Te quiero

105 10 0
                                    

Los días pasaron. Shane ya no iba a la cafetería; estaba muy ocupado en su trabajo. Lo entendía; aún así era insoportable el vacío que sentía al no verlo. Como pase de "Buenos días oficiales" a "Te quiero, Shane". Era vergonzoso. Sentia que tal vez todo esto era mi culpa, no debí decirlo, ¿qué tal si solo fue un juego para él? Shane no es un santo; ha tenido fama de mujeriego; razón por la cual lo he ignorado por tanto tiempo. No necesitaba ese drama en mi vida y no lo necesito ahora.

—______ —dijo mi compañera de trabajo llamando mi atención— Es hora de irse.

Este es mi segundo trabajo. Trabajaba en una gasolinera abierta las 24 horas. Podía ser aburrido estar de pie por horas en la noche, sin ver clientes toda la noche.

—Suerte en tu turno —dijé mientras agarraba mis cosas.

Sali y tomé mi tiempo. Llegando a la casa, la noche se sentía tranquila. El viento jugando con mi cabello se sentía tan bien. Necesitaba esto, un poco de tranquilidad y silencio. Solo podía pensar en Shane, especialmente ese día. Repasaba cada detalle.

—____— escuché decir a alguien detrás de mí.

Me sobresalté y mire con rapidez hacia atrás viendo una figura. Ese es...

—¿Shane?— se notaba la confusión en mi voz.

Él salió de la oscuridad y se acercó a mí. Estaba un poco serio.

—Lamento no haber hablado contigo estos días. El trabajo se acumuló sin Rick. —Miro al suelo y luego a mí—. Te extraño.

Estaba tan confundida, ¿cómo recuerda donde trabajo? Solo lo mencioné una vez hace meses.

- Shane, ¿qué haces aquí? ¿Sabes lo extraño que es que sepas donde vivo y trabajo?

- Lo siento, pero tenía que verte de nuevo.

- ¿Fue cierto lo que dijiste? Yo... Tu me quieres? - Salió de mi boca sin permiso.

Él sonrió y se acercó más a mí, quedando a centímetros de mi cara.

- Me duele que lo dudes —dijo antes de besarme.

No sabía qué hacer de nuevo; una parte de mí quería brincar en sus brazos mientras otra quería salir corriendo. Conozco a Shane hace 3 años. Siempre hubo un poco de coqueteo, pero nada serio. Con el tiempo ese coqueteo se sintio mas .... ¿Real? Sabia que le atraía, pero no pensaba que fuera tanto. Correspondí su beso y puse mis brazos alrededor de su cuello. El beso era cada vez más profundo. Sentia como mi cuerpo jadeaba por aire, pero los adictivos labios de Shane no dejeban de llamarme. Él puso sus manos en mi cintura y me acercó a su cuerpo. Su calidez se sentía bien. Me sentía segura. Era como si todo lo que estuviera buscando se encontraba frente a mí. A regañadientes nos separamos. Nos quedamos en silencio mirándonos a los ojos.

- Es peligroso que andes sola a estas horas de la noche. Déjame llevarte a tu casa

Lo pensé unos segundos.

- Esta bien - dije

Caminamos hasta su auto en silencio y continuamos así el resto del camino. No era un silencio incómodo, era relajante y reconfortante. No quería que esto acabara al llegar a la casa; quería que se quedara conmigo, sentir su calidez mientras duermo y su aliento en mi cuello.

—Shane, ¿te gustaría dormir conmigo de nuevo? —dijé rápidamente, intentando ignorar la vergüenza que sentía.

—Por favor, si alguna vez digo que no, toma mi arma y disparame —dijo sonriendo.

No pude evitar sonreir; no solo su cuerpo me atraía, esa personalidad graciosa y relajada era contagiosa.

—Llegamos —dijo sacandome de mis pensamientos.

Él iba a bajarse, pero lo detuve.

—Sube por las escaleras de emergencia —dijé—; debo dormir a mi hermano.

—Está bien —dijo soltando un suspiro de derrota.

Antes de bajarme del auto le di un beso rápido en los labios y salí corriendo a mi edificio. Al llegar a la puerta respiré hondo, tratando de recuperar mi compostura. Abrí la puerta. Vi a Carly en el sofá viendo la televisión.

—¿Alex está durmiendo? —pregunté en un susurro.

- Si, ¿como te fue hoy?

- Nadie murió en la tienda, así que bien.

Carly rió un poco y se levantó del sofá, se acercó a mí y me abrazó.

- Descansa —dijo saliendo del apartamento.

Caminé hacia la habitación de Alexby y efectivamente estaba durmiendo. Cerré la puerta con cuidado y rápidamente fui a mi cuarto; Shane estaba en la ventana esperando que abriera. Eso hice y él entró rápidamente.

- ¿Como esta tu hermano? - pregunto

- Esta bien - dije - esta dormido

Tomé mi ropa de dormir y me dirigí al baño. Me cambié rápidamente y volví a la habitación; al entrar vi a Shane sin su camisa mirando hacia la ventana. Se veia tan hermoso.

—¿Cómo puedes ser tan hermosa? —dijo él cambiando su mirada hacia mí—. En uniforme, en pijama. Me vuelves loco.

No sabía qué decir. Sentía mi cara roja de la vergüenza. Nadie me había hecho sentir como Shane lo hace.

—Deja de mentir, Shane —dijé mirando al suelo; no quería que viera cómo sus palabras funcionaban en mí.

Él caminó cerca de mí y puso sus manos a cada lado de mi rostro.

—Ojalá vieras lo que yo veo —procedió a besarme suavemente.

Correspondí su beso, haciendo que se acercara más a mí.

The Walking Dead: romance ante la muerte(Shane Walsh)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora