Capítulo 20: Cosas por contar

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La espalda de Liam chocó contra la puerta y sus piernas se elevaron enredándose en Theo quien lo sujetaba de los muslos, sus cuerpos colisionaban dejando al descubierto la necesidad y el deseo que contenían. Liam mantenía sus dedos enlazados al cabello de Theo aferrándose a él e intensificando cada roce de sus bocas, sus lenguas se movían en sincronía con una lujuria que cortaba sus respiraciones.

Theo deslizó lentamente su mano hasta la espalda de Liam sujetándolo con firmeza, tomo con fuerza su cuerpo y camino con el hasta dejarlo sobre el escritorio. Sus manos quedaron libres y no perdió la oportunidad de recorrer la piel bajo el suéter de Liam dejando caricias a su paso hasta llegar a su pecho, los pezones duros por el calor del momento chocaron contra la punta de sus dedos obligándolo a reprimir un gruñido al sentir la piel en sus manos. Con una electricidad recorriéndolo lo tomo entre sus dedos, estirándolo y jugueteando con él, provocando gemidos que se perdían en sus labios.

— está… ¡ah!… esta es tu manera de conocernos — las palabras de Liam se escuchaban sofocadas, sus labios estaban completamente ruborizados y húmedos 

— te diré todo, todo — le aseguro Theo sin dejar de mirar su boca — pero déjame disfrutar esto un poco más 

Los besos y los roces continuaron hasta que la realidad los golpeo y se vieron obligados a separarse, sus rostros eran un desastre, sus cabellos revueltos y sus ropas arrugadas, sin mencionar el desorden en el que se había convertido su escritorio.

— tu mamá no debe tardar en llegar 

— hay que bajar y apresurarnos

— o podríamos tardarnos unos minutos más 

— Theo, no — le advirtió ocultando una sonrisa de complicidad — luego — dijo antes de salir y alejarse de la quimera para no caer de nuevo en sus trucos de seducción 

Las miradas de Theo y Liam se encontraban una y otra vez durante la comida, provocando un sonrojo bastante notable en el pequeño beta que aclaraba su garganta cada vez que Theo le sonreía sin disimulo. Liam intento escapar de sus insinuaciones y se ofreció a levantar la mesa y lavar los platos.

— ¿te sientes bien? — le pregunto su madre acercándose al lavado

— sip 

— ¿seguro? Porque es la primera vez que te ofreces a lavar los platos sin que yo te lo pida y sin quejarte 

— es que… quiero ayudarte más en la casa 

— oh que bien, entonces podrás hacer las compras, trapear o lavar la ropa — la señora Dunbar sabía que su hijo le ocultaba algo 

— te puedo ayudar en lo que necesites — le aseguro comenzando a arrepentirse de sus palabras, detestaba limpiar y no podía evitar el horror en su rostro al imaginárselo

— si me dices lo que te pasa no te pediré ayuda en nada 

— no me pasa nada

— Liam

— mamá

— ¿quieres que le pregunte a Theo? Estoy segura de que él no me va a mentir 

Con un suspiro de rendición, Liam se acercó a su madre guiándola hasta la puerta del patio trasero, una vez afuera se permitió alterarse, solo un poco, caminado de un lado a otro hasta lograr encontrar las palabras para decirle a su madre que el chico al que llevo a su casa ahora le gustaba. Nunca había hablado de su sexualidad con sus padres más allá de la clásica e incómoda charla por la que todo adolescente pasaba.

— Liam no voy a juzgarte ni hacerte preguntas, solo quiero saber lo que te pasa 

— me gusta alguien, pero no es una chica 

— ¿es tu amigo? — no hizo falta que Liam contestara, su cara lo decía todo — eso no tiene nada de malo

— nos estamos conociendo 

— bien 

— pero todavía tengo muchas dudas

— eso es normal 

— no sé lo he dicho a nadie, solo lo sabían Mason y Corey y ahora tú

— nadie va a juzgarte, ¿lo sabes, verdad?

— si lo sé, pero quisiera esperar un poco antes de decir o hacer algo 

— puedes contar conmigo, hijo — le aseguro su madre dándole un abrazo y dejando un beso en su frente — pero ahora debes terminar con los platos 

— ya voy — con un peso menos sobre sus hombros y con una sonrisa infantil en el rostro, Liam volvió a la cocina. Hablar con su madre no había sido tan difícil, tal vez decírselo a Scott y Stiles tampoco lo sería 

El infierno que hay en mí 《Thiam》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora