recibiendo respuesta de su parte —Vaya que eres seria, no deberías serlo aquí, la gente lo toma como insubordinación.
—¿Eres mi estilista?— escucho una risa del chico mientras negaba con la cabeza
—Ojalá lo fuera, tengo mejores ideas que cualquier estilista que te hayan asignado— levantó la mirada viéndolo confundida, esperando que dijera porque estaba ahí interrumpiéndola —Soy un fanático, pienso que tienes mucho potencial, y espero podamos ser amigos.— lo vio meter su mano a el bolsillo de su apretado pantalón de piel, viéndolo sacar de este una cadena plateada, haciendo que subiera sus manos a su cuello, no notando por los medicamentos que mientras la preparaban la habían quitado de su cuerpo —Rojo y blanco, esos son tus colores, trataré de decirle a tu estilista— puso la cadena sobre su cabeza, ayudándola a bajar por el gran volumen de su cabello, regresándola a donde debía de estar. La puerta se volvió a abrir viendo a un alto hombre de complextura extremadamente delgada y piel tan blanca como la nieve entrar con una tableta en sus manos.
—¡Cinna!, te dije que te encargaras de limpiar a los del 12, el chico tiene un olor horrible— escucho su voz tan aguda que sabía que si hubiera perros cerca estos se encontrarían sufriendo por el tono que tenía, el chico solo asintió antes de caminar hacia el, mirando su tableta unos segundos y acercándose a dar dos toques en esta antes de salir corriendo —Maldito insolent... Oh...— al parecer lo que fuera que el chico había hecho con su tableta lo sorprendió de buena manera, haciéndolo sonreír mientras levantaba la tableta y la ponía junto a su rostro comparando lo que fuera que estuviera en esta con ella, viendo una sonrisa traviesa aparecer en su rostro —Tiene futuro ese chico... ¡Oh! Perdona mis modales, Me llamo Remin, y seré tu estilista.
Al parecer tomando a consideración lo que fuera que Cinna hubiera hecho, los colores que escogieron para la presentación de su distrito iban con la temática de el otoño en los campos de cultivo, con los colores cálidos que podías encontrar y todos los frutos listos para cosechar y ser mandados al Capitolio, mostrando que ese año el distrito 11 estaba listo para ganar, o al menos así escucho que era descrito su vestuario por los presentadores en las grandes bocinas, estando junto a su primo quien tenía un chaleco rojo Borgoña en su cuerpo con enredaderas de trigo y algodón por sus brazos y pecho. Mientras que ella por otro lado tenía su cabello recogido y decorado con pequeñas piezas de algodón teñidas de dorado simulando una corona, con su vestido del mismo color siendo como si fuera una gran bola de algodón con un apretado corset de frutos secos apretando el aire de sus pulmones, pero viendo por los rostros pintados de colores extravagantes de las personas en las gradas, que lo que fuera que Cinna hubiera hecho, estaba sirviendo recibiendo muchas más rosas que el resto de competidores.
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LOTUS - Los Juegos del Hambre
Fanfiction"Bienvenidos a los 69 Juegos del Hambre, y que la Suerte, esté siempre de su lado"