|CAPÍTULO 14|

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“JungKook y yo pasamos la noche juntos”. No debería sorprenderme o desagradarme que Joy viniera el otro día a contarme eso. No obstante, lo hace. Me revuelve el estómago pensar que mi mejor amiga tuvo sexo con su casi algo. Tampoco voy a ponerme en el lugar de mojigata excusándome con que está mal lo que hicieron. Se gustan, son adultos y él parece satisfecho con lo que sea que tienen. ¿Por qué no le gustaría estar con una mujer tan hermosa como lo es SooYoung? ¿Por qué a mí me molestaría? Sería la solución a todos mis problemas y el de mi querido novio para que deje sus absurdos e injustificados celos. Aunque últimamente está tranquilo.

Hoy fue el final de los primeros exámenes del semestre. Terminé los míos ayer por lo cual no me siento preocupada ni estresada. En realidad doy por hecho que sacaré las mejores calificaciones ya que siempre ha sido así desde que ingresé a la carrera. Así que está noche en la que se celebra la fiesta en la discoteca Astro merezco una salida llena de diversión. Junto a Joy y otras compañeras hemos trabajado mucho en la organización llegando a prever que habrá concurrencia de casi toda la universidad.

Para mí buena o mala suerte —no sé— EunWoo no podrá acompañarme. Su padre lo requería en una importante cena de negocios. Así que solo seremos mis amigas y yo está noche, a menos que Joy decida abandonarme para irse con… JungKook. Suspiro mirándome frente al espejo de cuerpo entero en mi guardarropas, escogí algo más tranquilo que un vestido. De repente el frío llegó y la verdad no me apetece enfermar. Termino de colocar labial y decido salir para tomar mi bolso. Cuando bajo veo a mi madre sentada sobre las piernas de mi padre frente a la chimenea apagada, sonríen mientras leen un libro y comparten una copa de vino.

A veces envidio su hermosa relación. Nada más lejos de mi realidad.

—¿Ya te vas, mi colibrí?

—Así es, omma.

Mi teléfono vibra con un mensaje en el que me avisan que ya se encuentran abajo esperándome. Mi madre llega a mi lado cuando estoy a un paso de salir y acomoda mi cabello detrás de mis hombros.

—SunTae, diviértete, te mereces una noche lejos de los problemas y preocupaciones.

Ella es como mi mejor amiga, quien me conoce y trata de comprender mi relación amorosa con EunWoo sin meterse del todo. No está muy de acuerdo puesto que me ha visto llorando por él e incluso escuchó alguna que otra discusión, pero agradezco que no intente obligarme o sermonearme. Al menos ella no, pero papá. Si el supiera no dudaría en hablar muy seriamente con mi novio o con el propio padre de este.

Otro mensaje apurándome. La abrazo besando su mejilla antes de salir por la puerta. En diez estoy abajo, veo a Seulgi frente al volante y a Eunbi de compañía en el asiento de copiloto, Joy va detrás muy enfrascada en su teléfono. Las saludo ni bien entro a la parte trasera y mi mejor amiga me abraza efusiva. Hay algo de música para animar el ambiente, son risas contando quienes estarán en la fiesta y quienes harán el tonto, porque siempre hay una anécdota que termina siendo la controversia de la semana. Yo diría que es más el bullying que algunos reciben.

Cómo las organizadoras del evento debemos estar un rato antes corroborando absolutamente todo. Los hombres en la entrada recibiendo ordenes de Eunbi para que no permitan pasar a nadie que no tenga invitación. No habrá excepciones. EunSeok hermano de EunWoo y dueño de Astro me avisa que está en su oficina por si lo necesitamos. Cómo su cuñada permite que nosotras tomemos las decisiones. Después de todo, este tipo de eventos ayuda a que su club termine siendo uno bastante concurrido dándole cierta exclusividad.

La gente llega tomando una mesa, comprando tragos o moviéndose al compás de la música. Aún es temprano. Todo parece ir bien, Joy me delegó su parte a último momento pues prefiere ser la anfitriona de su ¿Novio? ¿Ligue? ¿Crush? ¿Qué son? No sé, tampoco debería importarme. Eso solo significa que podría relacionarme con Jeon sin problemas en el mismo entorno, después de todo tenemos muchas cosas en común. Y mal que me pese, su presencia en mi vida se está volviendo una costumbre.

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