Capítulo 8 (Gran Familia)

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Maraton 1/4

POV Anne

Entré en mi casa, fui directa a mi habitación, tiré la mochila al suelo y estrujé la cara contra la almohada emitiendo un grito mientras daba puñetazos y patadas al colchón intentando sacar de mi interior la frustración que sentía.

Eso era superior a mis fuerzas. Me explico: esos cuatro días habían sido agobiantes, estresantes y horripilantes. El lunes por la tarde no pude ir a casa debido al montón de reporteros que se agolpaban en la puerta de la entrada. El martes me encontré nada más y nada menos que una cámara en el baño de casa ¡EN EL BAÑO! y el miércoles fue el peor de todos: un grupo de niñas de ocho años se abalanzaron sobre mí y me atacaron en el parque mientras gritaban cosas como "¡Aléjate de él!" o "¡Es mío!" Eso sin contar con el grupo de periodistas y fotógrafos que no se despegaban de mí y no tenían intención de irse. Y que no se me olviden los constantes mensajes de Thomas diciendo que quería volver a verme y de lo sexy que era.

—¡Vaya, vaya! Pero si resulta que ahora mi hija ni me saluda al entrar.

—¿Mamá? ¿Qué haces tú aquí? ¿No llegábais mañana?

—Um... Hola a ti también Anne, la excursión ha ido genial, gracias por preguntar, solo que hemos vuelto antes porque no me encontraba muy bien.

—Lo siento mamá. ¿Estas mejor?

—¡Oh!, yo si, pero Mike... —dijo tocándose el vientre. Y es que mamá está embarazada. Y esto puede parecer una locura, pero tiene intención de seguir estándolo una y otra vez.

Yo creo que mi madre es la única persona del planeta que quiere tener más de veinte hijos. Lo que pasa es que vio la película de "La gran familia" y se le metió en la cabeza lo de formar una familia hiper-extra-súper-mega grande.

Ya va por el dieciseisavo hijo, así que no va mal encaminada. En casa somos: Dexter, Sharon, Hilary, Alice, Matt, Ethan, Luke, Becca, Christian, Bobby,Claire, yo, Veronica, Jeremy, Charlotte y Mike, que está en camino.

—Bueno, ¿me vas a explicar ahora por qué tengo una hija famosa y no lo he sabido hasta esta mañana?

"Mierda" pensé para mí mientras notaba como mis mejillas se volvían rojas.

—Mamá, no es lo que crees.

—¿Qué crees que creo?

—No sé, ¿Qué crees que creo que crees?

—¿Qué? A ver, lo único que sé es que tu cara sale en un montón de revistas y periódicos. Y la verdad es que he preferido no leer nada porque yo sé, por mi propia experiencia, como pueden llegar a dramatizar y exagerar las cosas los escritores, y más aún si se dedican a escribir cotilleos —tampoco lo sabéis, pero mi madre fue Miss.Primavera ocho años seguidos y cuando se retiró para dedicarse a su familia la prensa se le echó encima, y desde entonces odia a toda persona que se dediquen a escribir cosas sobre los demás—. Por eso estaba esperando que tú me lo explicaras.

—Pues mira, en realidad es una tontería. Todo esto empezó con un chico...

—¡¿Un chico?! —exclamó Christian que pasaba por el pasillo— ¡¿A quién tengo que pegar?!

No me llames princesa #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora