Penelope sonrío a pesar de todas las lágrimas de ese día, las palabras de Ant le alegraban la vida y calentaban su corazón, se separó un poco de el para poder seguir a la habitación designada, al ingresar Penelope se dio cuenta que esta estaba decorada con varios arreglos florares y en la cama había una pequeña cajita de color negro, Con un asentimiento el vizconde la incito a cogerla, cuando la abrió había un collar muy delicado y el dije era una mariposa con incrustaciones de diamante, era delicada y hermosa- Cuando la vi solo pude pensar en ti, eres delicada pero hermosa y como una mariposa has renacido, quiero que cada vez que la utilices te acuerdes de lo fuerte que eres y que a mis ojos eres la mujer más hermosa- sin esperar mucho Ant le ayudo a ponerse el collar, Pen se vio en el espejo, sinceramente el collar le quedaba perfecto, la hacía ver tierna y poco ostentosa como siempre le habría gustado.
Se dio media vuelta y tomando por sorpresa a Anthony lo beso, este beso empezó de manera lenta, como dándole gracias por lo maravilloso que era pero de un momento se volvió exigente, fogoso y apasionado, Penelope le dio una pequeña mordida al labio inferior de su prometido y este soltó un pequeño gemido, esto hizo que algo empezara a crecer en su parte baja aunque esta era una sociedad en la cual las mujeres no sabían mucho sobre intimidad, ella siempre había sido curiosa y con mucha cautela y a escondidas de su madre muchas veces había leído libros un poco explícitos, no era justo que los hombres supieran todo y ellas nada.
Tenía muy en mente de que todo lo que había leído quería llevarlo a la práctica pero también sabía que era mejor esperar a casarse aunque no haría mal poder explorar un poco, Anthony estaba en un dilema parecido, llevaba tantos años sin tocar el cuerpo de una mujer que con solo los besos de su Pen su masculinidad reaccionada, el beso se volvió exigente y pasional, Ant paso sus manos lentamente por su espalda, el principio de sus nalgas y con su mano derecha apretó una lo cual hizo que Penelope soltara un gemido y Dios eso fue el paraíso para él, su voz siempre le había parecido hermosa pero escucharla en un gemido hacia que algo dentro de él se activara, con su mano izquierda la paso lentamente por su abdomen y luego le toco los senos, esos senos que muchas veces había soñado pero el tocarlos era lo mejor, tan suaves y grandes que no cabían en sus manos y Penelope no se quedaba atrás dejándose llevar por aquel momento tan íntimo deslizo sus manos por su pecho fornido, poco a poco fue soltando los botones de su saco y levantando la camisa para poder sacarla dentro del pantalón, al lograr su cometido, ingreso sus manos y toco su piel, tan suave y cálida, se deleitó con su cuerpo bien formado y su mano derecha se posiciono en la entrada de su trasero.
Se separaron un momento y Anthony aprovecho para besar su cuello y dejar una fila de estos hasta llegar a su pecho, agradecía que en ese momento el corset que tenía su amada no estuviera tan apretado pues pudo sacar un poco uno de sus pechos, los besos con fervor, Pen gimió de una forma más fuerte, quería más, solo los besos no eran suficientes pero no sabía cómo calmar aquel calor que estaba sintiendo en su parte intimida- Ant quiero más, en serio me siento tan caliente, no sé lo que me pasa- Al escucharla tan desesperada algo en Anthony se ilumino, dejo de besar su pecho lo cual hizo que Penelope soltara un bufido de insatisfacción- Cariño en serio quisiera darte mas pero primero estamos cerca a los aposentos de mi madre por lo cual puede escucharnos y segundo deseo hacerte mía cuando seas oficialmente Penelope Anne Bridgerton- Pen le dio una mirada de tristeza mezclada con aceptación, sabía que lo que estaban haciendo o querían hacer solo se podía o debían hacerlo después del matrimonio pero ya estaba comprometida y tendría que pasar algo extraordinario para que no llegara al altar junto a él, Anthony con delicadeza empezó a vestirla nuevamente.
