En el aire flotaba una tensión palpable, como si la misma naturaleza estuviera conteniendo la respiración. Cada fibra de Ellie estaba inundada por un torrente de emociones, un tumulto de sensaciones que la abrumaban y fascinaban al mismo tiempo.
En ese instante, sintió cómo su esencia se desdibujaba, mientras una nueva vida comenzaba a brotar en su interior. La transformación la envolvía, el mundo se tornaba más vívido. Los colores eran más intensos, los sonidos más nítidos, y una fuerza desconocida despertaba en ella. Finalmente, su parte vampírica despertó; aunque había perdido parte de su humanidad, había ganado un poder inimaginable. En su mirada brillaba una mezcla de tristeza y euforia, un recordatorio de lo que había sido y de lo que ahora era: un habitante de la noche, un cazador en un mundo lleno de secretos.
Cordelia observaba fascinada cómo Ellie se erguía con la gracia de un depredador. Ya no era una simple espectadora; ahora era parte de la noche, un eco de lo eterno. Con un último latido de nostalgia, la joven dio un paso adelante, dejando atrás el peso de la mortalidad. Sobrecargada por lo que acababa de vivir, se desmayó en los brazos de la vampira mayor, que no permitiría que su "princesa" cayera nunca más.
Cordelia la depositó suavemente sobre la cama, acariciando su rostro con ternura. Mientras lo hacía, escuchó el sonido de las pisadas de sus fieles amigas. Eva, su mano derecha, una vampira sabia y experimentada, con un sentido del humor agudo, y Alice, la vampira más joven del grupo, juguetona y llena de curiosidad, entraron en la habitación con una mezcla de impaciencia y emoción.
-Qué intenso ha sido todo. ¿Ves, Eva? Te dije que aceptaría. ¿Quién podría rechazar a Cordelia? -dijo Alice, acercándose a Ellie con entusiasmo y dando saltitos de emoción.
La aludida puso los ojos en blanco exasperada por el nerviosismo de su compañera.
-Ya no hay vuelta atrás- añadió dirigiéndose a Cordelia.- ¿Estás segura de que esto fue lo correcto? La has convertido sin darle tiempo a entender a todos a los que se va a enfrentar.
-El mundo humano es cruel y efímero. Ahora tiene la oportunidad de ser libre y de tener la fuerza para enfrentarse a lo que venga- respondió Cordelia con firmeza, sin apartar la vista de Ellie, su voz impregnada de una pasión decidida.
-Además, mira lo emocionantes que serán las noches en su compañía. Nunca más tendrá que preocuparse por la rutina de su vida mortal- interrumpió Alice, sus ojos brillando con una mezcla de anticipación y alegría.
-¿Y si no puede soportar la transformación? Esta vida no es fácil.- insistió Eva, mirando a la joven que dormía con una mezcla de preocupación y compasión.
-Cada una de nosotras pasó por lo mismo. Al principio, asusta. La sed, los instintos. Pero con el tiempo, encontrará su camino y nosotras la acompañaremos.- contestó Cordelia acariciando el cabello.
-Y tendremos tantas aventuras juntas. Ahora tiene todo un mundo por explorar, y nos tiene a nosotras para guiarla- dijo Alice con una risa suave, intentando cambiar de tema.
-Solo espero que no se arrepienta de su decisión. La eternidad es una carga pesada a veces.- suspiró, aún preocupada Eva.
-Que aguafiestas eres Eva.-reprocho Alice.
-No la dejaremos sola. La enseñaremos a abrazar su nueva vida. Debe aprender sobre la magia de la noche, el poder de la sangre y los secretos de la inmortalidad-zanjó con determinación Codelia.
-Y las fiestas, ¡oh, las fiestas nocturnas! Estoy segura de que se lo pasará en grande. Imagina todo lo que podemos descubrir juntas.-dijo Alice brillando de emoción.
-Quizás tengas razón. ¿Quién sabe? Tal vez esta transformación sea lo mejor que pudo pasarle. Haremos lo que podamos para que nunca lo olvide.- acepto Eva mirando a la chica con una leve sonrisa.
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Somos la noche.
VampireEllie es una joven ladrona que un día es perseguida por una inspectora poco convencional con la que compartirá más que una persecución. Esa misma noche, Ellie se encuentra con la mujer que la susurra en sueños. Pero los sueños pueden tornarse en pes...