Parte 23

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Ese día seria el baile de Vauxhall, Frannie había planeado que en la mañana se jugara Pall Mall pero para su mala suerte y de todos de manera extraña había estado lloviendo, la lluvia no había sido fuerte pero aun así estaban a pocos días de un gran compromiso por lo cual era mejor evitarlo, por lo tanto, decidieron quedarse dentro del salón y disfrutar de los juegos y el piano, al terminar el almuerzo se dirigieron cada uno a sus habitación, debían alistarse para la velada y sobre todo Penelope pues sería el primer evento como la prometida de Anthony, lo cual la tenía demasiado nerviosa y un poco asustada, quería no pensar en eso pero sabía que hablarían de todo lo que su madre había estado comentando en los últimos días.

Aunque muchas cosas en ella cambiaran, las inseguridades muchas veces se encontraban a la orden del día y Anthony que la conocía tan bien sabía que algo así podría pasarle, así que cuando se disponía a alistarse escucho unos pequeños golpes en su puesta, cuando la abrió encontró a su prometido con una caja grande en sus manos. –Amor mío, sé que tienes muchas cosas en tu cabeza en este momento pero sabes que nuestro amor está más allá de las habladurías de la gente por eso hoy quise traerte un regalo, hace unos días le pedí ayuda a mi madre para que te confeccionaran algo, sé que te verás hermosa, siempre te ves de esa manera pero quiero que deslumbres y que sepan que yo, Anthony Bridgerton soy el hombre más afortunado del mundo porque me concediste el placer de estar a tu lado. –Penelope que aún seguía sin creerlo, reacciono rápido y lo abrazo, no le importo si estaban en el pasillo, le dio un tierno beso en los labios y se preguntó que como alguien supiera tanto sobre ella –Antes de que puedas decir algo, te amo y me retiro, se nos hará tarde y deseo que todos vean pronto a mi hermosa prometida –le dio un beso rápido y como llego se fue, todo había pasado demasiado rápido, con la caja en sus manos ingreso a su habitación, tenía curiosidad por saber cómo sería el vestido que le dio su prometido.

El vestido era hermoso, tenía un corte griego que caía libremente, sabía que lo esté caería hasta el piso y que podría arrastrarlo un poco pero no importaba y su color, era el Azul Bridgerton, el pecho tenía varias incrustaciones de diamante, sabía que le debió costar mucho pero era un regalo hermoso, tenía una delicada tiara y unos guantes cortos, la tela era delgada y muy suave.

Después de darse un baño, por fin se puso el vestido y se sintió como una diosa, el vestido le quedaba perfecto, se ceñía de forma perfecta a sus curvas y el escote aunque era un poco bajo no pasaban las normas del decoro, le realizaron una trenza baja la cual dejaba varios mechones de su lindo cabello suelto, donde quedaba de manera perfecta la diadema, su doncella estaba lista con sus guantes en la puerta, pues ya le había indicado que la estaban esperando en el salón.

Cuando llego al salón, la mayoría se encontraba a la espera no sé dieron cuenta de su llegada, busco con su mirada a su prometido pero este no se encontraba ahí, Eloise vio a su amiga, se veía deslumbrante –Realmente mi hermano es un hombre con mucha suerte, te ves hermosa hermana, me gusta el azul Bridgerton –Penelope se sonrojo, no estaba acostumbrada a los halagos, además porque esta vez sabía que eran ciertos, por primera vez en mucho tiempo se sintió deslumbrante –Mi hermanita tiene razón, Pen te ves hermosa, ese vestido te queda perfecto sino fueras la prometida del vizconde yo te pediría que te escapes conmigo –Anthony que estaba llegando carraspeo –Hermano no tientes la suerte que has tenido en tu vida porque si te metes con lo que más amo tendremos demasiados problemas –al momento de estar frente a Penelope, hizo una reverencia, tomo su mano y la beso -realmente eres demasiado hermosa, pareces una diosa que llego a la tierra para que todos la adoremos sobre todo me encanta como te queda el azul Bridgerton, naciste para ser parte de esta familia y llevar nuestro apellido en alto, todos se darán cuenta que eres una persona maravillosa y hoy demostrare que yo soy el afortunado de que estés a mi lado –Penelope que aún no se acostumbraba a los cumplidos de su prometido se sonrojo de forma exagerada, ya que estos los había dicho delante de toda la familia y no estaba acostumbrada a ser el centro de atención, en ese momento llego Lady Violet, la cual al ver a Penelope quedo sin palabras, sí que se veía en paz, estar lejos de su madre había hecho que ella se viera tranquila y con más confianza en sí misma.

ELLA SERÁ AMADA (PENELOPE FEATHERINGTON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora