El salón de la casa estaba iluminado y acogedor, con el aroma de la comida recién hecha llenando el aire. La familia ya estaba reunida, junto con algunos invitados cercanos, excepto por Halis y Ferit, quienes aún no habían llegado. La tensión era palpable, y el aire estaba cargado de expectativa.
-Por favor, siéntense- dijo Carlos con una sonrisa, intentando aliviar la tensión.
Los invitados tomaron asiento, mirándose entre sí con curiosidad y un poco de extrañeza.
Suna se veía entusiasmada, con una sonrisa en su rostro que no lograba disimular su ansiedad.
Latif llegó y se dirigió a los invitados, su voz seria y misteriosa.
-El señor Halis tiene algo que decir antes de la cena,- anunció, lo que provocó un murmullo de especulaciones entre los invitados.
Todos se miraron entre sí, susurrando y preguntándose qué podría querer decir Halis.
Suna se veía cada vez más emocionada, su sonrisa se ensanchaba a medida que pasaban los minutos.
Ferit llegó a la sala, y tomó su lugar entre los demás. Se sintió un poco incómodo al ver a su familia reunida, sabiendo que algo importante estaba a punto de suceder. Se preguntó qué lo retrasaba a su abuelo , y si alguien había notado su propia inquietud. Ferit sabía que bajo la superficie de la reunión familiar, había tensiones y secretos que nadie quería revelar. Se sentía como un extraño en su propia familia, y se preguntó si alguien había notado su ausencia.
Justo cuando el silencio se volvía insoportable, el señor Halis llegó a la sala, y todos se callaron expectantes. Ferit se sintió aliviado de que su abuelo hubiera llegado, pero también se sentía cada vez más ansioso por lo que estaba por venir.
Halis se veía serio y pensativo, y Ferit se preguntó qué podría estar pasando por su mente.
Se formó un silencio incómodo, hasta que Kazım lo irrumpió, rompiendo la tensión con su voz fuerte y segura.
-¿Me invitaste para hablar de negocios, patriarca?-preguntó Kazım con una ligera descontentadura.
Halis comenzó a hablar, su voz clara y firme. -Quiero hablar de una unión entre nuestras familias.-
Kazım se relajó un poco, pero aún se mostraba cauteloso. -¿Qué tipo de unión?-
Halis se aclaró la garganta. -Quiero que Ferit se case con una de tus hijas.-
Kazım sonrió. -Bueno, Suna está aquí. Por tradición, como hija mayor, debería ser la primera en casarse.-
Ferit se opuso rotundamente a la idea de casarse con Suna. -No, no puedo casarme con Suna. Quiero casarme con Seyran- dijo con firmeza.
En ese momento, Seyran llegó a la sala, vestida con un elegante vestido azul que resaltaba su belleza y juventud. Su cabello castaño estaba suelto, cayendo en suaves ondas sobre sus hombros. Sus ojos verdes brillaban con una mezcla de sorpresa, indiferencia y molestia. -¿Qué...?-, comenzó a decir, pero se detuvo al ver la mirada de su padre.
Kazım la miró con una expresión fría y amenazante, haciéndola callar. Seyran bajó la mirada, visiblemente incómoda.
Ferit susurró a Halis. -Abuelo, si quieres casarme, haz una propuesta al señor Kazım. Tal vez acepte si ofreces algo cambio.-
Halis se mostró sorprendido y un poco descontento con la propuesta de Ferit.- Ferit, no creo que sea necesario ofrecer algo a cambio de un matrimonio. No queremos comprar a una esposa para ti,- dijo con firmeza.
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Cᴜʀsᴇᴅ ᴅᴇsᴛɪɴʏ┆𝐬𝐞𝐲𝐟𝐞𝐫
Lãng mạn𝐂𝐔𝐑𝐒𝐄𝐃 𝐃𝐄𝐒𝐓𝐈𝐍𝐘┆𝔻𝕖𝕤𝕥𝕚𝕟𝕖𝕕 𝕥𝕠 𝕝𝕠𝕧𝕖, 𝕓𝕦𝕥 𝕔𝕦𝕣𝕤𝕖𝕕 𝕥𝕠 𝕤𝕦𝕗𝕗𝕖𝕣 𝐈𝐍𝐓𝐄𝐑𝐓𝐖𝐈𝐍𝐄𝐃 𝐅𝐀𝐓𝐄𝐒/título Anterior " Dos almas atrapadas en un destino impuesto, sin voz ni elección. Su unión, forjada por circunstanc...