Novia

34 4 1
                                    


Me encontraba caminando hacia Lori, Carol y sus respectivos hijos. Me dijeron que las acompañara. Usualmente en la tarde se dedicaban a dar clases a sus hijos; me pareció una brillante idea.

—Se acabó el mundo, ¿por qué necesito aprender sobre adjetivos? —se quejó Alex.

—No me hagas pasar vergüenzas —le regañe.

Llegamos hacia ellas y nos dieron un espacio en la diminuta mesa. Nos sentamos en unos baldes.

- Alex puede estudiar con Carl; no me molesta que preste sus libros.

- Gracias —le sonreí

Lori comenzó a instruir a Carl y Alexby; yo no sabría qué enseñarle.

—Lo siento si asuste a sus hijos —dijo Jim tras nosotras.

Se encontraba amarrado en un árbol con Shane a su lado.

—Estabas insolado, nadie te culpa —contestó Lori.

—¿Te sientes mejor, Jim? —le pregunté.

- Si, el sol solo me que .... no lo se ....

- Jim, porque cavabas? - pregunto Dale

Este quedó en silencio.

- Habia algun motivo?

—Soñé algo anoche, no recuerdo bien. - Miró a Carl. —Tu papá estaba ahí. Estabas preocupado por él. No recuerdo el resto. ¿Te preocupa tu Papa?

- Aunno ha vuelto - contesto Carl

—No hay que hablar de eso —interrumpió Lori.

—Tu papa es policía. Ayuda a la gente. Probablemente encontró personas que necesitaban ayuda. Es muy duro. —miro a Shane—. ¿Tengo razón?

—Definitivamente —miro a Carl—. No te preocupes por eso, pequeñín.

Shane tomó la cubeta de agua y se acercó a nosotros.

- ¿Quién quiere ayudarme a limpiar el pescado?

Todos los niños se levantaron y corrieron.

—Quedate con Carol —gritó Lori a su hijo.

Nos encontrabamos solas, excepto por Jim. Tenía mucha curiosidad por saber qué sucedía entre ella y Shane. No quería sonar grosera o verme entrometida, pero ya van varias veces. Antes de que Lori se levantara de su asiento la detuve.

—Lori, hay algo que quiero hablar contigo —dije.

- Por supuesto - se volvio a sentar - Que sucede, cariño?

Comence a sudar.

- Shane .... tu y el se ven molestos. Ademas, ¿Crees que Shane se ha vuelto muy violento?

—Yo —se notaba nerviosa— solo es un hombre que ha visto cosas. Todo lo que sucede en el mundo cambiaría a cualquiera, pero jamás te haría daño a ti.

Sonrei.

—Tienes razón, tal vez veo cosas.

—Solo hemos tenido choque de opiniones, eso es todo.

Asintió y nos quedamos en silencio.

- Ire a ... ayudar a Shane - dije rompiendo el incomodo silencio

Caminé hacia los demás; encontré a Shane molestando a los chicos con los pescados.

—Oye —dije interrumpiendo— no juegues con la comida

—Tu hermana está amargada —dijo Shane a Alexby.

- Ya sabes lo que tengo que soportar.

- No seas asi - dije riendo - Que necesitan?

- Estamos bien aquí, amor. Creo que si pudieramos encontrar más setas o ramas sería perfecto.

- Bien, yo ire

—Nadie va solo —me dijo Shane en un tono serio—. Yo te acompaño.

—¿A buscar setas? —dijé entre risas

- Es un trabajo digno. Además, Carol, Amy y los niños tienen todo bajo control aquí.

—Bueno.

Shane tomó su arma.

- ¿Aun tienes el cuchillo que te deje?

- Sí, Shane.

Nos encaminamos más al bosque. Cada sonido era una tortura. No sabias si era un animal, un caminante o una persona. Cualquiera de esos dos sería peligroso.

—Estoy contigo, amor —dijo tomandome de la mano. ¿Has pensado mi pregunta?

- Cual?

Nos detuvimos.

- Quiero que seas mía, no solo sexualmente. Te quiero a ti; tu alma, tus pensamientos, quiero vivir contigo lo que nos queda de vida. Y no prometo que sea mucho, pero haré lo mejor para que estés cómoda. No solo tú, también Alex. Sé que él va primero en tu vida y respeto eso. Solo quisiera levantarme cada día sabiendo que te tengo a mi lado. Los dos contra el mundo.

Comence a llorar.

—No llores, mi amor —secó mis lágrimas y me dio un beso en la frente—. No sé qué me hiciste, pero no me arrepiento de haber entrado a tu trabajo ese día. Te veías hermosa, una belleza que no había visto; tu carácter era fuerte, pero dulce con tus allegados. Quería que me trataras así. Sentía tantos celos cuando hablabas con clientes regulares y les dabas esa sonrisa. Yo quiero que me mires y sonrías así.

Me abalance hacia él y lo bese. Puse mis manos alrededor de su cuello e hice que me ayudara a cubrir su cintura con mis piernas. El arma cayó al suelo, al igual que mi cuchillo. No podía pensar con claridad. Ataque su cuello como él lo hizo conmigo.

- Hazme tuya - dije entre jadeos

- Que?

- Hazlo, por favor.

Él me solta y nos recostamos en el suelo. Él se puso encima de mí, pero se veía incomodo.

—No quiero que tu primera vez sea al aire libre donde cualquier cosa pueda pasar.

- Oh...

Me levanté y sentía mi cara arder.

—Amor, no pienses que no quiero, estoy controlándome con todas mis fuerzas. En la noche, sí.

- Y Alex?

—Puede tener una pijamada con Carl.

- No sería incomodo para Rick y Lori.

—No —dijo haciendose el pensativo.

rei.

The Walking Dead: romance ante la muerte(Shane Walsh)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora