He escuchado que 'el pasado siempre vuelve', y no importa cuánto intentes ocultarlo, siempre encontrará la forma de atormentarte. Construí mi imperio en las sombras, impulsado por una necesidad de venganza que no comprendía del todo. Pero cuando el...
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Han pasado dos días desde el pequeño derrumbe que provoqué en el edificio. Todos estaban preocupados por cómo reaccionaría Leopoldo, pero, sorprendentemente, en lugar de mostrarse molesto, se mostró bastante satisfecho.
Mis hermanos, acostumbrados a la estricta disciplina de el, esperaban una reprimenda severa, pero la sonrisa que se dibujó en el rostro de Leopoldo cuando escuchó lo sucedido dejó a todos desconcertados.
-Eso es lo que esperaba de ti -fue lo único que dijo, con un tono que mezclaba orgullo y aprobación.
Desde ese momento, el ambiente en la casa ha cambiado. Mis hermanos, aunque aún algo desconcertados, parecen haberse relajado un poco. Pero yo sé que esto no termina aquí. Leopoldo siempre tiene un plan, y si está satisfecho, es porque todo esto juega a su favor de alguna manera.
Mi mente no deja de trabajar, analizando cada movimiento, cada palabra, cada reacción. Sé que debo estar preparada para lo que venga. El juego apenas ha comenzado, y el tablero se está alineando a mi favor... al menos por ahora.
Reviso las grabaciones del club y del edificio, a los cuales Massimo había restringido mi acceso. Sin embargo, hay un aspecto positivo en esta situación: mis hermanos ya no me conocen tan bien como antes. En cambio, yo sí los conozco a ellos, y he dedicado tiempo a capacitarme en diversas áreas para tomar decisiones más acertadas. Mi vida es compleja y mi entorno peligroso, por lo que siempre debo estar preparada para cualquier eventualidad.
Después de tres horas mejorando las imágenes de las cámaras, no encuentro nada sospechoso hasta que...
-Maldita sea
... Decidi investigar al hombre con el que hablé esa noche, aquel con los hermosos ojos azules. Sin embargo, parece que nadie quiere hablar sobre él. Algunos dicen no conocerlo, mientras que otros se limitan a ofrecer excusas vagas. Incluso Mateo, uno de mis mejores soldados, se muestra reticente a ayudarme, y mis hermanos se mantienen igualmente herméticos.
Esto solo refuerza mi sospecha de que algo más está en juego, algo que todos, excepto yo, parecen saber. No es normal que toda la gente que debería estar a mi disposición se cierre de esta manera. Está claro que hay una red de silencio tejida alrededor de este hombre, y si mis propios aliados no están dispuestos a cooperar, tendré que encontrar otra manera de llegar al fondo de todo esto.
Trabajo y más trabajo. Si no es la empresa, es la organización. A veces me pregunto cómo sería ser una persona normal... pero ¿a quién engaño? La verdad es que no me gustaría ser una persona normal. La adrenalina, el control, el poder que siento en cada decisión, en cada movimiento estratégico... eso es lo que realmente me impulsa.
La vida común nunca podría ofrecerme lo que obtengo de este mundo. Ser "normal" significaría conformarme con menos, y yo no estoy hecha para eso.
Me encuentro supervisando la recolección de los restos del edificio que derribé. Observo cómo los escombros son retirados, cada fragmento de lo que alguna vez fue una estructura imponente siendo arrastrado y cargado en camiones. Para la mayoría, esto solo es el final de un viejo edificio, pero para mí, es el comienzo de algo nuevo, algo mucho más grande y hermoso.