Comprendo Ant, solo que ustedes los hombres siempre tienen más experiencia en todo esto que nosotras y aunque muchas veces hubiera leído es muy diferente a poder vivirlo de primera mano- Ant quedo boquiabierto como era posible que su dulce Pen hubiera tenido libros poco decorosos en sus manos- ¿me puedes explicar cómo la dulce señorita Penelope consiguió ese tipo de libros?- Penelope encogió los hombros como haciéndose la inocente -Y entiendo lo que quieres saber, haremos algo, poco a poco mientras llegamos a nuestra hermosa boda iremos experimentando pero por favor no me pidas más porque si deseo que llegues con tu virtud al altar- Penelope asintió contenta, agradecía que el fuera tan comprensivo en esos aspectos- Ahora futura esposa, debo retirarme porque la verdad eres una tentación para mí y debes descansar hoy fue un día demasiado caótico para ti- le dio un tierno beso en los labios y cuando estuvo a punto de salir le indico que la amaba y antes de cerrar la puerta tras de el escucho un Te amo de la boca de su amor.
Había tenido que reunir toda la fuerza de su vida para poder detenerse y no desnudar a Penelope, siempre había considerado que era una Diosa, tan culta, tan perfecto pero cuando la estaba besando, tocando esos grandes y hermoso pechos solo pudo ver una Diosa demasiado lasciva que lo llevaría al profundo del infierno solo con su toque, sintió como nuevamente su masculinidad despertaba y es que ella tenía ese efecto en su cuerpo, debía darse una ducha o una ayuda para poder dejar de sentir ese dolor tan incómodo en su entrepierna, así que caminando tan rápido como era permitido ingreso a su cuarto.
Penelope había dormido poco, lo cierto es que como bien había comentado Anthony el día anterior estuvo lleno de acontecimientos y muchas emociones, la mayoría de la noche estuvo pensando en cómo sería su vida de ahora en adelante y que tenía mucho miedo, le daba miedo no poder superar las expectativas que tenían de ella, el ser Vizcondesa era una gran responsabilidad pero así mismo daría todo de sí, la otra parte de la noche pensó en el beso compartido con su futuro esposo, le hizo sentir cosas en su cuerpo que eran difíciles de describir pero se sintió tan bien, quería repetirlo de nuevo y vivir todas esas experiencias y más junto a él.
Gracias a Daphne tenía algo que ponerse ese día, en el momento de recoger cosas de su cuarto solo había pensado en sus plumas, algunos libros y tinta pero la Duquesa le indico que sería mejor llevar un vestido para el día siguiente, se llevó el más sencillo pero se veía tan fresca y relajada con el igual que como se sentía en ese momento.
Al acercarse al comedor la mayoría de la Familia Bridgerton se encontraba allí, los Duques y Condes hacían acto de presencia, Hyacinth fue la primera en saludarla, se acercó y le dio gran abrazo, para nadie era algo oculto que aquella niña quería más a Penelope que a su propia hermana- Espero que pudieras dormir bien y aunque anoche no te hubiera podido decir nada, sabes que siempre cuentas conmigo y estoy muy ilusionada de que seas mi hermana aunque siempre te considere una- Penelope le devolvió el abrazo- tú también ya eres una hermana para mí- después de tan lindo recibimiento realizo las reverencias respectivas, Anthony ya se encontraba de pie esperando su llegada para ayudarla a sentar y así empezó su nueva vida, una que sabía seria grandiosa.
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ELLA SERÁ AMADA (PENELOPE FEATHERINGTON)
FanfictionEra la temporada de 1888, pen ya era considerada una solterona, aun seguía teniendo una gran cercanía con la Familia Bridgerton pero lo que mas sorprendía a todos es que era muy cercana al Vizconde. En este libro quiero explorar la posibilidad en...