Llevaban ya la mitad del juego y el equipo de Liam aún seguía abajo por tres puntos. En el primer tiempo del partido todo había marchado bien, hasta que Max y Tyler ingresaron al campo, desde ese minuto Liam no lograba llegar al arco del equipo contrario o para ser más exactos ni siquiera lograba tomar la pelota, sus nuevos grandes amigos se encargaban de estropear sus intentos y alejarlo de anotar. Lo peor de la situación es que lo hacían ver de forma natural como si el que se hubiese equivocado fuese él y lo lograban, ya que desde las gradas podía escuchar comentarios de desaprobación hacia sus habilidades.
Justo esta noche sus padres habían conseguido un permiso de sus trabajos y estaban en primera fila viéndolo jugar, él quería ganar para que ellos lo vieran, pero ya no estaba seguro conseguirlo así como tampoco estaba seguro de seguir teniendo la suficiente cordura para soportar a sus propios compañeros. Todo el avance de los últimos días lo estaba tirando a la basura en esos momentos.
— ¿qué pasa Dunbar, el puesto te queda grande? — le dijo Tyler pasando por su lado para la formación de un nuevo saque
— debiste quedarte en las gradas — escucho decir a Max desde su otro costado, también en la línea de saque
Manteniéndose sereno Liam volvió a recordar que sus padres lo estaban viendo, respiro profundo y se puso firme en su lugar, “ni siquiera lo intentes, no llegaras” volvió a escuchar debilitando su estabilidad, pero otra voz llegó a sus oídos desplazando a los idiotas que tenía al lado “Liam sé que me puedes escuchar y yo también los escucho” era Theo, otra vez al igual que esa noche ¿entonces no lo imagino?
— Es él — dijo en un susurro para sí mismo, sintiendo de nuevo crecer la calidez en su pecho
“Tú puedes hacerlo, sé que puedes eres mejor que ellos”, siguió oyendo la voz de Theo mientras el reloj seguía corriendo solo a veinte segundos del saque, “concéntrate en la realidad no te pierdas por favor” “te necesito”, escucho y las palabras hicieron eco en su mente “te necesitamos, Mason y Corey también te necesitan” “o eso dicen”, fue lo último que dijo provocando que se riera y que sus compañeros a su lado lo vieran confundidos. Liam solo los ignoro, reafirmo el agarre en su palo, luego el silbato sonó y la pelota fue lanzada en el aire, más seguro y confiado que nunca, Liam salto atrapándola en la red y comenzado a correr. Dejo de ver, no le importo si eran rivales o compañeros, solo corrió hasta llegar a la meta y chocar la pelota en el arco, consiguiendo el primero de los cuatro últimos puntos de su equipo.
Para cuando el árbitro indicó el fin del juego las gradas ya se habían convertido en un desorden, las personas gritando y festejando por el equipo local, el coach siendo mojado por alguno de sus alumnos en señal de victoria y él encontrándose atrapado entre jugadores, porristas y personas que iban a felicitarlo. Con un poco de esfuerzo logró escabullirse y llegar hasta sus padres para ser abrazando y besado por ellos, su madre contenía algunas lágrimas mientras lo felicitaba y aunque añoraba ese momento, Liam no podía evitar buscar con su mirada a Theo.
— ¡Felicidades, amigo! — Mason apareció detrás antes de lanzarse encima para animarlo — ¡lo hiciste increíble!
— gracias Mason — dijo acercándose a su oído — ¿no viste a Theo? — pregunto en voz baja
— estuvo con nosotros en las gradas y luego se desapareció
— la verdad, parecía molesto — menciono Corey en voz baja, ya que los padres de Liam seguían cerca de ellos — solo dijo “los veo en un rato” y cuando nos volteamos ya no estaba
— ¡listos para ir a celebrar! — pregunto la madre de Liam regresando a su lado — tus amigos también están invitados y Theo también ¿por cierto donde está?
— él… se quedó hablando con unos compañeros — excuso Mason — pero nos alcanzará en seguida
— ¿seguros?
— ¿a dónde nos llevarán? — siguió Mason intentando distraer a la Sra. Dunbar mientras caminaban fuera del campo y la multitud
Liam por su parte no pudo evitar preocuparse por Theo “estaba molesto” había dicho Corey y temía que fuese por lo que paso en el juego, mucho más aún le preocupaba que Raeken hiciese alguna locura.
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El infierno que hay en mí 《Thiam》
FanfictionDespués de que Scott y casi toda la manada se fueran de Beacon Hills, los problemas parecen haber acabado o por lo menos los sobrenaturales. Liam, el beta y futuro alfa aún debé terminar su último año en el instituto, después de meses enfrentando en...