CELIA :
Entro a mi despacho y mi pequeño me espera sentado.
Me siento a su lado y le cuento todo lo que está pasando y el por qué me tengo que casar.
Angel me mira atentamente entendiendo todo lo que le digo... Aveces parece un adulto.
- Entonces ¿Está bién con que Máximo se convierta en tu padre? No haré nada que no quieras.
Hablo sin dejar de mirarlo.
Mi pequeño se coloca de pies y me abraza.
- Mami, sé que todo lo que haces es por mi bién y por eso siempre estaré agradecido, la verdad no tengo problema con que Máximo se convierta en mi padre, se que el es una buena persona y te protegerá de todo.
Dice sin dejar de abrazarme.
Sonrío y le abrazo de vuelta.
- Te amo mi pequeño, eres la luz de mi vida.
Digo para besar su mejilla y empezar a hacerle cosquillas.
- JAJAJA, mami... Ya... JAJAJA.
Me detengo cuándo ya es suficiente.
- Necesito que busques a Patri, Marcos y Hugo, dile que quiero hablar algo urgente con ellos.
Le digo a mi pequeño.
Este asiento y se va.
Minutos después entran a mi despacho.
¿- Que está pasando Celia?
Entra Patri preocupada y atrás le sigue Marcos y Hugo.
Le explico todo lo que está pasando y el por qué debo casarme tan pronto.
¿- Y estás segura de casarte con él?
Me pregunta Hugo frunciendo el ceño.
- Si no lo estuviera no lo haría Hugo.
- No le hagas caso a Hugo pequeña, Patri y yo te apoyaremos, Máximo es un buen chico y se mira que te quiere mucho.
Dice Marcos con una sonrisa.
- Es cierto, ese muchacho está loco por tí, así que no desaproveches la oportunidad.
Me guiña un ojo Patri.
Sonrío y me dirijo a ellos para abrazarlos.
- Muchas gracias por apoyarme, los amo como si fueran mis padres.
Digo abrazandolos.
- Lo sabemos Pequeña.
Dice Marcos sonriendo.
Patri se separa y se limpia una lagrima imaginaria.
- Bueno, no hay que perder el tiempo hay muchas cosas que hacer.
Dice colocándose de pies.
- Es cierto ... Y Patri necesito que llames a Mark, dile que su hermana se va a casar esta noche.
Digo para salir de mi despacho.
- Se va a enojar contigo por no avisarle con tiempo.
Dice Patri.
- Lo sé, por eso no lo he llamado.
Hablo saliendo de mi despacho.
- Espera Celia... ¿Podemos hablar?
Me detiene Hugo.
Asiento y el me lleva a un lugar apartado.
¿- Enserio te vas a casar con él Celia?
Me pregunta y yo ruedo los ojos.
- No eres sordo Hugo, no tengo que repetirte las cosas más de dos veces ¿Me trajiste aquí solo para preguntarme eso?
Digo suspirando.
Él pasa la mano por su pelo.
- Supongo que nunca tuve una oportunidad contigo... ¿Él te gusta mucho?
Asiento con una sonrisa estúpida.
- Bién me doy por vencido Celia, espero seas feliz con el idiota de Máximo.
Dice mientras suspira.
¿- Enserio lo dices?
Pregunto con una sonrisa.
- La verdad no quiero que seas feliz con él, pero hay que aceptar la derrota.
Le doy un golpe con el puño.
- Imbécil egoísta... Lo mejor sería que vayas por un traje nuevo... Serás mis testigo.
Digo para irme con una sonrisa el rostro....
Unas horas pasaron y me encuentro colocándome los tacones con la ayuda de mi estilista, cuándo mi puerta es tocada.
- Pase...
¿- Como es eso de que te vas a casar mocosa?
Escucho la voz de Mark.
Termino de colorcarme los tacones y me coloco de pies para lanzarme a sus brazos.
- Mark, hermanito lindo ¡Llegaste!
Hablo emocionada, Mark es como el hermano que nunca tuve.
Él me abraza y luego me separa.
¿- Cómo es eso de que te vas a casar y apenas me entero?
Dice frunciendo el ceño.
- Es una larga historia... Patri te la contorá, pero me alegra que vinieras.
Digo para pagarle a mi estilista y despedirla, me ha dejado muy hermosa, llevo un maquillaje no tan sencillo ni muy cargado, algo para la ocasión, junto a un hermoso recogido con algunos flecos fuera.
Mi vestido es de color blanco, de escote en v, pegado en la parte de arriba con hermosas piedras y la falda suelta, con un corte hasta las rodillas.
Mis tacones agujas son del mismo color de mi vestido con hermosas piedras.
Mark toma asiento en un mueble, mientras me observo en el espejo.
- Estás hermosa, no sé por qué te miras tanto en el espejo.
Dice rodando los ojos y sonrío.
- Sé que estoy hermosa, pero no puedo evitar mirarme, es una mala costumbre que tengo.
Digo arreglando mejor mi escote.
Mark niega y escucho como la puerta es abierta dejándome ver a mi pequeño que está muy guapo.
Lleva un traje negro a la medida y su cabello echado hacia atrás.
- Waoo mami, estás hermosa... Pareces una princesa de la vida real.
Dice mi pequeño sonriendo.
- Gracias cariño, tu también estás guapo... ¿Saludaste a tu tío Mark?
Digo señalandolo.
Angel asiente sin prestarle mucha atención.
- Lo saludé cuándo llegó... Pero él no es importante en estos momentos.
Mark lo mira mal y mi pequeño le sonríe con burla.
- Lo siento tío Mark, pero mi mami es el centro de atención hoy.
Mark iba a hablar, pero la puerta es abierta.
- Es hora de irnos Celia ¿Estás lista?
Pregunta Patri entrando con un hermoso vestido largo de color azul y pegado, resaltando su hermosa piel morena.
- Si estoy lista... Te vez muy hermosa Patri.
Élla me sonríe con cariño.
- Tu también estás hermosa mi niña, pareces una muñeca.
Dice acercándose a mí con una sonrisa.
- Mirate hoy te casas... Me hace feliz que encuentres tu felicidad, estoy orgullosa de haberte tenido conmigo todos estos años.
Mis ojos empiezan a aguarse.
- Patri...
- No, no llores pequeña... Arruinaras tu hermoso maquillaje.
Dice para dejar un beso en mi frente.
- Ustedes dos, vámonos que se nos hace tarde.
Habla dirigiéndose a Mark y Angel....
Media hora después estoy caminando por el pasillo de la iglesia agarrada de Marcos, al fondo miro a Máximo con un traje negro a la medido, su cabello bién recogido en una coleta y sin cubre bocas.
- Es tuyo, así que disimula y deja de comertelo con la mirada.
Me susurra Marcos.
- No me lo como con la mirada.
Le susurro igual, mirándolo mal.
- Claro que sí, lo desnudas con la mirada... Cierra la boca que babeas.
Le doy disimuladamente con el codo para que deje de hablar.
- Hablas de mí, y no apartas los ojos de Patri ¿Es que no te cansas de ver esos pechos?
Digo con una sonrisa disimulada, mirando como frunce el ceño.
- Ya has silencio estamos llegando.
- Te salvas por eso.
Digo mientras miro ese cuerpo de Máximo... Esta buenote la verdad.
Marcos me entrega a Máximo.
- Espero que la cuides y respete como se merece o vas a probar mis puños Máximo Cooper.
Habla Marcos con una sonrisa.
- Le aseguro que los puños no serán necesarios señor Alvares.
Dice Máximo sonriendo igual.
Marcos asiente y se retira para colocarse al lado de Patri y tomar su mano... Esos dos se aman con locura, hacen una linda pareja como la leche con café... Mmm rico.
El padre empezó a hablar bla, bla, bla...
Dimos el sí... Nuestros anillos... Y después el beso para sellar nuestro matrimonio, firmamos los papeles y listo.
La madre de Máximo lloraba a mares.
- Bienvenida a la familia pequeña, me alegra que Máximo haya sentado cabeza.
Dice abrazándome con lágrimas en los ojos.
Las hermanas de Máximo me felicitan y me dan la bienvenida a la familia, al igual que que Maximiliano el padre de Máximo.
- Es hora de irnos mi señora.
Dice Máximo tomando mi mano.
¿- Irnos?
Lo miro confundida.
- Eres mi esposa ¿Que pensabas, que regresarías a tu mansión la noche de nuestra luna de miel?
Dice halandome tras él.
- Pero... Espera...
- No te preocupes por nada, Patri y mi madre se encargarán de todo, tu solo te ocuparas de mi esta noche... Así que prepárate.
Dice guiñandome un ojo con una sonrisa.
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La venganza de una madre soltera
RomantikLuego de Cecilia sufrir un calvario a monos de Victor Cortés aún siendo una joven de dieciocho años, y de sus padres entregarla a ese monstruo... Escapa cuando es obligada a abortar su bebé. Años más tarde la chica no es la misma de antes es una imp...