💵Capítulo 17💵

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KAREN

Salir de su oficina y mi teléfono empezó a sonar. Lo miré y era Chlóe; rápidamente contesté.

—"Dime".

—"Vamos a comer juntas hoy".

—"Ya había pedido comida, pero si voy a comer sola, mejor prefiero comer contigo".

—"Te espero en nuestro restaurante favorito".

Cuando terminé la llamada, Edward estaba detrás de mí.

—"Tienes el resto del día libre; puedes irte cuando quieras".

Busqué mis bragas y me las puse, salí hacia mi carro y luego conduje directo hacia el restaurante. Cuando llegué, Chlóe me hizo una seña para acercarme a ella.

—"Gracias por invitarte".

—"Te ves muy mal".

—"Tengo resaca".

Me senté y el camarero vino enseguida; pedí un café fuerte y un poco de ensalada.

—"¿Dónde estaba bebiendo y por qué no me invitaste?".

—"Estaba bebiendo en la casa de Edward con su familia y luego con él".

—"Cuéntamelo todo".

Le conté lo poco que recuerdo y lo que Edward me contó esta mañana.

Chlóe abrió los ojos un poco antes de que una sonrisa apareciera en su cara.

—"Te acostaste con Edward".

—"No hicimos nada".

—"Pero igual dormiste con él".

—"Sí".

Ella me miró de arriba abajo.

—"Te gusta Edward".

—"¿Qué?".

—"Mírate, estás decepcionada porque no ha pasado nada entre ustedes dos".

—"Claro que no lo estoy".

—"Soy tu mejor amiga, Karen, te conozco quizá más que tú misma".

—"Edward no me gusta y no me puede gustar".

—"Si tú lo dices".

Después de comer, me despedí de ella y fui a la casa de Edward; después de todo, solo había salido a comer, ¿qué iba a hacer en mi casa, aburrida?

Llegué a la casa y Edward estaba en la sala comiendo. Subió su mirada y se encontró con mis ojos.

—"Te dije que te tomara el día libre".

—"Después de todo, terminé de comer y no quería estar sola en la casa".

—"¿Eso quiere decir que tu cita fue aburrida?".

Lo miré de arriba abajo; él pensaba que estaba comiendo con un hombre.

—"Claro, solo propuse encontrarnos en la noche".

—"Muy bien, cualquier hombre menos mi amigo".

—"Con él estoy saliendo, con Jack".

Ese era el nombre del amigo que él le dijo que yo estaba comprometido; solo lo supe por los correos que él le envió a Edward.

Él se levantó y se acercó a mí. —"No puede salir con él, está prohibido".

—"¿Y quién dice que está prohibido?".

—"Yo lo digo, y eso es lo que importa".

—"Claro que no, es mi vida y tú no puedes meterte en ella".

Se acercó mucho más. —"Puedo y se me da la gana".

Cuidando Al CeoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora