Una Noche...? •Kookmin•

40.

Jungkook

Me despierto aturdido y confundido, me cabeza duele mucho y me cuesta recobrar el sentido, pero cuando lo hago me levanto del suelo de inmediato, el miedo y la preocupación se apoderan de mí, sé que nada bueno le ocurrirá a mi pequeño amor, por lo que salgo corriendo en busca de él, no sé bien dónde podría estar, pero necesito encontrarlo ya mismo.

Sin muchas pista de su paradero decido llamar a Tae, tal vez recurrió a él, por lo que una vez fuera del hotel le marco y al mismo tiempo detengo un taxi.

-Hola amante de mi querido amigo desaparecido, ¿por qué me llamas?- contestó con carisma Kim.

-¿Sabes dónde esta Jimin? Pelee con el idiota de su marido y dijo algo que me preocupa, necesito saber dónde está.

-Wow eres el segundo en llamar por eso, pero espera ¿qué ocurrió?

-¿El segundo?, ¿Quién más te llamo?

-Oh claro, no sé cómo pero el maldito e imbécil de su esposo consiguió mi número, preguntó si estaba conmigo pero le dije que no, antes de colgar oí que de seguro estaba en casa, pero Kook ¿Qué rayos esta ocutriendo?- preguntó preocupado Tae.

-No puedo decirte ahora, solo llama a emergencias y envíalos al departamento de Min.

-¡Dios mio!... ¡sí claro, adiós!

Sin responderle al amigo de Jimin corto la llamada y apresuro al taxista, solo ruego al cielo que mi ángel esté bien y que ponga en mi camino a aquel imbécil para poder destruirlo.

Luego de 15 minutos por fin llego al complejo, le tiro los billetes al conductor y bajo corriendo para subir hasta el departamento de Park.

Mi instinto se pone alerta, siento que algo malo esta sucediendo y no estoy equivocado, fuertes ruidos se oyen desde donde me encuentro, sonidos que me hacen apurar el paso, ya que sé bien de donde vienen y que sólo demuestran que todo esta muy mal.

Una vez llego delante de la puerta la pateo para poder entrar y la imagen ante mis ojos solo me destruye a mí.

-¡Jimin!- grito con todas mis fuerzas y con mi corazon desgarrado.

Delante de mis ojos se encuentra Yoongi sobre mi pequeño amor, éste tendido en el suelo escupiendo sangre y con algo clavado en el abdomen, algo que Min retira para volver a apuñalarlo, pero antes de que eso suceda me escuentro tacleandolo, gracias a eso lo que llevaba en la mano se pierde por ahí y sin más comienzo a golpearlo.

-¡Te asesinare, eres un maldito enfermo!- grito.

-!Hazlo, moriré en paz porque nadie lo tendrá, ya acabe con él!- contesta Min desquiciado y riendo.

-¡Eres una basura!- digo intentando golpearlo.

La riña se hace cada vez peor, Yoongi se defiende y me propina un puñetazo en el rostro, eso le hace tomar ventaja, por lo que me da unos golpes más y acabo en el suelo junto a Jimin.

-Esto es genial, un dos por uno, tendrás lo que quieres Jeon, estar con Jimin y por toda la eternidad.- dice Min subiendose sobre mi y empezando a ahorcarme.

El aire comienza a faltar poco a poco en mis pulmones, mi vista se pone borrosa y solo ruego al cielo por ayuda, para que me de fuerzas así puedo socorrer a Jimin y sacarlo de aquí, así puedo estar junto a él y hacerlo feliz como se debe, solo quería que algo ocurriera y así fue, con las pocas fuerzas que mi pequeño tenía logra sentarse para darle un puñetazo a Yoongi quien se cae al suelo junto a mi, ambos nos encontramos trantando de recuperarnos, pero yo soy más rapido y lo golpeo en el estómago logrando que se quede sin aire, me subo encima suyo y comienzo a dar puño tras puño en su rostro, cada vez brota más sangre y él menos fuerzas tiene, hasta que por fin ya no responde más.

Con la adrenalina a tope no me di cuenta de cuando comence a llorar, ya que lágrimas caían de mis ojos, los cuales se dirigieron inmediatamente al cuerpo que estaba a unos centímetros de mí.

-Jimin... amor... la ayuda ya viene, te lo prometo, solo aguanta un poco más... No me dejes.- digo sujetandolo entre mis brazos.

-K-Kookie... Vi-niste por m-mí.- dijo con dificultad mi pequeño ángel.

-Claro que vine por ti, te amo y no dejaría que nada malo te suceda.

-Te amo Kook.- dijo en un suspiro mientras sus ojos se cerraban, acto que me preocupo.

-Jimin... Jimin contesta, amor contestame, ¡no me dejes!- proclamo mientras sacudo su cuerpo.

Con lágrimas bloqueando mi vista lo tomo en brazos y comienzo a bajar las escaleras, ya que comence a oír las sirenas, estaba llegando la ayuda y la necesitaba de inmediato, pues mi pequeño ángel me esta dejando.

A pasos apresurados llego a la acera, personas que por allí pasaban se quedaron observando la escena de cómo policías y paramédicos llegaban a socorrerme, de cómo anunciaban que el pulso de Jimin era bajo y que era urgente llegar a un hospital.

Yo solo pude romper en llanto ya que no llegue a tiempo para ayudarlo, me arrepiento de no salir inmediatamente del hotel junto a él, me culpo por todo lo que paso, si tan solo no me hubiera metido en su camino nada de esto habría sucedido.

-Señor, disculpé, pero necesitamos saber qué ocurrió aquí.- la voz del comisario me sacó de mi transe, por lo que mis ojos pasaron de observar a la ambulancia que se iba al hombre que esta parado junto a mi.

-¿A cuál hospital lo llevan?- pregunto sin que me importara lo dicho.

-Al Severance Hospital... Antes de que se vaya necesitamos saber qué ocurrió señor.- repite el hombre.

-Sí, su esposo Min Yoongi lo atacó, él esta en el departamento aún, si necesita más datos sabe donde encontrarme- Sin decir más intento parar un taxi para ir al hospital, el cual consigo de inmediato y apresurandolo solo puedo rogar que todo salga bien.

-Aqui el oficial Wang, me informan que el sospechoso Min Yoongi sigue en el departamento, cambio.- anunció el comisario por su handie.

-Diez-cuatro comisario, aquí no hay ningun sospechoso, cambio.

-Anuncien a todos los móviles que tenemos un fugitivo.

Mis esperanzas no se acaban, el saber que mi ángel esta bien vibra en mi pecho, pero lo que no sabía es que el infierno continuaría.