Estoy en mi despacho, la oscuridad me envuelve mientras observo la ciudad a través de las ventanas. Me preparo para mi viaje a Estados Unidos, pero mi mente está en otro lugar, atrapada en un laberinto de sombras y recuerdos que nunca parecen desaparecer. A veces me pregunto si alguna vez lo harán.Observo el último sobre que llegó a mi oficina. No tiene ninguna información sobre quién lo envió, solo que es para mí. Lo abro y encuentro fotos, imágenes de mi viaje a la cabaña con Marco. Algunas tienen mi cara tachada, otras la suya. Todas están llenas de amenazas. Pero, como en los dos sobres anteriores, también hay fotos de mis padres siendo torturados.
Esto me hace cuestionar si ellos siguen vivos, si estas fotos son recientes o si son viejas miro la luna.
Mis demonios siempre regresan, especialmente en noches como esta. Son como viejos conocidos que nunca se van del todo, que esperan pacientemente en las sombras a que baje la guardia. Los recuerdos de la noche en que murieron mis padres se repiten en mi cabeza, fragmentos de imágenes borrosas y gritos lejanos que se mezclan con la oscuridad. Son vagos, como un sueño que se desvanece con la luz del día, pero su impacto es profundo, un dolor sordo que nunca desaparece del todo.
Odio recordar. Odio cómo esos momentos regresan para burlarse de mí, para recordarme lo que perdí y lo que nunca podré recuperar. Pero también odio estar a ciegas con lo que realmente sucedió. Es como si hubiera un vacío en mi memoria, un espacio oscuro lleno de incertidumbre y temor. ¿Qué pasó realmente esa noche? ¿Qué fue lo que vi, lo que escuché? A veces, siento que estoy tan cerca de recordarlo todo, pero luego los recuerdos se desvanecen, como humo en el viento.
Recuerdo los disparos, el sonido de las balas atravesando el aire, los gritos de mi madre pidiéndonos que corriéramos, que nos escondiéramos. El rostro de mi padre, firme y decidido, aunque ya sabía que el final era inevitable. Y luego, el hombre que se abalanzó sobre mí... Todo es un torbellino de imágenes y sonidos que se entrelazan en mi mente, confundiéndome, atormentándome.
Estos demonios de la oscuridad se alimentan de mi incertidumbre, de mi miedo a lo que no puedo recordar. Me susurran al oído en mis momentos más débiles, diciéndome que nunca podré estar segura de nada, que siempre habrá algo que no sabré. Se ríen de mí, de mi deseo de control, de mi necesidad de saber la verdad. Me recuerdan que, aunque ahora soy líder, aunque tengo poder, hay cosas que siempre estarán fuera de mi alcance.
Cierro los ojos, intentando ahuyentarlos, pero es inútil. Están siempre ahí, acechando en las sombras, esperando el momento adecuado para atacar. Respiro hondo, concentrándome en la sensación de mis pies firmes sobre el suelo, en el latido de mi corazón. No puedo permitirme perder el control. No ahora.
-No esta vez -murmuro para mí misma, mientras abro los ojos y miro hacia la puerta. Mis demonios pueden esperar en la oscuridad, pero yo tengo una organización que liderar. Y no permitiré que los fantasmas del pasado me detengan.
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IMPERIO OCULTO ( La sombras de la mafia)
Storie d'amoreHe escuchado que 'el pasado siempre vuelve', y no importa cuánto intentes ocultarlo, siempre encontrará la forma de atormentarte. Construí mi imperio en las sombras, impulsado por una necesidad de venganza que no comprendía del todo. Pero cuando el...